Romeo y Julieta (versión siglo XXI)

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Ella había nacido en España pero vivía en Argentina con sus padres adoptivos.

Cuando tenía tres años perdió a sus padres en un accidentalmente auto- movilístico. Una pareja argentina que estaba de viaje en España fue a un orfanato para ver si podían adoptar a una niña o a un niño, en el orfanato habían solos bebés, decidieron adop- tar a la bebé de cabello rojo con ojos celestes, estaban felices que al fin iban a tener una hija.

Se la llevaron con ella a Buenos Aires Argentina.
La casa no era ni tan grande ni tan chica, era mediana y era suficiente para tres personas.
Cuando ella fue creciendo, sus padres le dijieron que era adoptada, ellos siempre le querían decir las cosas con la verdad pero explicándole de buena manera.
Ella era tímida, decidida, solidaria familiera y bondadosa. Esa clase de personas era Chiara, aunque ella nunca pudo conocer a sus verdaderos padres, siempre le gustaba despertar- se con una sonrisa y siendo muy posi- tiva.

Ella soñaba con ser cantante, bailari- na compositora y cantante, sus ídolos de la música eran Bechy G y Tini Stoessel.
Se consideraba muy afortunada en tener unos padres que la apoyaran en todo y que fueran buenos y compren- sivos con ella.
En su infancia nunca tuvo amigos o amigas, ella siempre estaba sola jugando con los juguetes.
Su madre al ver que no tenía amigos se empezó a preocupar porque le
parecía raro que a esa edad no tenga amigos.
Cuando cumplió los catorce años, la habían cambiado de colegio para comenzar de vuelta con la esperanza de que pudiera hacer nuevos amigos, cosa que pasó. Apenas entró y vio a una chica que le pareció agradable y buena desde lejos, podía ver que tenía cabello rubio como el sol y la piel blanca como la tiza, decidió acercarse a ella para hacer una nueva amiga.
    —Hola—le dijo Chiara saludándola—. Un gusto en conocerte, ¿Cómo te llamás?
    —Mi nombre es Julieta—dijo la chica.
    —Lindo nombre Julieta, mi nombre es Chiara, ¿Me ayudás a buscar mi salón? Porque yo no sé en donde está.
    —Si, claro vamos.

Las dos habían ido a buscar el aula de Chiara y resulta que a las dos les había tocado en el mismo salón, las dos estaban felices, entraron al aula y la profesora dio un discurso de una hora, todos los alumnos estaban muy aburridos pero por suerte sonó la campana del recreo, las chicas salie- ron, se quedaron hablando sobre ellas, Chiara le contó a Julieta que ella era española pero se mudó a Argenti- na con sus padres adoptivos, ella tam- bién le contó que vivió en distintas partes del mundo porque sus padres eran diplomáticos.
    —Pero, ¿Entonces no te vas a quedar acá en Argentina para siem- pre?—preguntó Chiara preocupada.
    —No, claro que no, mis padres me dijieron que ya no vamos a mudarnos más, me quedo acá para siempre—dijo Julieta con una sonrisa.
    —¡Sí, buenísimo! Pero si vos viviste en cada rincón del mundo, ¿Sabés en dónde naciste?—le preguntó Chiara.
    —Si, nací acá en Argentina pero cuando yo nací mis padres tenían que seguir con su trabajo de diplomáticos—explicó.
    —¿Pero como sabés hablar español con asento argentino?—preguntó Chiara.
    —Porque mis padres me enceñaron.
    —¿Y como hacías para comunicarte con la gente cuando te mudavas de país o lugar?—preguntó su amiga con curiosidad.
    —Facil, mis padres me ayudaban porque ellos sabían inglés y francés, después ellos me enseñaron también a hablar esos idiomas ya que mayor- mente las personas usan esos idiomas para comunicarse.
    —Ahhhh—dijo Chiara entendiendo.
    —¿Cuál es tu color favorito?—le preguntó Julieta.
    —El mío es el rojo, ¿Y el tuyo?
    —Um—dijo pensando—. Ahora que lo pienso, no tengo color favorito, ¿Alguna vez quisiste saber de tu origen?—le preguntó Julieta.
    —Si, yo siempre quise saber, lo único que sé, esque nací en España y que mis padres eran muy pobres.
    —¿Por eso te abandonaron tus padres?
    —No lo hicieron, los perdí a mis padres en un accidente automovilís- tico cuando tenía tres años.
    —Eso es muy triste,yo no me imagi- no mi vida sin mis padres.
    —¿Qué querés ser de grande?
    —Yo quiero ser azafata.
    —¿De esas qué atienden a las personas en el avión y qué le da la comida?
    —Sí, eso quiero ser cuando sea grande, ¿Y vos Chiara qué querés ser de grande?
    —Yo quiero ser bailarina, cantante y compositora es más, estoy trabajan- do en un tema para subirla a YouTube—dijo Chiara mientras le daba la letra de la canción a Julieta.
    —Guau Chiara la letra es buenísi- ma, tenés que subir esta canción a YouTube, va a tener como un millón de visitas en un día—dijo Julieta asombrada por la letra de la canción.
    —No seas exagerada, igual primero voy a subir covers en mi canal de canciones como las de Axel, Lali Espósito y otros cantantes más.
    —Estoy segura que vas a tener mucho éxito, ¿Te puedo escuchar cantar?
    —Hay no sé, esque me da pena.
    —Dale Chiara, si querés ser cantan- te tenés que superar tu timidez.

Al llegar a casa decidió seguir el consejo de su amiga, estaba acostum- brada a cantar cuando nadie estaba presente viéndola, cantaba mientras tocaba la guitarra, era la canción de Sebastián Yatra y Reik "Un año"
yo te conocí en primavera,
me miraste tu de primera,
un verano eterno me enamoré.
Y esa despedida en septiembre,
en octubre sí que se siente,
noviembre sin ti me dolió también.
Llegará diciembre,
sigues en mi mente,
fueron seis meses y por fin volveré a verte,
llegara febrero yo seré el primero,
en darte flores y decirte que te quiero.
Puede que pase un año más de una vez,
sin saber donde estés pero el amor es más fuerte,
puede que el tiempo nos aleje una vez,
sin saber donde estés pero el amor es más fuerte

Esa era su canción preferida, cuando cantaba y a la vez tocaba la guitarra se sentía identificada con la letra, le recordaba a una persona que era importante para ella: Benbolio.

Romeo x Julieta (versión siglo XXI) (Terminado ✔️, Editando ➕)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora