Capítulo 19

19K 594 23
                                    

¿Entonces qué dirás? – inquiero serena.

No sé qué decir, no sé si aún quieres tener el trato del noviazgo sólo por los dos meses hasta qué a mi padre se le calme la idea de dejarme sin herencia – dice Damián.

Hmm – respondo sin pensar en nada.

Mira yo nunca le he rogado a nadie pero esto es importante – dice y se arrodilla frente a mi – Por favor Mantén el trato conmigo hasta qué mi padre reaccione prometo hacer cualquier cosa que desees – Implora con ojos grandes y luminosos, voz ronca cargada de emociones.

No lo hagas sufrir dile que si.

Está bien – bufó – ya hablaremos luego que deseo a cambio – agrego consciente de sonar fria.

Se levanta rápidamente y me abraza levantándome por los aires – Gracias haré cualquier cosa por ti – Dice mientras me mantiene en brazos.

Bajame – Gruño.

Lo hace sin renegar y se disculpa con una sonrisa intentando parecer inocente.

Te veo hoy a las 7 pasaré por ti – dice Damian sonriendo.

Puedo ir en mi auto – murmuró caminando hacia la cocina.

Esa es una trampa vi como manejas, podrías matarte – dice serio.

No lo haré, dime a qué hora llegó – digo abriendo la puerta del refrigerador.

No. Yo te llevaré paso por ti y espero estés lista – dice Serio con un tono de voz frívolo.

Y antes de que pueda renegar habla.

Nos vemos luego, cuidate y mil gracias – dice antes de darme un pico.

Hey! – grito asombrada por tal atrevimiento.

Sonríe feliz de su actitud y sale por la puerta sin decir nada. Me beso está loco. Sonrió sin querer.

Veo que estais alegre ¿porqué será? – comenta Julio.

Me pongo seria nuevamente.

He aceptado a ayudarle a cambio podré pedir lo que quiera pero no necesito nada… por ahora – informó a julio que me ve sin delatar nada en su expresión.

Si es tú decisión te apoyo, solo ten cuidado no queremos que sufras – dice sonriendo.

No tendría porqué hacerlo – murmuró.

Sólo te digo, nos vemos luego me avisas cualquier cosa – dice antes de irse.

Paso el día ordenando mi cuarto y parte del piso. Pasadas las 5 inicio a vestirme no sé qué ponerme.

Debe ser algo a la altura, pero sencillo y recatado. Piensa…

Empiezo a rebuscar ropa por todo el armario pero nada me convence. Paso así al menos una hora entera sin nada que me guste.

Me doy por vencida y voy a por un a copa de vino blanco. Está frío, se desliza por mi garganta dejando un camino que Acepto gustosa.

Regreso a la habitación pensando en un buen atuendo recuerdo que tengo varios vestidos nuevos que compré hace como uno o dos meses atrás. Sonrió cuando encuentro los vestidos aún en sus cajas con etiquetas y todo.

Tomo un negro con rayas blancas que me encanta desde que lo veo. Estoy corta de tiempo así que empiezo a vestirme y arreglarme lo más rápido qué puedo aunque vale una mierda. Soy la novia así que pueden esperar No?

Hago unas pequeñas ondas en mi cabello y dejo solo una media cola sostenida con una traba. El maquillaje está bien solo faltan los zapatos y listo.

7:20 minutos. Y Damián aún no aparece tomo todo lo qué necesito y bajo para ver si está abajo tal vez. Pero nada lo que está es una camioneta con un chico algo joven en la puerta delantera con un traje negro.

Buenas noches – Saludo amable.

Buenas noches señorita, es usted Rosie? – pregunta sonriendo.

Si – asiento algo dudosa.

Bien, llevo 20 minutos esperándo creí que no le habían avisado que estaba aquí, soy Almarnack primo de Damián el me ha encargado a venir por usted – explica y yo frunzo el ceño.

Lamento la espera, háblame de tú no estoy tan vieja, crei que Damián vendría a por mi – digo sonriendo.

Ha surgido un imprevisto lo lamento, Rosie. – dice sonriendo.

Bien vamos entonces en si ya vamos tarde – digo caminando hasta la camioneta.

Después de ti – dice sonriendo Almarnack mientras mantiene la puerta abierta.

Gracias – digo sonriendo y entró a la camioneta.

Él entra después con una sonrisa divertida y algo malévola. Me acomodo mejor en el asiento por instinto.

Entonces eres la novia de Damián? – pregunta curioso.

Si – respondo sonriendo.

Debo admitir que eres muy bonita, Damián es muy suertudo – dice divertido.

Gracias – digo vacilante.

Y le quieres? – pregunta y yo trago fuerte.

Si, mucho – digo sonriendo.

Es una lástima, Damián nunca valora las buenas chicas y termina con cualquier tipa – dice con algo de amargura mientras niega con su cabeza y suspira.

Puede que tengas razón pero se en donde me estoy metiendo, además somos adultos creo que es normal que hablemos si pasa algo – digo sonando serena.

Eso Si, pero él es muy afortunado Ojalá te valore – dice algo distraído.

No respondo y solo optó ver por la ventana. Luego de minutos de ver las calles pasar llegamos a la casa de Harold. Muero de nervios porque no he visto ni a mi padre ni a Harold.

No sé cómo actuarán ellos ante todo esto. Almarnack me abre la puerta y me toma del brazo cuando estoy fuera de la camioneta.

Bien, vamos – dice Almarnack divertido.

Caminamos por la conocida casa hasta llegar al jardín trasero este ha sido super decorado todo está perfecto. Hay alrededor de unas 30 personas en diferentes mesas los cuáles hablan entre ellos animadamente, busco entre todos a Damián o mi padre pero no los encuentro.

Estarán en el despacho – dice sonriendo Almarnack.

Y donde nos sentamos? – pregunto sonriendo.

Hay una mesa para nosotros, ya han de venir tranquila - dice distraído viendo hacia una mesa donde hay varias chicas.

El me guía hasta una mesa donde solo está la madre del Señor Harold e Isabel la esposa de mi padre con Diego en brazos.

Buenas noches bellas damas – saluda Almarnack.

Buenas noches hijo – saluda su abuela.

Buenas noches, Isabel, señora Billert-Peltz – Saludo alegre a ambas con un beso en la mejilla.

Dime Sandra nada más si ya somos de la familia – dice alegre.

Sonrío forzosamente mientras me siento donde Almarnack tiene entreabierta mi silla.

Gracias – le digo con una pequeña sonrisa.

Momentos después llegan los 3 hombres que menos quería ver al menos a mi padre aún no.

Buenas noches hija te ves preciosa – dice sonriendo mientras me besa la mejilla.

Gracias papá pero exageras – Saludo.

Nada de eso estás muy guapa Rosie esperemos mi hijo sepa valorar tremenda mujer – dice Harold.

Gracias Harold – digo sonriendo.

Claro que lo haré pero por ahora Padre si me permites saludare a mi novia – dice sonriendo Damián.

Quedo viendo a Damián acercarse...

Sexo🔥 Antes Que☣️ Amor❤️ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora