Luhan

536 52 1
                                    

Estaba sentado en mi nuevo departamento mirando atentamente el teléfono sobre la mesita, tenía que hacer esto sin importar las consecuencias. Tome el teléfono y marque aquel número de mi lista de contactos.

-Hola.

-Suho…

-Luhan, ¿Cómo estás?

-Estoy bien.

-Me alegra escuchar eso, ¿Qué es lo que necesitas?

Se escuchaba feliz, me estaba haciendo más difícil lo que tenía que decir, no dije nada por un par de minutos, no encontraba la manera de decirle.

- ¿Sigues ahí?

Pregunto con duda, ante aquel silencio, era ahora o nunca.

-Sí, yo solo quería decirte que renunció.

-No hagas esta clase de bromas por teléfono.

Dijo algo molesto como una madre que regaña a su hijo por una travesura.

-No estoy bromeando digo la verdad.

-Pero, ¿Por qué?

-Me ofrecieron un mejor trabajo en China. No voy a volver a Corea.

-Pero que pasara con tus cosas…

-Eso ya está arreglado.

-Sehun…

-Por favor te encargo que se lo digas.

-Luhan, tú no puedes hacer…

-Dile que no volveré.

Lo interrumpí, sabía lo que iba a empezar a decirme, pero él volvió a decir desesperado casi gritándome.

-Luhan no le hagas esto a Sehun.

-Adiós.

-Lu...

Colgué el teléfono no había más que decir, no volvería a Corea, aunque me lo suplicaran, era tiempo de que empezara de nuevo. Después de todo tenía que solucionar mis propios problemas y Sehun ya no formaba parte de ellos.

Pequeños detallesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora