Kinktober; EXO

Seduction; Kaisoo

El sonido de la campana anunció el fin de las clases. Los alumnos se aseguraron de recoger todas sus pertenencias con rapidez para poder salir cuanto antes de ahí y llegar a sus casas, todos menos Jongin.

—Profesor Do —llamó el joven en cuanto solo quedaron ellos dos— tengo una duda, ¿podría ayudarme a resolverla?

El mayor resopló, por mucho que amara su trabajo también deseaba poner fin a su jornada laboral. Recogió sus papeles y tras meterlos en su maletín le dijo al joven que lo siguiera a su despacho ya que tenía que dar ya las llaves de la clase.

Al entrar fue directo a sentarse sobre su silla, percibió como el menor entraba tras de él y el característico sonido del pestillo.

—No hace falta que la cierres —comentó el profesor, pero lo único que recibió por respuesta fue una inocente sonrisa de Kim. No le iba a dar más vueltas, solo era una puerta— Y bien, ¿cuál era tu duda?

El moreno agarró sus libros y se posicionó al lado del profesor. Kyungsoo miró atento como ponía su material sobre la mesa y abrió las páginas de ejercicios que supuestamente le habían estado dando problemas. 

—¿Estos?

—Sí profesor, si pudiera ayudarme a resolverlos...

La forma en la que lo miró al decir eso trajo escalofríos al cuerpo del mayor, quién volvió a centrarse en los ejercicios para así distraerse. Jongin parecía no estar por la labor de dejar a su profesor en paz, disimuladamente se inclinó hacia delante y pasó su brazo los hombros de Kyungsoo. 

El mayor ni se molestó en decirle nada pero para Jongin no pasó desapercibido el pequeño sobresalto que realizó el pequeño cuerpo del contrario en cuanto lo tocó. 

—¿Entonces son estos? —el mayor tragó saliva sin separar sus ojos del libro.

Comenzó a explicar, intentando mantener su profesionalidad en todo momento, pero los dedos del menor no paraban de masajearle la zona y como no quería parecer maleducado no se atrevía a apartarlo. No es que estuviera haciendo nada raro, simplemente él era muy tímido.

—¿Podría volver a repetirlo? —Jongin se acercó mucho más, chocando su pecho contra la espalda de Kyungsoo y posicionando sus labios a escasos centímetros de su oreja.

En aquel momento el mayor se abstuvo a responder con un simple asentimiento ya que sabía que si hablaba terminaría tartamudeando y se negaba a darle esa imagen suya a cualquiera de sus alumnos.

—Lo noto muy tenso profesor —dijo Jongin, esta vez susurrando.

—Y-yo —finalmente el mayor terminó cediendo y por consecuencia dejó relucir su temblorosa voz, totalmente contraria a la que solía usar mientras impartía sus clases.

—Deje que le ayude con esto —posó sus manos sobre los dos hombros de Kyungsoo y presionó sus dedos.

El más bajo terminó entrando en pánico. Intentó levantarse de su silla pero su alumno no dudó en empujarlo y regresarlo de vuelta a su propia silla. Aquella osadía por parte del joven lo llevó a girarse para mirarlo a los ojos, topándose con esa sonrisa que, por muy inocente que se viera, dudaba que realmente lo fuera.

—¿Kim? 

Los ojos de Kyungsoo se hallaban bien abiertos, lo cual destacaba su ya grande tamaño. Jongin se podía ver perfectamente reflejado en sus pupilas y no iba a negar que le encantaba, pero su atención estaba puesta en aquellos labios tan abultados que llevaba un tiempo queriendo catar.

—No se preocupe profesor, simplemente déjese llevar.

Las redondas mejillas del mencionado se tornaron de un fuerte rojo ante las palabras del moreno, al igual que sus orejas. Sería tímido e inexperto, pero a estas alturas era imposible no saber que Jongin pretendía algo más que ser un buen alumno aunque, ¿realmente era ese un problema?

A Kyungsoo ni le dio tiempo a pronunciar la primera sílaba de su respuesta ya que volvió a ser agarrado y, antes de darse cuenta, ya se encontraba tumbado sobre la mesa de su despacho. Con el impacto varias cosas se precipitaron al suelo y otras tantas fueron aplastadas por su propio peso. 

Jongin no perdió el tiempo, rápidamente separó las piernas de su profesor para así poder acercarse a él. Llevaba desde hace mucho ansiando ese momento, desde el primer día que lo vio para ser concretos. Recuerda el día que Kyungsoo entró por primera vez en clase, tan pulcramente vestido con su traje y aquel precioso contraste que había entre su grave voz y su adorable rostro. Le daba gracia cuando sus compañeros comentaban el miedo que les daba mientras que lo único que causaba en él era que su corazón latiera más rápido de lo normal.

—Jongin.

Ahora fue el turno del menor de sorprenderse, ¿acababa de oír a su profesor llamarlo por su nombre de pila o es que se había terminado perdiendo en sus fantasías?

—Dilo otra vez.

—Jongin.

Ahora le tocaba a Kyungsoo sorprender con aquel repentino cambio de actitud, mostrándose pronto muy colaborador, aunque se le seguía notando lo avergonzado que estaba, sus expresiones le delataban demasiado.

El moreno encajó su cabeza entre la curva que se formaba entre el hombro y el cuello, respirando profundamente el aroma que su profesor desprendía. Era más adictivo que una droga.

—¿Puedo? —preguntó, porque por muchas ganas que le tuviera no quería hacer nada sin su consentimiento.

Kyungsoo necesitó pensárselo durante unos segundos antes de contestar.

—Nunca lo he hecho —respondió al fin.

Jongin juró haber oído mal.

—¿Perdón?

—¡Que nunca lo he hecho con nadie!— intentó controlar su tono de voz ya que lo último era que todo el colegio se enterara de que aún seguía siendo virgen.

Al menor le costó procesarlo, ¿en serio había tanta gente estúpida en el mundo? ¿Existía gente capaz de resistirse a aquel lindo profesor? Así solo lograban reducir su fe en la humanidad.

—Profesor, —contestó finalmente mientras agarraba el mentón de Kyungsoo con su diestra para hacer que lo mirara a la cara— parece que ahora es mi turno de enseñarle.

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Últimamente me es casi imposible subir capítulo diario del kinktober porque ando demasiado ocupada pero como la semana pasada voy a intentar ponerme al día durante este fin de semana

Siento los errores que seguramente tienen mis historias, en cuanto acabe de publicar todos los capítulos les daré una revisión y los editaré ya que seguramente hay muchas cosas mal, soY UN DESASTRE RLY