Taekyun-hormonaslocas

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Un pésimo día para existir, según la peligris recostada en su cama y tapada hasta la coronilla.
Tenía un humor de perros, no quería interactuar con nadie.
O tal vez.. necesitaba mimos.
Jumin entró a la habitación con un té de hierbas y galletas recién hechas, tal vez eso animaría a su mejor amiga.
-T.. ¿Cómo—..?
-¡CALLA ME MOLESTAS NO QUIERO VERTE, aAAaaAAAH!
Jumin cerró la puerta ya acostumbrada a los berrinches de la chica. Bufó y le dejó en la mesita de noche la bandeja con el té y las galletas, además de 2 pastillas calmantes de cólicos.
Dió un pequeño beso sobre las mantas y se retiró del cuarto. Ella necesitaba su espacio, pensó preocupadamente Jumin.
Taekyun se destapó con lágrimas en sus ojos sintiéndose terrible por haberle gritado así a su mejor amiga. ¡Ella sólo quería saber cómo estaba!
Se sentó para comer galletas mientras sollozaba, enfurruñada consigo misma por haber actuado tan desconsiderada.

Al paso de unas horas, Vibe tocó la puerta, y al no ser atendida abrió encontrando una T seria mirando su clóset entre sus cobijas.
-¡T!, ¿Cómo estás?
-Unnie, he estado pensando.
Vibe miró ladeando la cabeza a la chica, quién le miró opacamente.
-¿Las ropas tomarán vida propia si la sustancia X de las chicas super poderosas, caen en ellas?
Okay, tal vez T estaba muy mal ese día. ¿Qué pregunta era esa?
-No lo sé Taekyun, la verdad..
-Hm.
Se quedó con ella un rato en silencio, escuchando el tarareo de la pequeña hasta que un quejido se hizo presente.
Un sollozo se hizo escuchar.
-¿T..?
-U-Unnie..
Vibe acercó las manos a la cabeza de la menor, con gesto preocupado.
-¡Hunter x Hunter no tiene más capítulos, Seiko-unnie!
..estaba leyendo el manga de Hunter x Hunter. ESTABA LEYENDO.
Ah, Seiko rendida se levantó y se despidió. Aunque amaba a Tae, no podía mantenerse cuerda con ella en ese estado.
Jen, Gaek y Jumin llevaron sushi de panda express ese día como regalo para Taekyun. Esperaban que se sintiera mejor y dejase de quejarse.
Al entrar la peligris miró con curiosidad las bolsas y aplaudió emocionada. Le dieron su paquete y rápidamente se puso a comer. Todo bien hasta que..
-¿Qué es esto, T-unnie?
Junggaek probó un poco del surimi de Taekyun quién le miró con ojos muy abiertos.
Jumin sabía que durante su período, tocar algo de Tae significaba una reprenda de su parte. Pero se sorprendió al verla derramar grandes gotas a borbotones de sus ojos.
-¿Taekyun?
-N-no me pediste permiso..
-No llores, toma algo de lo mío.
-¡No!
-Pide disculpas Junggaek.
La más menor hizo una reverencia y pidió disculpas.
Aceptó las disculpas y siguió comiendo..
Quién diría que aquella noche Jumin no pegaría los ojos por culpa de los quejidos de su compañera.
Anotó mentalmente; "no comprar rollos picantes a Taekyun durante su período. Jamás."

We're GTS! ||Genderbend||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora