Capítulo 12: Masson Swaf.Ewan Walker
26 de nov. 2015
Despierto sobresaltado y con la respiración agitado, gracias al sueño que tuve. Espero hasta que normaliza mi respiración, me paso ambas manos por mi rostro estrujandolo, con mi dedos me quito las lagañas.
Escucho como suena la alarma.
06:00 a.m.
Lanzando un bufido me levanto de mi cómoda cama, salgo de entre las sábanas y me dirijo hacia el baño. Me desvestí ya dentro, cierro la puerta. Presiono unos botones para el agua a la temperatura que quiero, por último presiono un botón para que salga la lluvia artificial, me sumerjo debajo de ella. Lance un suspiro.
Es tan refrescante y plancetero. Agarro el Jabón y me enjabono en un vaivén suave, también cojo el shampo.
Una vez enjuagado, sacudo un poco mi cabeza haciendo que mi cabello se sacuda en el vaivén, me paso una mano por este. Sostengo la toalla que estaba colgada en la pared y la envuelvo en mi cadera. Antes de salir del baño, me cepillo mis dientes y coloco loción en las partes correspondientes.
Salgo del baño y me dirijo a la puerta derecha, donde esta mi armario, la abro y entro. Busco mi ropa necesaria que uso para ir a trabajar. Pantalón de vestir color gris y una camisa de mangas largas color azul oscuro, me visto rápidamente ya que me estoy atrasando. Sostengo entre mis dedos mi corbata gris, hago el nudo y la acomodo donde corresponde.
Agarro mi saco del mismo color que mi pantalón y la corbata.
Voy a mi tocador, agarro mi billetera y mi celular. Cuando sostengo este último visualizo una llamada entrante de mi asistente. Acepto la llamada rápidamente y digo:
-Estoy en camino. ¿Qué paso? -mi tono de voz es neutral.
-Buenos días, señor Walker. -saluda cordialmente, salgo de mi habitación y me voy a las gradas para descender - tiene una reunión con el señor Swaf. A las 08:00 -¡carajo!. No puede ser que me haya olvidado.
- Revise todos lo detalles. En treinta minutos llego -sin dejarla replicar, cuelgo la llamada.
Salgo de mi habitación, y me encamino a la habitación de Mérida para ver como sigue y la veo recostada durmiendo placidamente, me acerco y le doy un beso en su cabeza mientra la envuelvo con la brazada -últimamente esta haciendo frío-. Finalmente salgo de ahí y bajo las gradas, me despido de Luce y le digo con gestos: luego te llamo. Ella asiente, no me preocupo por mi hermano ya que es mayor para saber que hacer con su vida, si quiere quedarse bien sino, ni modo. Me encaminó al garaje y cojo una llave para desbloquear mi auto.
Me adentro al auto, pulso el botón para que se abran las puertas y enciendo el auto. Conduzco al trabajo y visualizo que hay un montón de autos en la avenida sin avanzar. Antes de llegar a la trifulca tomo un desvío y paso por un pequeño pueblo, sin embargo no le doy importancia ya que quiero llegar rápido.
Una vez salgo de ese pueblo -casi fantasma-. Me faltan solo unos kilómetros más.
Desvío mi mirada al reloj de mi muñeca, y observo que solo falta veinte minutos para llegar, así que aumento la velocidad. Llego con unos cinco minutos de anticipación, me estaciono a la volada y agarro mi pequeño maletín donde tengo unos documentos importantes. Bajo de mi auto, no si antes sacar la llave y pulso un pequeño botón que hace asegurar el auto. Me adentro al magnífico edificio escala, el cual mi padre se esmero en tener con mucho trabajo.
Por lo menos hizo algo bueno.
Saludo cordialmente al guardía de seguridad y a la recepcionista que se encarga de informar cualquier movimiento extraño. A grandes zancadas me dirijo al elevador, el cual solo el personal autorizado puede utilizarlo. Ya dentro del elevador pulso el botón del último piso. Cuando llego saludo diciendo: Buenos días, a mi despacho en un minuto. Entro apresurado al lugar donde les dije a mi secretaria y asistente personal. Dejo el maletín en el escritorio, lo abro y saco los documentos necesarios para la reunión, por suerte será aquí la reunión con el señor Swaf. Me siento finalmente en mi amada silla.
Unos toque en la puerta se escucha y solo digo un:
-Adelante.
Observó que es Sol mi secretaria y Matilde mi asistente.
-Señor, con su permiso -habla Matilde -le dejo su café como le gusta -me da una sonrisa coqueta, ignorando ese gesto le sonrío amablemente.
-El señor Swaf, llamo y dijo que iba a llegar unos diez minutos con retraso -esta vez me informa Sol.
-Gracias, pueden retirarse. -ambas asienten y se marchan.
Doy un suspiro de cansancio y levanto ambos brazos para estirarme un poco.
Ordeno los papeles que ocupare para informarle sobre algunos detalles al señor Swaf. Una vez ordena todo donde debe estar ya que ordene también mi escritorio, estaba un desastre.
Entra un llamada al teléfono de la oficina.
-Llegó el señor Swaf -informa Sol.
-Déjelo pasar -y cuelgo.
Se abre la puerta y un hombre aparentemente de mi edad o unos años mayor. Entra, con un postura erguida y una sonrisa que me hace desconfiar, él se acerca y me levanto enseguida para estrechar nuestras mano en saludo.
-Buenos días, señor Ewan -habla y tiene una voz ronca como si se la pasara fumando todos los días. Intento no hacer una mueca de asco, ya que no me gusta fumar.
-Buen día, señor.. -mierda. ¿Cuál era su nombre?
-Masson - se presenta.
-Siéntese -le hago un gesto para que lo haga y ambos lo hacemos uno en cada respectivo sillón. Apoyo mis codos en el escritorio y junto mis dos manos, para analizarlo.
Masson me mira fijamente, le elevó una ceja. Entonces el habla sorprendiéndome.
-Usted tiene algo, que yo busco.
-¿Qué dice? -no me acuerdo robar cosas de él, además no haría eso de rebajarme a ese nivel para conseguir algo que deseo. Además apenas y lo estoy conociendo, ni siquiera se, que es lo que busca.
-Conoce a ese chica ¿no? -afirma y saca una hoja doblada de su traje, la cual la desdobla y me la muestra. Observó que es la francesa descarada. Arrugue el entrecejo. ¿Quién es este hombre? y ¿que es lo que quiere?
-Hablemos de lo importante -intento cambiar el tema, ya que no me da confianza. - quiere la 55 cajas ¿si o no? - nosotros importamos y exportamos vino, mi abuelo Jamés -es padre del mio-, tiene una fábrica en su granja -vive en el campo-, nos encargamos de comercializarlo y por el momento nos ha ido bastante bien.
-Sí, las quiero. Como también quiero saber.. ¿Dónde se encuentra Lorraine? -lo miro con fijeza. ¿Cómo sabe su nombre? ¿Qué es él de ella?.
Decido contarle la verdad.
-No la he vuelto a ver desde hace días -le hablo con un tono grave - ¿quién es usted de ella? -le pregunto finalmente queriendo saciar mi curiosidad.
-Su novio. -dice mirandome mal
Me congelo por un segundo ignorando el gesto que hizo, arrugue un poco el entrecejo. Así que solo jugaba conmigo, ya veo. Al parecer Zoe y Lorraine resultaron ser lo mismo.
-Bueno, no la he visto. Búsquela -le digo mientras que vuelvo a ordenar los papeles, pero en su dirección. -firme esas hojas y luego habla con mi asistente para coordinar cuando se las llevaremos las cajas -me levanto de la silla y me dirijo a la puerta, la abro y salgo - Matilde entra y coordina el lugar dónde llevaremos las cajas.
-Si, señor Walker -asiento.
Voy al elevador para salir e ir a la cafetería a refrescarme los pensamientos, espero no equivocarme con ese hombre extraño al hacer negocios con él -no confío en Masson-. Pero ya todo estaba planeado y no me quedaba de otra.
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PARAMNESIA +18 | ©®
RomanceEl amor que le habían prometido no fue el más leal, es así que gracias a sus actos de aquel hombre, Lorraine tuvo que pagar las consecuencias. Ella creyó que su mundo se había derrumbado, sin embargo llegó un nuevo misterio a su vida, un hombre arro...