Kinktober; EXO

Hair-Pulling; BaekYeol

Chanyeol estaba decidido a darle una sorpresa a su novio. Llevaban un año manteniendo una relación a distancia por culpa de que Baekhyun se había ido a estudiar un año al extranjero. Al principio les costó bastante ya que eran les gustaba ser acaramelados y pasarse tardes abrazándose en el sofá y viendo series en Netflix pero al final terminaron acostumbrándose. ¿Cómo sería su primera reunión en persona después de tanto tiempo?

El repiqueteo de unas llaves comenzó a sonar al otro lado de la puerta, Chanyeol ya llevaba rato preparado para recibir a su novio con los brazos abiertos, había dicho de ir a buscarlo pero este se negó diciéndole que prefería verlo en casa donde se pudiera lanzar encima de él sin problemas ya que no creía que podría aguantarse en cuanto lo tuviera delante. Notó como la cerradura era abierta, su pierna temblando constantemente por la impaciencia.

—¡Cariño! —y finalmente ahí estaba, lanzándose a sus brazos como había prometido que haría— ¡te eché tanto de menos!

Las maletas que el joven Baekhyun cargaba fueron rápidamente desechadas en algún lugar de la entrada, necesitaba las manos completamente libres para poder ir a agarrarse del cuello de su gigante. Se aseguró de no dejar ningún rincón de su cara sin besar, no dejando ni siquiera al pobre hablar entre tanto cariño.

—Yo también te eché de menos —logró decir Chanyeol.

Finalmente los pies de Baekhyun regresaron al suelo y se fijó por primera vez el aspecto de su novio. Seguía igual de guapo que siempre, incluso más, pero cuando sus ojos bajaron a su nuca notó algo nuevo en él.

—Tienes el pelo largo.

El más alto sonrió, era una pequeña sorpresa que le tenía. Siempre que hacían videollamadas se aseguraba de tener una gorra encima para que no lo notara, quería que lo viera en persona.

—¿Te gusta?

—Mucho, demasiado, dios, —y sin ningún ápice de vergüenza dijo:— vamos a la cama.

Porque una bienvenida con Baekhyun no podía ser de otra forma.

Si de algo se había dado cuenta Chanyeol es que su novio había vuelto más que cachondo de su viaje y no estaba dudando en mostrárselo en aquel momento, mientras le daba la mejor mamada de su vida.

—Echaba de menos tu sabor —dijo el más bajo, para luego seguir lamiendo toda la extensión de su pareja.

El pobre Chanyeol era un desastre de gemidos en ese momento. Los dos se encontraban ya desnudos y dispuestos, llevaban tanto queriéndolo.

Poco tardó el menor en venirse en la boca de su novio, quien se tragó cada gota de su esencia con mucha ilusión. Indiferentes a lo que acababa de suceder se besaron, disfrutando de la gratificante sensación que les proporcionaba hacerlo después de mucho tiempo.

Con mucho dolor Baekhyun hizo a su novio darse la vuelta, prometiéndole que ya lo abrazaría más tarde. El lubricante seguía donde siempre gracias a dios, no tenía ganas ningunas de ponerse a buscar en aquel momento. Por todo el tiempo que llevaban sin hacerlo decidió prepararlo a conciencia por mucho que este le gritara que no era necesario, más que nada porque andaba impaciente con el querer sentir de una vez a su novio dentro de él.

—No seas impaciente —y es que por muy desesperados que estuviera no quería hacerle daño.

Chanyeol le agradeció al cielo cuando por fin sacó sus dedos ya que eso significaba que por fin tendría lo que tanto ansiaba. Intentó darse la vuelta pero Baekhyun se lo impidió, alegando que sería más cómodo si lo hacían así y sinceramente, no tenía ni ganas de quejarse.

Cuando lo penetró casi no hubo molestia por lo que le reclamó enseguida que comenzara a moverse. Al principio mordió la almohada en la que estaba apoyado para no ser excesivamente ruidoso ya que no eran horas, pero en cuanto Baekhyun le soltó que quería escuchar su voz rápidamente se olvidó de la existencia de sus vecinos.

La forma en la que aquel joven conseguía mover sus caderas era estupenda, siempre que él era el activo conseguía tener a Chanyeol temblando de placer, y hablando de Chanyeol. La mirada del más bajo cayó otra vez sobre la nuca cubierta con la pequeña melena que se había dejado crecer su novio durante su ausencia y es que se veía demasiado caliente. El sudor hacía que los mechones se pegaban a su frente y a su nuca haciendo que se viera mucho más sexy. 

Al principio, por mera curiosidad, Baekhyun decidió pasar sus dedos entre aquellas largas hebras y fue sin duda, por muy raro que sonase, placentero. Eran tan suaves y cubrían su mano a la perfección, cada vez que la pasaba era como si la estuvieran acariciando, pero la suavidad no duró mucho ya que el joven empezó a notar como el clímax estaba llegando y sin querer apretó y enganchó en sus manos los cabellos de Chanyeol, recibiendo un sonoro gemido como respuesta a esto.

—¿Te gusta? —preguntó Baekhyun sin soltarle el pelo.

El más alto asintió como pudo y con esa respuesta hizo de su novio un monstruo. Al momento volvió a notar un tirón que hizo que levantara un poco su cabeza de la almohada, y luego otro que ya le hizo levantar todo su torso, chocando así su espalda con el pecho del mayor.

No fue liberado hasta que ambos llegaron al orgasmo y desde ahí tuvo algo muy claro, no volvería a cortarse nunca el pelo.