BRANT
Me encontraba sentado frente al escritorio de mi Jefe Ryan, esperando indicaciones sobre mi nuevo trabajo, el ultimo había sido proteger una niña rica, pero su padre pidió el cambio ya que la malcriada quería algo mas conmigo y aunque trate de ponerle alto, esa niña no entendía un no como respuesta, odiaba cuando me tocaban casos como esos, aparte de que se sentían el ombligo del universo me trataban como si fuera su sirviente.
-Se llama Rachel, tiene 32 años no sabemos mucho de ella mas que es enfermera o estudia enfermería, algo así, no te voy a mentir Brant no tenemos nada de datos sobre ella, los pocos guardaespaldas que han trabajado con ella no me dicen mucho solo que recibieron excelente paga y bonos extra así como amenazas suficientes como para respetar ese contrato de confidencialidad, si te ofrezco este trabajo es porque sé que lo necesitas la paga es excelente, pero es peligroso su padre no es alguien de fiar y no se en que tanto está metido al igual que su malcriada hija.
-No importa Ryan sabes que lo necesito – además de mi jefe era mi mejor amigo, sabía que tenía las cosas difíciles, yo mantenía a mi madre que estaba enferma del corazón y a una adolescente de 14 años que era la hija de mi hermana mayor de la cual no sabíamos nada, un día llego a la casa y nos dejó a una pequeña niña de 5 años que ni sabíamos que existía, porque según ella está perdiéndose la vida por cuidarla, me suena a la misma basura que nos dijo mi padre cuando se fue dejándonos deudas aparte de robarnos prácticamente todo lo que teníamos.
-Tienes fotos de ella?
-No, su padre quiere verte mañana si cree que eres de confianza te pasará información de ella solo a ti, si no te pedirá que te retires.
-Ok, eso es extraño no crees...
-Lo es, Brant yo de verdad no te daría caso, pero recuerdas al Sr. Jhon el que se jubiló hace poco?
-Claro, que paso con él?
-Pues te puedo decir que va vivir muy cómodamente unos años con el dinero que le dieron y los otros dos guardaespaldas que al menos yo conozco están en la misma situación así que el rumor se corrió y todos quieren este lugar.
-Wowww, no por favor dámelo a mí.
-Ten mucho cuidado con esta gente, sabrá dios en que están metidos.
-No te preocupes y muchas gracias por ayudarme.
-Para que están los amigos.
(...)
Al día siguiente me presenté en el bar que me pidieron a la hora y en la mesa que me indicaron, que raro pensé lo haríamos en su casa ya veo que no confía en nadie, estaba en la mesa esperando cuando un gorila se me acerco.
-Eres Brant?
-Así es y tú eres? – el tipo era enorme y gordo.
-Levántate necesito revisarte antes de que entre el Jefe.
-El Jefe?, ¿Qué es esto "Al Pacino"?
-No empieces de gracioso niño porque te largas de aquí, ahora manos sobre la mesa y piernas abiertas.
Maldito idiota si no fuera porque este trabajo era una excelente oportunidad lo mandaría al diablo, mientras me revisaba murmuraba que estaba harto que el Jefe escogiera cada vez a guardaespaldas tan niñatos.
-Listo, siéntate y cállate solo hablas solo si él te lo pide, ¿entendido?
-Ok.
Justo iba entrando un tipo alto, delgado, de tez blanca y ojos cafés, debo de aceptar que el tipo tenia porte, se sentó frente de mi y me analizo.
-Interesante eres un niño bonito, por cierto, tu madre es muy guapa y esa niña como se llama mmm Lizzie es preciosa de grande será toda una rompe corazones.
Me quede callado unos minutos conocía a basura como esta, quería intimidarme quería ver miedo en mi mirada, pero no lo lograría.
-Se nota que hizo su tarea – esperaba no cagarla con ese comentario.
Se quedo serio y luego soltó una carcajada – Bien niño, ahora voy a ser directo, se todo de ti, cuanto debes, a quien te coges, cuando orinas, las deudas que dejo tu padre y debo decir que aun existe gente que aún recuerda... a muchos de ellos les gustaría saber donde se esconden para cobrar lo que les falto. – Tense mi mandíbula.
-Te tengo agarrado de los huevos y eso es bueno, tienes el empleo – se paro y dejo un sobre delante de mí.
-Dentro vienen las indicaciones e información de mi hija, tendrás que vivir con ella, tiene un departamento en Nueva York, no te preocupes mientras tu viajes nosotros cuidaremos a tu familia, el día de hoy llegara una persona de servicio a tu casa, apoyara en la limpieza y cuidara de tu madre enferma, necesito estés concentrado solo en mi hija.
-No es necesario yo puedo arreglármelas...
-Lo sé, pero se hará como yo lo digo – saco otro sobre y lo dejo delante de mí – y eso es un anticipo por tu tiempo esto es independiente del salario que te pagaran atreves de la agencia, te conviene ser mi amigo e informarme de todo, no me quieres conocer enojado.
Se paro y se dirigió a la puerta, pero a mitad del camino se giró a verme nuevamente.
-Otra cosa, quiero que me informes inmediatamente de cualquier hombre que este interesado en ella, se discreto no quiero que descubra que los estoy alejando de ella y no creo que sea necesario te diga que está prohibida para ti, mas vale que lo recuerdes porque yo mismo te corto el cuello si rompes esa regla. – y reanudo el camino.
Cuando el tipo salió del negocio su gorila que seguía a mi lado, volteo a verme y me barrio con la mirada.
-Mas te vale niño bonito que cuides a mí princesa, porque lo mejor que te puede pasar es que el jefe te corte el cuello, no querrás que yo te encuentre.
Definitivamente el padre de Rachel no vendía seguros y que onda con su gorila, ahora tenía mucha curiosidad me picaban las manos por abrir el sobre, pero lo quería hacer hasta que estuviera en la casa.
(...)
Llegando a casa escuché risas en la sala y al acercarme vi a mi madre y a Lizzie con una señora en la sala platicando.
-Hijo!!! Qué bueno que llegaste te gano la Sra. Robinson, ya nos conto que te iras a trabajar a Nueva York y ella nos estará apoyando, es adorable.
-Cierto Papi, es la buena onda – me dijo Lizzie, desde pequeña vio en mi una figura paterna todos sabíamos que no era así pero nunca le pedí que dejara de hacerlo, así que ahora soy su Papá.
La Sra. Robinson se paró y me extendió la mano para saludarme, tenía un rostro gentil y regordete, se acercó a mí y me susurro.
-Te juro por mis hijos que cuidare a tu familia están en buenas manos.
Solo le puede asentir, a decir verdad no sabía como sentirme con esta "ayuda" de enfermera que me dieron pero al parecer no tenía opción, me disculpé para retirarme a mi cuarto, una vez dentro cerré con llave sentía que iba a ver pornografía o algo así porque no quería que nadie más viera las fotos.
Abrí el sobre, venían unas hojas con solo unas líneas de información, volví a meter las manos para sacar las fotos y me sorprendí al verla no era lo que esperaba...
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Primero capitulo!!! por favor denle una oportunidad ya verán como les gustara además de que es el primer libro de una SAGA y tendrán mas de esta pareja y otras mas, gracias!
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Enamorado de mi protegida (Completa).
RomanceSe llama Rachel y había escuchado que muchos guardaespaldas habían pasado por su camino, pero al final de un tiempo ella le pedía a su padre los despidiera, no divulgan mucho de ella estaba prohibido de hecho firmábamos una cláusula de confidenciali...