Esto Acaba De Empezar. OT2017🎵

XVIII. Sin descanso [Ana War]

Hacía menos de 24 horas que la habíamos liado en el pueblo y los policías nos advirtieron no quitarnos la vista de encima y Aitana ya tenía pensados varios planeas e hipótesis.
—Vamos a comenzar entrevistando a el panadero.—Decía mientras daba vueltas por el salón de Amaia.—A todos les diremos que somos las encargadas de la revista escolar, por lo que sólo tendremos que poner esa excusa y ellos desembucharan toda la información sin dudar.
Miriam y yo aplaudimos el plan de Aitana. Amaia también pero con cara triste.
—Amaia, amiga te prometo que cuando terminemos las entrevistas y salgamos de clase te acompañaré a ver a Alfred y hablaremos con el.
—Gracias Ana.—Agradeció Amaia con una voz más dulce y tierna pero a la vez apenada.
—Vale, las clases empiezan en dos horas. Nos dará tiempo a ir a la panadería y el centro tecnológico.—Dijo la gallega.
Aitana y ella se miraron con complicidad.
—Está bien, en marcha.—Dijo Aitana inspirada.
Cuando nos dispusimos a ir hacia la puerta alguien tocó al timbre.
—Esperen abro yo.—Me dirigí hacia la puerta y allí estaba Roi con un brazo escayolado y Luis Cepeda.
—¡Ana!—Grito mi amigo gallego. Bueno. Los dos son gallegos.
En ese momento lloré de la emoción, Roi estaba bien. Le abracé como nunca antes lo había hecho.
Luis me dio un toque en la espalda y entró rápidamente a casa de Amaia.
—Ana, que alegria de verdad.—Decía mi mejor amigo.
—Jo Roi Te echado de menos.
Tras una pequeña charla nos juntamos con los demás.
—¿Así que sabéis un sitio donde puede haber pruebas?—Preguntaba Aitana a Cepeda.
Ni sabia que ya se conocían con tantas confianzas.
—Si.—Señaló a Roi.—Díselo amigo.
Roi tosió.
—Si, en el mismo parque donde estuvimos en los baños de las chicas hay algo interesante. Yo estuve ahí con Cris unas horas antes de todo lo sucedido.—Mire a Miriam mientras Roi hablaba sobre Cris, y ella hizo una mueca.—He visto que parece que sois las únicas que se están tomando en serio este tema, así que si nos permitís, Cepeda y yo nos queremos unir a vuestro escuadrón de policías.
Nos miramos entre todas y asentimos.
—Chicos, se aproxima aventura otra vez.—Dije levantando la mano.