Contigo hasta la muerte...

Deje de creer

Sam:

No lo puedo creer... Jean me dijo EMO, es un idiota, el ser callado y tímido no me convertía en eso, yo ya no era así... Tal vez lo parezca por mi cabello largo y mi gorro pero ¡No lo era! En verdad que me equivoque con Jean, pensé que él era un chico lindo y amable, e incluso yo... ¡Ahhgg! Soy un idiota por pensar todo eso de él, por haber creído en el...

Ese día no volví a hablar con él, ni el siguiente. Me despertaba más temprano que Jean y comenzaba antes y mis turnos y al terminar los turnos (por que había pedido más para no ver a Jean), solía ir a la parte del estacionamiento del hospital y subirme en un auto para ver a lo lejos la cerca y regresar a la habitación que compartía con él, lo más tarde posible para no verlo.

En los dos días que habían pasado, pensé demasiado en él, si estaba enojado en ese momento pero él estaba peor, vio muerto a su hermano, tal vez no debí decir lo que dije ni evitarlo como lo hago, creo que regresare antes hoy a la habitación y tratare de hablar con él ya que solo lo había visto un par de veces en la cafetería pero siempre estaba con Rosy... Otra vez esa sensación extraña.

Regrese antes de lo normal a la habitación y para mi sorpresa, Jean aun no llegaba.

-" Seguro debe estar con Rosy"- Pensé desilusionándome por no verlo ni aclarar las cosas, extrañaba hablar con él.

Me aliste para dormir y como ese mismo día por fin había lavado la ropa que me presto, la doble y la deje sobre su cama a excepción de una playera negra que me había encantado, espero que no le moleste, tal vez así lograría hablar con él y justo después de acostarme, entro Jean, deseaba tanto hablar pero, ¿Qué le diría exactamente? Se alisto para dormir muy rápido y apago las luces, -"Seguro debe seguir enojado"- Estaba perdiendo todas mis esperanzas cuando para mi sorpresa, me hablo.

-Oye Sam ¿Sigues despierto?-¡Me había hablado!, me alegre un poco, pero no sabía que responder, entonces volvió a hablar. -Sam- Me volvió a llamar- Sam...- Estaba demasiado nervioso y feliz para responder- Ahh... Bueno, creo que estas dormido... Yo... Lo siento, no debí decirte esas palabras, en verdad lo siento- ¿Se estaba... Disculpando? No lo podía creer, quise responder que fue culpa mía y que lo sentía pero por más que deseaba mis labios no se movían, me quede congelado, ¡Odiaba ser tan tímido! Y eso fue todo lo que me dijo, quise disculparme también pero no pude.

A la mañana siguiente continué mi rutina de levantarme temprano y comenzar mis turnos. Justo cuando fui a recoger la ropa de los Peterson que estaban en el mismo piso que Jean y yo, lo vi, estaba saliendo de la habitación, me puse tan nervioso de verlo que me sonroje de inmediato y escape en la dirección contraria, seguía sin saber que decirle, ¡Soy un estúpido!, no puedo ni siquiera mirarlo por lo que me había dicho y la vergüenza que me provoco. Debido a ese incidente, me puse demasiado torpe, no podía concentrarme en nada. Seguía pensando en Jean que incluso choque con Rosy mientras llevaba ropa que tenía que lavar.

-Lo siento fue mi culpa, estaba distraído- Me excuse mientras comenzaba a levantar lo que se me callo.

-No te preocupes Sam- Comenzó a ayudarme a recoger todo- Oye por cierto, tengo un gran favor que pedirte, ¿Puedes subir a la azotea después de la hora de comida?- ¿Me estaba pidiendo eso, a mí?

-Ahh claro- No sé ni por que acepte.

-Gracias, te veo más tarde- Se despidió y continúo caminado.

¿Sobre qué querrá hablar? Me pareció muy raro que me haya pedido algo así, seguro si debe ser algo muy importante. Le reste importancia y continúe con mis tareas y justo a la hora de la comida, Adrián, un compañero de turno, me pidió cubrirlo lavando lo que le tocaba, ya que no se había sentido bien sentimentalmente y lo había llamado Jhon para hablar con él.