46

56.6K 3.4K 405
                                    

Nochebuena, faltan unos pocos minutos para que sea media noche y nosotros nos encontramos tirados en el sofá comiendo pizza y viendo Mi pobre angelito, por más que Gabi intentó hacer una comida decente no lo logró ya que no fuimos muy buenos asistentes, ademas de que estábamos distraídos así que el pollo terminó quemado al igual que las papas fritas, así que solo quedó comer pizza y ensalada que era lo único sin posibilidad de dañarse, al igual que el Tiramisú.

Los regalos ya están bajo el árbol, mi hermanito durmiendo y algunos villancicos suenan por la celebración de algunos vecinos. La pirotecnia suena indicando la medianoche y como si el diablo lo siguiera Mick se tira rápidamente hacia los regalos cual niño de 5 años, me recuerda a Cody. Él empieza a buscar los suyos tirando los demás a los lados sin importarle si algo puede dañarse, deben de haber más de quince regalos pero no son demasiado grandes, cada uno le dio un pequeño detalle a cada uno de nosotros, obviamente Stephen no.

Ya cuando cada uno tiene sus respectivos regalos empezamos a abrirlos, hay ropa, accesorios, CDs, maquillaje y juguetes, todos parecen felices con sus obsequios así que guardamos todo, botamos la basura y ponemos un poco de música, hablamos, tomamos un poco y en eso se pasa la noche hasta que todo se vuelve negro para mi cuando el sol empieza a salir.



—Arriba princesa. —Escucho que susurran a lo lejos, suelto un gruñido y le pego a la mano que me mueve para darme la vuelta y seguir durmiendo. Siento una punzada en mi cabeza y como me siguen moviendo con insistencia sin lograr resultado, un peso cae encima de mi pero ni eso hace que abra los ojos. —Arriba que debes abrir mi regalo. —Susurra Brad en mi oído provocando que mi piel se erice o también puede que sea el frío, me voy más por la segunda opción.

—Ayer abrí tu regalo. —Susurro apenas audible ya que tengo la cara un poco enterrada en la almohada. Él se sienta sobre mi espalda y empieza a acariciar mi cabello lo cual solo me da ganas de seguir durmiendo.

—Aún hay otro regalo, arriba. —Habla y deja su mimo a mi cabello lo cual hace que gruña y se levanta, me estaba quedando dormida con ese cariño.

Con pereza me volteo boca arriba y me siento, miro al frente y froto mis ojos sin ganas, quisiera dormir otros cinco minutos. Miro a Brad sin animo y le hago una seña para que hable o me de lo que sea que me va a dar o se largue y me deje dormir. Él saca algo de detrás de su pantalón de pijama, muevo mi cabeza para ver de donde venía eso ya que no tiene bolsillos, lo tenia entre el pantalón y su trasero, me lo entrega con una sonrisa y se sienta mirándome expectante. Cojo la caja y quito el papel de regalo, abro la caja negra y me encuentro con un collar con un colgante redondo.

—Que cliché. —Susurro sin quitar la mirada del collar, lo abro y veo una foto mía con Stephen, en está yo estoy dormida en la cama y el niño desparramado dormido sobre mi, me recuerda a la que él y yo estamos en el piso, pero en está ambos estamos despeinados y en pijama. —Me encanta. —Susurro y lo miro con una pequeña sonrisa. —Gracias Brad. —Digo y me vuelvo a tirar en la cama sin dejar de ver la foto.

—¿Puedo preguntarte algo ademas de esto? —Pregunta a lo que asiento. —¿A qué fuiste a mi casa la otra vez? —Pregunta. Muevo mis recuerdos tratando de hacer aparecer el día que fui, estoy más dormida que despierta así que voy lento en pensamiento. —Cuando... ya sabes... yo estaba con la chica. —Me recuerda avergonzado.

—Ahhh, Gabi quería ayuda en la decoración. —Respondo con los ojos cerrados, estoy muriendo de sueño y no deseo hablar ahora. —Seguiré durmiendo.




Buscar departamento en estas fechas es de lo peor, todo está con los precios altos y no me beneficia en nada, no es que no esté cómoda viviendo con Mick pero siento como si invadiera su privacidad aunque lo ayude con los gastos, aunque voy a tener que esperar hasta que pasen las fiestas y quizás enero para volver a buscar. 

Bad Girl Donde viven las historias. Descúbrelo ahora