Especial Navidad (Maratón 2/3)

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Navidad (Un año atrás) 

Brad

Que estrés tanta decoración en esta casa cuando a ninguno de ellos les gusta esta fecha, solo quieren guardar apariencia de familia perfecta frente a los amigos de mi padre que se les a dado por venir a pasar Navidad en esta casa. Nunca vi a mi madre tan feliz por decorar y menos por planear la comida navideña, mi padre buscando su mejor traje y mi hermana probándose mil vestidos mientras que yo solo quiero salir de aquí he irme con Ryan a algún lugar.

Busco ropa "presentable" en el desorden que es mi armario y me cambio para luego bajar. Ya la mesa está increíblemente acomodada y mis padres junto con mi hermana están arreglándose entre ellos, los ignoro y me siento en el sofá de la sala, todo este circo no me agrada para nada y luego tener que ver puras sonrisas falsas y aguantar charlas de adultos será una pesadilla.

  —Intenta ser amable. —Pide mi padre parándose a un lado del sofá. Me mira serio y con los brazos cruzados, ruedo los ojos y me levanto del lugar.

  —Intentaré ser lo más falso posible, como ustedes. —Musito con una sonrisa y paso por su lado antes de que pueda responderme con algo. 

Lo más posible que pase ahora es que lleguen esos ejecutivos con alguna hija y estos dos quieran emparejarme con ellas, no han entendido que no deben meterse en mi vida y menos si se trata de alguna chica, no saldré con alguien nomas porque a ellos les fascina.

Demasiadas personas para mi gusto y mucha comida de nombre raro que creo jamas había visto. Han venido dos hombres con sus respectivas esposas y sus hijos, la mesa está apretada y ellos están hablando de negocio, bueno los hombres ya que las mujeres están en la otra punta con un tema diferente. Yo me encuentro en un lado, en el centro en medio de un chico de unos quince años y una chica de unos veinte, no nos hemos dirigido la palabra y por sus caras ellos están más aburridos que yo.

  —Brad. —Me llaman desde la esquina de la misa, aparto la mirada de la interesante ensalada y la enfoco en el señor Russo. —Me dijo tu padre que quieres ser Medico, ¿Dónde te gustaría estudiar la carrera? —Pregunto y yo levanto las cejas sorprendido y miro a mi padre quien me mira serio para que no diga algo erróneo.

—¿Quiero estudiar medicina?  —Pregunto confundo mirando sonriente a mi padre. —Creo que hay un error, yo aún no se que quiero estudiar en realidad, quizás termine siendo un stripper. —Comento y veo como mi madre se ahoga con el vino y le sale un poco por la boca mientras que el ceño de mi padre se frunce por el enojo. Escucho una risa a mi lado la cual proviene de la chica quien al ver la cara de su padre deja de reír. —Si quieren les puedo hacer un show y por ser ustedes será gratis. —Ofrezco y guiño un ojo a mi padre quien se levanta enojado.

  —Brad cállate. deja de decir disparates. —Dice intentando no levantar la voz frente a los invitados y vuelve a sentar. 

—Creo que ya es hora de irme. —Me levanto con los ojos de todos puestos en mi y me volteo a mirar a la chica a mi lado. —¿Vienes hermosa? —Pregunto extendiendo mi mano para ella quien gustosa la acepta y antes de que alguien diga algo salimos corriendo.

25 de diciembre

Me gusta estar en la casa de Ryan, hemos estado desde que nos levantamos jugando con su nueva consola intentando pasar lo antes posible todos sus juegos nuevos para saber que luego nos quejaremos por haberlos pasado tan rápido. Ryan es mi mejor amigo desde hace ya unos años y es él único que se ha quedado conmigo a pesar de mi mal genio en ocasiones y lo complicado que puedo ser, tengo suerte de que sea mi amigo pero nunca se lo diría, no quiero subir su ego.

Desde que me levanté mi celular a estado suene que suene y solo por mis padres y por la chica esa de anoche, es más que seguro que apenas vuelva me espera el regaño más grande de parte de mis padres pero no me importa en lo absoluto. Mientras que a esa chica la seguiré ignorando, una noche juntos y ya cree que estamos juntos, fue solo sexo, debió quedar claro cuando me fui mientras ella estaba en el baño. Creo que no capta indirectas.

  —¿Alguna chica? —Pregunta curioso mi amigo sin despegar la mirada del televisor.

—La hija de un socio de mi padre, nos acostamos y ahora no deja de llamar. —Respondo en tono indiferente y me encojo de hombros restando importancia.

—¿Algún día estarás en algo serio? —Pregunta divertido a lo que río y niego.

Estar en algo serio en definitiva no está en mis planes, ademas de que no he conocido una chica que llame por completo mi atención, todas o al menos las que he conocido, se ven tan falsas y superficiales, solo quieren una cara bonita y ropa sin importarles nada, no hacen nada por la vida ni tienen planeado hacerlo. Yo no quiero una chica que solo sea físico, quiero a alguien con quien poder hablar de todo, alguien interesante y que tenga más para ofrecer que solo una cara bonita.

  —No creo. —Respondo y él niega. Ninguno de los dos estamos por ahora en algo serio y así la pasamos bien. Yo no quiero a alguien encima todo el tiempo empalagandome y diciendo frases cursis y mucho menos a alguien celandome. 

 Seguimos jugando un rato más aprovechando que está temprano y que él aún no se va a la vez que comemos galletas caseras, mis favoritas, con chocolate caliente. 

 - 

La época navideña es tan bonita pero más aún si la pasas de una manera bonita. Decoraciones, chocolate, familia unida y regalos, así si es lindo pasarla no con personas desconocidas y con pura falsedad sobre la mesa. Ya las navidades no son como antes y eso es más que obvio, faltan personas en la mesa, falta la alegría que se sentía de pequeños, las familias ya no están unidas y poco a poco te das cuenta que antes solo era una fantasía, al ser pequeños veíamos todo mágico e ignorábamos lo que sucedía a nuestro alrededor; las falsas sonrisas y las peleas nos parecían normales y las pasábamos por alto, eramos tan inocentes. Ahora todo cambió.

Son casi las dos de la mañana, ya es 26. Veo las casas decoradas, algunas muy coloridas y otras más discretas, en algunas hay fiesta y otras ya están apagadas. Me pregunto como habrá sido la nochebuena de todos ellos ¿Tuvieron regalos?¿Estuvieron en familia?¿Hicieron nada y cada quien estuvo por su cuenta? ¿Fueron falsos por esa noche? A veces quisiera ser otra persona, estar en una familia unida pero eso no es posible, quizás mi familia no sea tan mala, no es la mejor eso es obvio pero deben haber unas peores.

Mi celular suena y al ver quien es rechazo la llamada, creo que llevarme a esa chica de la cena en casa no fue la mejor de las ideas ya que no deja de llamarme, luego bloquearé su número. La luna se alza en lo alto para en poco ser tapada por las nubes que amenazan con soltar la lluvia, voy con destino a mi casa aún cuando no quiero estar ahí pero por desgracia es mi hogar y necesito ropa nueva, no puedo quedarme a vivir con Ryan, bueno si puedo pero se a ido en la mañana de viaje con su familia y yo he declinado de la invitación a ir.

Llego a la cuadra de mi casa y empiezo a preguntarme si me habrán dado algún regalo, no lo creo por como me comporté pero quizás me dejaron carbón o algo así. 

Llego y sin hacer ruido abro la puerta, subo a mi cuarto y veo que hay dos cajas de regalo en mi cama, las miro curioso y cierro la puerta para luego acercarme a ellas. Las miro con desconfianza y las abro, en una hay una laptop y en la otra unas zapatillas. Bueno, por lo menos no me quedé sin regalo.




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¡FELIZ NAVIDAD A TODOS!

Espero tuvieran una buena Nochebuena y estén con las personas que quieren.

Espero les esté gustando este mini especial y muchas gracias por el apoyo.

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