Sick | 2Yeon.

30

Al comenzar a caminar comenzó a cuestionarse si había sido buena idea arrojar el celular.
Ahora no sabía la hora.

Se abofeteó mentalmente y luego se encogió de hombros.

La carretera vacía, Ni un alma había.

¿A dónde habrían ido Jihyo y el Tzuyu versión hombre? No le sorprendería que esos dos terminen juntos, pero necesitaba un auto, ahora mismo.
Ni siquiera tenía dinero.

Se sentó en la tierra, cansada.
Claro que no se estaba dando por vencida, sólo tomaría un pequeño descanso porque se comenzaba a sentir mal, muy mal.

Claro que darse por vencida estaba más cerca cada vez.

Cerró los ojos por unos minutos y dejó caer su cuerpo al piso.

–No tengo tiempo para esto– Soltó.

Le duele al moverse, le duele al respirar.

Hizo oído sordo a el sonido del ambiente.
Imaginaba, tan bien, ella y Jeongyeon, un día de calor, conduciendo hacia la playa.

Hasta podría perderse con ella en una isla por el resto de su vida.
Y si estuviera Sana, seria aún mejor.
Sana con Tzuyu, o Dahyun, Con quien la quiera como se merece.
Mina otra vez, conociéndola al hablar, haciendo feliz a Chaeyoung.

¿Era mucho pedir? Comenzó a soltar pequeños sollozos.

Olor a Jazmín, otra vez.
Eso era olor a su madre.

Y la melodía, Otra vez.
Esa era la voz de su madre.

"¿Como estuvo hoy tu día?
¿Pasó algo malo?
Si vives cada uno y todos los días así, eso es todo lo que importa.

Aguanta un poco más, lo que yo pienso
Piensa en mí toda la noche.
Tiempo que pasamos juntas.

En nuestros sueños, solo nosotras dos
En un momento feliz que hacemos.

Shala lalala Shala lalala
Buenas noches, volvamos a encontrarnos
en nuestros sueños .

Piensa en mí, en mí,
en mí, en mí, en mí."

Su madre solía cantarle esa canción antes de dormir, Su voz, era tan hermosa.

–No te lo he dicho, pero te extraño, Te extraño mucho– Soltó luego –Papá también, está mal, se que él te extraña, perdonalo.

Nayeon hablaba con los ojos cerrados, Al aire, susurrando.
Parecía que las palabras se las llevaba el viento.

Y de pronto una corneta sonó, seguido de un grito.
Nayeon asustada abrió los ojos y se sentó, ¿Acaso había escupido un pulmón del susto?

–¡Nayeonnie!– Jackson bajaba de un auto diferente bailando –¿Qué haces aquí?¿Estás bien?¡Vaya! Que desastre, he visto las noticias, no tenía idea.

Nayeon sin que Jackson la viera se tapó la cara y se secó las lágrimas, disimulando rápidamente.

–¡Jackson!– Respondió tratando de verse alegre –Es un desastre, simplemente ¿Tú no sabías quién era yo?– Soltó una risa exagerada.

–No, Ahora, supongo que lo de Jeongyeonnie es un secreto ¿Cierto?

Nayeon asintió, no quería dar explicaciones.

–Me siento importante– Sonrió emocionado.

Y pronto otro chico bajó del auto –¿Quién es ella?