Con todo el alboroto que había ocurrido olvide que tenia que realizar mi chequeo, si no fuera por Jongdae ni siquiera lo hubiera recordado. Mi mente estaba en otra parte, me sentía frustrado y aun tenia esas grandes ganas de abofetear a Luhan para ver si así reaccionaba, en verdad no sabía cómo era posible que Suho pudiera vivir así, tratando de resolver todo sin volverse loco en el proceso. Regrese a la realidad en cuanto escuche la voz de Chen susurrandome al oido.
-Xiumin tu vez algo, por que yo no veo más que manchas.
-Pues esas manchas son tu hijo asi que callate.
Lo fulmine con la mirada, el solo hizo un puchero y entrecerró los ojos para tratar de hallar alguna forma en aquella pantalla, note como al doctor se le dibujó una sonrisa, para posteriormente anunciarnos el apocalipsis.
-Bien Señores Kim los felicito tendrán dos pequeños despertadores.
-¿Disculpe?
-O por D.O’s, ¿que son?
Yo solo pude decir aquello completamente aterrado, para comprobar que había escuchado bien. Mientras que Chen se escuchaba algo exaltado y sujetaba firmemente mi mano lastimandome, lo voltee a ver y lucía pálido.
-Parece que tendrán un niño y una niña, mis felicitaciones.
-2×1...
Fue lo ultimo que escuche decir a Jongdae antes de que el soltara mi mano y cayera al suelo cual costal de papas.
-¡¿Jongdae?!
Por suerte estábamos en un hospital y lo atendieron rápido, resulta que se desmayó por la impresión y no tenemos porqué preocuparnos más que por el chichón que empezaba a crecer en la cabeza de Chen. Una hora después ya estábamos en casa coloque una bolsa de chícharos en la cabeza de Chen y me senté frente a él, nos miramos un par de segundos.
-Asustado Kim.
-No te voy a seguir el juego Jongdae.
Lo mire negando con la cabeza, suspire antes de que el volviera a hablar y me atrajera hacia él con su mano libre, sonaba tranquilo.
-¿Algo está mal?
-Para nada solo que no estaba preparado para que me dijeran que serán dos, digo si ya tenía dudas cuando me dijeron que estaba embarazado, qué demonios voy a hacer con dos niños, no hay ningún maldito libro que me diga como ser padres de gemelos.
-Uno, dos qué más da Minseok podemos manejarlo, preocupate si nos hubieran dicho que serian trillizos.
Dijo aquello último algo asustado mientras yo me separe de él para acomodarme y verlo a los ojos, estaba más que consiente que mi rostro reflejaba mi pánico.
-Chen que pasa si aun no me siento listo para esto.
Jongdae boto la bolsa de vegetales aun lado y acuno mi rostro entre sus manos, para asegurarse de mantener en buen contacto visual, a lo que yo solo respondí sujetando sus muñecas para intentar que me soltar. Entonces con toda la paciencia del mundo dijo.
-Minseok escúchame, nadie nace sabiendo cómo ser padre Minnie, que acaso no viste me desmaye en el consultorio, yo tampoco estoy listo para recibir a los bollitos que estás horneando, y creeme siento el mismo miedo que tu, pero ya están aquí y ni modo que los regresemos no se puede. Así que escucha Nos quedan todavía 5 meses para prepararnos, y yo voy a estar contigo así que no hay nada que temer, ¿entendiste?
Yo solo asenti, este hombre cada dia me mostraba algo nuevo de él, pequeños detalles que me recordaban el por que caí rendido a sus pies, acortamos la poca distancia para darnos un dulce beso, no se como Chen se las ingenio para que terminara sentado en sus piernas, me separe de él y mire embelesado su dulce sonrisa de gato.
-Chen…
-Si Minseok.
-¿Que haria yo sin ti?
-Quizás morir sin mi majestuosa presencia a tu lado.
-Chen no arruines el momento por favor, solo cállate quieres.
Me acerque a sus labios y deposite un nuevo beso en ellos, pensé en llevar las cosas a otro nivel pero entonces él abrió nuevamente la boca.
-Ahora entiendo el porque estas mas redondo que Suho.
Tan solo eso bastó para matar la flameante llama de la pasión que estaba encendiendo en mi, me puse de pie y me fui a la habitación mientras le mostraba el dedo de enmedio, escuche sus fuertes carcajadas, y era ahora cuando me cuestionaba el por que me había enamorado de él. Antes de llegar a la habitación sentí como llegaba por detrás y me rodeaba con sus brazos.
-Solo estaba jugando, no te enojes.
-Me has llamado gordo.
-Dije redondo, es una cosa diferente.
-Seguro, como tu digas.
-No te enfades conmigo ya sabes como soy.
Dicho eso depositó un beso en mi cuello, lo cual me obligo a darle mi perdón, el resto se cuenta solo, no tengo que dar detalles de lo que pasa en nuestra habitación.

ESTÁS LEYENDO
Pequeños detalles
FanfictionUna serie de pequeños mal entendidos, traiciones y secretos que definiran el rumbo de la vida de 12 personas