Los días pasaron y la casa de Mito Senju se llenó de vida y color, tener a las chicas con ella era el mejor bálsamo para luchar contra la soledad, a menudo sus vecinas le preguntaban qué tratamiento usaba para verse tan rejuvenecida y ella solía contestar que el amor de sus nietas hacía todo el trabajo.
Mikoto acababa de graduarse como educadora y consiguió empleo como maestra preescolar en la misma escuela en la que su abuela había enseñado años atrás, los niños la calmaban y estar ocupada con el trabajo le ayudaba a distraerse, aunque era verano habían padres que debían llevar a sus hijos a la guardería por lo que había comenzado a trabajar de inmediato.
Kushina por su parte había conseguido empleo como ayudante del chef principal en su cafetería favorita y eso la tenía entusiasmada, la comida era su pasión y su título en gastronomía recién obtenido la ayudó en el proceso.
Fugaku no paraba de darle vueltas al asunto de Mikoto, su madre casi lo mató por haber adelantado su llegada a la ciudad una semana entera.
—Ojalá me hubieras avisado que vendrías antes, tenía planes de remodelar tu habitación pero no me diste tiempo para nada—replicó Naori molesta—aunque igual no sé de qué me asombro, tú siempre has hecho lo que has querido.
—No te enojes mamá o te harás vieja antes de tiempo—rió Fugaku al tiempo que se cubría el rostro para evitar el almohadón que su madre le lanzó—en realidad fue una suerte que hubiera llegado ahora, gracias a eso pude evitar una desgracia.
Naori lo miró con desconcierto por lo que Fugaku continuó.
—No te lo dije pero Mikoto está en la ciudad.
—Eso no es novedad, incluso la conocí.
Fugaku la miró sorprendido.
—¿Y por qué no me lo dijiste?
—Porque no quise traer viejas heridas al presente hijo, sé lo que sufriste por causa de esa chica...
—No fue por culpa de ella, fue por causa de mi estupidez—el rostro de Fugaku cambió de un segundo a otro y observó a su madre con una sonrisa pícara y mirada expectante— ¿Y qué te pareció?, ¿Es una belleza verdad?
—Al menos ésta vez tuviste buen gusto con las mujeres, no como las últimas chicas con las que has salido...es hora de que te tranquilices un poco Fugaku ya no eres un niño.
—Lo sé, supongo que antes no me importaba con quién salía porque ninguna se parecía a Mikoto.
Fugaku se encogió de hombros como si el simple hecho bastara, Naori puso los ojos en blanco, su hijo no cambiaría jamás, todo era fácil para él.
—Ojalá la vida fuera tan simple.
—Lo es—dijo Fugaku—ahora que sé en dónde está Mikoto todo me parece más sencillo, no sabes lo que es haber pasado diez años con la esperanza de volverla a ver sin tener idea de si eso sucedería algún día, comparado con eso siento que puedo lograr cualquier cosa.
—Estás muy optimista ésta mañana, ¿qué te hace creer que Mikoto te dará otra oportunidad?, ni si quiera has hablado con ella todavía.
—Te equivocas, la vi el mismo día en que llegó a la ciudad, la salvé de un idiota ebrio que quiso abusar de ella por eso te dije que fue una suerte que hubiera adelantado mi regreso, quién sabe qué hubiera sucedido si no hubiera estado ahí.
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Amor...LOCO amor
Fanfic¿Qué harías si tuvieras 12 años y el chico más atractivo del mundo y que es tres años mayor se interesa por ti? Es lo que Mikoto se preguntó al conocer a Fugaku Uchiha en el verano de 1974, un verano que marcó su vida...para mal, porque ese chico ma...