Final

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¿Pero quien carajos timbra tanto? Enojada me levanto de la cama y voy a abrir la puerta a quien sea que insiste tanto. Abro y me encuentro con Mick y Luca muy sonrientes quienes entran como Pedro por su casa.

  —¿Y Brad? —Pregunta Luca a lo que gruño molesta provocando que ellos se mire, saben que algo no va bien.

—En un hotel o con Ryan. —Respondo seria y en eso entra Ryan así que descarto esté con él.

—¿Dónde ta papi? —Pregunta Stephen apareciendo en la sala con su ropa sucia señal de que estaba jugando en el jardín a algo.

Han pasado cuatro años y aún no puedo creer lo grande que está mi hermanito, a veces me da hasta nostalgia que crezca tan rápido. Cuando empezó a hablar mejor empezó a decirme mamá y como Brad y yo estamos juntos empezó igualmente a decirle papá, aún cuando estuve los primeros años corrigiéndolo después me rendí ya que los niños son tercos y no entienden bien ciertas cosas, ademas no me molesta del todo que me diga Mamá.

  —Saluda a tus tíos. —Le digo ignorando por completo su pregunta, él alegre va y le estira los brazos a Mick quien gustoso lo levanta y saluda feliz.

Camino a la cocina para servirles algo de tomar y me veo interrumpida por Luca quien entra mirándome con los brazos cruzados y una ceja levantada de forma interrogativa.

  —¿Discutieron? —Pregunta y yo asiento con desgano. ¿Quien iba a creer que llevaría cuatro años con Brad? Yo creo que nadie, ni siquiera yo pensé que duraríamos tanto, siendo honesta. 

Cuatro años de novios y tres viviendo juntos, tenemos peleas como todas las parejas y en este momento estamos en una. Brad está en el cuarto semestre de su carrera luego de dos años se cambió de la que estaba estudiando por obligación y ahora está en una que si le gusta y ademas trabaja los fines de semana en la empresa de su padre como asistente. Yo por mi parte estoy haciendo una carrera nocturna, trabajando en las mañanas y pasando las tardes con mi niño hermoso y con Brad.

Los chicos por su lado Luca y Gabi siguen juntos, Gabi ejerciendo su carrera como psicólogo y Luca como dueño de la cafetería que era de su padre. Mick trabaja como Dj en algunos clubes y fiestas privadas y está saliendo con una linda chica Irlandesa. Con Joseph nos hablamos una que otra vez y a veces viene de visita, según sé está estudiando Administración de Empresas. Ryan, mi chico rulos, está estudiando idiomas y además a veces trabaja como animador de fiestas, nunca lo imaginé en ese papel pero le gusta hacer payasadas para animar. 

Y Adam, bueno él al enterarse de mi relación con Brad empezó a cambiar mucho conmigo, me fastidiaba a cada momento y llegó a pelearse con Brad por lo que al final lo terminaron despidiendo del trabajo y no supe más de él. Lo vi unas cuantas veces más en el centro comercial o algún parque pero nunca más cruzamos palabra, lastima, hubiera sido un buen amigo pero prefirió comportarse de forma inmadura.

 —Estaremos bien, sabes que discutimos por bobadas.  —Comento restando importancia a lo que él asiente y me abraza como si no me creyera de alguna manera.

Es cierto lo que he dicho, a veces peleamos por cosas sin sentido que al final terminamos hablando y buscando solución, esta vez no será la excepción. Discutimos básicamente por mi culpa ya que él dice que he estado muy rara y arisca con él, lo cual en parte es cierto y como a veces mi orgullo es mucho no quise dar mi brazo a torcer en la pelea y la terminé llevando a mayores provocando que se fuera. Creo es la primera vez que sucede eso de que se vaya a dormir a otra casa y me siento culpable por ser tan idiota.

  —¿Qué tal van las cosas contigo y Gabi? —Pregunto separándome cambiando así el tema de la conversación, él sonríe y veo ese brillo especial en sus ojos.

Bad Girl Donde viven las historias. Descúbrelo ahora