Capítulo 1.
Camila's Pov
Regreso para el cumpleaños de mi mejor amigo
Suspiro antes de tocar la puerta, lo hago y espero unos segundos.
-Justo cuando voy a cenar y...- escucho tras la puerta y abre; trato de disimular mi respiración.- ¿Camila?-Hola Damon.- Ladeo mi cabeza y sonrío.- Espero no haber llegado tarde.
-¡Camila!- Veo a Enzo tras él, corre hacía mí, no puedo evitar sonreír ampliamente.
-Feliz cumpleaños Enzo.-Me abraza fuertemente.- Te extrañe.
-Yo también, pasa.- Asiento, no sin antes dar una mirada al chico de pie junto a nosotros.- ¡Chicos! Miren quien vino a verme.
-¡Camila!- Gritan casi todos, veo a Elena quien está seria junto a su asiento.
-Te extrañamos.- Dice Caroline, besa mi mejilla.- Todos.
-Yo también los extrañé demasiado.- Cargo a las niñas y les beso la nariz.
-Hola.- Stefan se acerca lentamente a mí, todos mis sentimientos empiezan a abrumarme, dejarlos solo así, sin decir nada más, sin comunicarme; suspiro.- Me alegra ver que estás bien.- Asiento y las lágrimas empiezan a empujarse para querer salir.
-Oh, la pequeña niña quiere llorar.- Enzo me da un codazo amigable en el brazo, río.
-Cierra la boca, eso no es cierto.- Levanto los hombros, todos ríen.
-¡Bien! Ahora estamos todos, sentémonos a cenar. Todos empiezan a sentarse y solo hay un asiento frente a Elena.
-La verdad, no tengo tanta hambre.- Paso una mano por mi cabello y creo que Enzo entiende lo que trato de decir.
-¿Cómo no vas a tener hambre? Es mas quiero que te sientes junto a mí, para ver que te acabes todo.
Damon's Pov
Así lo hace, pasamos riéndonos todo la cena, al final Stefan le ofrece su antigua habitación para pasar la noche, ella me ve mientras el cuestiona y duda en aceptarla, pero al final accede.
Elena y yo estamos en mí habitación.
-¿Qué hace ella aquí?- Me veo al espejo del baño mientras paso la navaja por mi rostro y quito la espuma de afeitar.
-No lo sé.- Ella esta recostada en la cama.- Quería ver a Enzo tal vez.
-Damon...- Me dirijo hacía ella y me recuesto a su lado, tomándola por la cintura. Beso su oído y siento como se estremece entre mis brazos.- Quiero que se vaya.- Me detengo y me siento frente a ella.- Es claro que aún sientes algo por ella.- Parpadeo varias veces, sin responder.- ¿Cierto?
-Por supuesto que no, ¿Cómo dices eso?
-Por la forma en que la ves.- Bajo mi mirada.- ¿Crees que no te vi? Pasaste la noche observándola.
-Nena, solo vamos a dormir, ¿Podríamos hablar mañana de esto?
-¿Porque evades mi pregunta?- Me pongo de pie.
-No sé qué esperas que diga, Elena, ¡Te elegí a ti!- Elevo la voz.- Porque te amo, porque eres la que amo.- Lo digo consiente de que ella me escucha. Ella trata de acercarse a mí; tomo una camisa y salgo de la habitación, me dirijo al estudio y me sirvo hielos en un vaso.
-Toma el mío.- Doy un respingo y la veo sentada frente a la chimenea, su mano esta levantada con un vaso de vidrio vacío, me acerco ahí y lo tomo, veo su semblante serio.- Lamento ocasionarte problemas, Damon.- Me gira a ver, sus ojos están algo rojos.
-Está bien, solo es un mal entendido.- trato de sonreírle.- Todo estará bien mañana.- Asiente.- ¿Te sirvo otro?
-Por favor.- Regreso con dos vasos y me siento a un lado de ella, ahora puedo ver con más claridad; está con una cobija encima de sus piernas y solo trae un suéter de color guindo grande.- Extrañaba esto.- me ve.- El clima de aquí es tan... fresco.- Regresa su mirada a la chimenea.
-Si...- Me quedo un momento pensando.- ¿Es lo único que extrañas?- Siento su cuerpo tensarse y escucho su pulso acelerarse.
-Extrañaba lo que era sentirme en casa.- Corta ahí y da un trago largo a su bebida.- Como sea, me quedaré solo unos días, por el cumpleaños de Enzo, después regresaré a viajar y conocer todo.- Pone el vaso en la mesa de centro y se pone de pie, tomando la manta y envolviéndose en ella.- Buenas noches, Damon.- Puedo ver sus piernas descubiertas mientras se aleja.- Buenas noches, Elena.- Veo hacía el otro lado del umbral y está ella de pie, me ve seria y después de unos minutos se va.
-Maldita sea.- susurro.
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No Rules. |Damon Salvatore| Segunda Parte.
FanficÉl no dejaba de pensar si la decisión tomada había sido correcta, y cuando casi se convenció de ello el regreso de Camila hace que sus pensamientos se revuelvan. ¿Personas nuevas en la ciudad? Problemas seguros. Katherine, Klaus y un personaje miste...