Capítulo 24

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Después de mi breve reunión con el doctor regrese a la habitación de Harold donde me despedí de todos y quedando de hablar con Damián mañana en el almuerzo gracias a las influencias de Harold ha decidido que le darían de alta al día siguiente.

Llegué a mi piso y me cambié para venir al club donde me encontré a Julio bien acompañado por dos morenas hermosas.

Encuentro a mi víctima rápidamente es un tipo Alto, cuerpo formado perfectamente, ojos claros, sonrisa preciosa, labios exquisitos.

Un elixir de vida…

Al entrar a la habitación el tipo me toma de las manos aprisionandome en la cama y su cuerpo no dejando ni un mísero centímetro de distancia entre su cuerpo y el mío.

Besa mis labios rudamente para luego bajar atraves de mi cuello hasta llegar al borde de mi vestido justo en el inicio de mis pechos.

Sin soltar mis manos mueve una de él para poder quitar mi vestido, lo baja suavemente mientras deja besos mojados.

Sigue con los besos bajando poco a poco dándome una tortura pecaminoso de imaginar miles de cosas que podría hacerme en tan poco tiempo.

Desabrocha su corbata y la utiliza para amarrarme a la renjendilla de la cama asegurándose de que no pueda mover las manos.

Al terminar su cometido empieza con los besos de nuevo pero está vez llegando hasta el inicio de mi vientre mientras sigue bajando mi espalda se arqueta ante la anticipación de sentir lo mojado de sus labios.

Mientras yo hago eso el se detiene y vuelve a empezar desde arriba de mi oreja mientras me acaricia en círculos el abdomén.

Sigue con la tortura de besos y caricias por un momento más hasta que parece sastifecho.

Quita mi vestido completamente dejándome en ropa interior solamente. Me observa sonriente antes de besar la punta de mis pezones por encima de la tela del brazier de encaje que llevo.

Su mano se encarga de acariciar mi clítoris en círculos mientras su boca hace maravilla con mis pechos.

Siento como mis paredes vaginales se contraen y avisan que llegaré pronto a un orgasmo. El cosquilleo conocido por mi vientre avisa que cada vez está más cerca.

Unas caricias más y mi cuerpo combulsiona a la reacción en cadena de las caricias, besos y movimientos lentos.

Dejando verter el mal día de hoy, mis problemas, preocupaciones y más…

Al estabilizar mi pulso y sensaciones el tipo se deja entrar suavemente sobre mi. Dejando sentir como llena el vacío que tenía.

Entra en embestidas suaves dejándome acostumbrarme a la sensación.

Cuando lo he hecho aumenta la velocidad así como también me toma por los tobillos para abrirme más y tener más acceso a mi.

Empieza a tomar un ritmo junto a mi cuerpo uniéndonos de una manera rápida y profunda.

Sus embestidas empiezan a ser más ricas, rudas y fuertes, mientras sus manos toman mis pecho masajeandolas.

El ritmo aumenta así como nuestras respiraciones y temperatura.
Siento como me tenso de nuevo al igual que él. Mientras nos movemos más rápido buscando el clímax entre cada estocada.

Minutos y varias estocadas más después llegamos al clímax final en una forma exquisita.

El hombre suelta mis manos y se acuesta en la cama mientras intenta recuperar el aire al igual que yo.

Al estar más calmado el tipo sé  levanta y empieza a vestirse sin decir ni una sola palabra.

Mientras yo me cubro con la sabana viendo cada movimiento del tipo.

Minutos después de terminar de vestirse se va sin decir ni una sola palabra y de alguna forma me molesta.

Tampoco digo que debería haber hablado o agradecido pero si un hasta luego tal vez.

Salgo de la cama y tomo mi ropa para poder vestirme en el baño luego de tratar de limpiarme aunque sea un poco mi cuerpo.

Al terminar me visto acomodando cada parte del vestido tratando de que pueda mostrarme presentable afuera.

Aunque eso no es lo que realmente importe, salgo al tomar las llaves de la habitación y cerrar para regresar a mi lugar del club preferido.

Pido un trago en la barra lo tomo y me dispongo a bailar en medio de toda la gente que ya está pegada a otra restregandose entre ellos.

Bailo por un buen rato hasta que me canso y me siento en unos de los asientos de la barra para poder disfrutar de la cerveza que he pedido.

Al terminar escucho una de mis músicas favoritas así que me lanzo hacia la pista de baile para empezar a disfrutar de la música.

Muevo mi cuerpo al son de la canción mientras la canto. No dejo que nadie baile conmigo pués se qué buscan y yo ya quedé exausta.

Al contrario pienso solo tomar unos dos tragos más e irme a casa mañana tengo un almuerzo con la familia junta.

Así que al terminar la canción regresó de nuevo a la barra que está vacía.

Un vodka – pido en la barra.

El chico que atiende me lo entrega sonriente y pinta la raya correspondiente en mi muñeca. Tomó el trago de un solo golpe necesito algo qué me ayude a borrar de alguna manera todo esto.

Veo atraves de la pista a ver si logro encontrar algo qué llame mi atención…logró encontrar unos ojos azules que para mi gusto se hacen demasiados conocidos.

De pronto siento que el alcohol qué he ingerido hasta ahora se fue al caño y mis nervios han regresado.

Damián está aquí como, no tengo idea lo único que se es que debo salir de aquí lo más rápido qué pueda pero aún así no quiero dejarlo solo aquí cualquiera podría llevárselo a las habitaciones.

¿Qué hago? Si me ve estará mal pésimo pero si me voy otra lo tomará.

No sé qué hacer. Busco a Julio pero no lo encuentro así que optó por salir de ahí vale más mi secreto que la preocupación de que Damián se coja a alguna mujer de aquí.
Total yo acabo de hacer lo mismo .

Me terminó el último trago de vodka y bajo de la silla junto a la barra para empezar mi huida.

Camino entre la gente intentando esquivar a Damián, muero de nervios pero trato lo más posible de parecer calmada de lo contrario levantará sospechas!

Aunque no creo que conozca que yo estoy aquí! Ni qué me reconozca! Muchos más podrían venir aquí no solo yo… pero aún así prefiero evitar un mal gusto.

Suficiente he tenido con lo de ahora en la tarde para que me joda mi vida ahora mismo.

Logró avanzar por la pista hasta llegar a divisar la puerta de salida donde veo al tipo que se acostó Conmigo hoy hablando con una chica.

Camino decidida a pasar por ahí y salir de aquí rápidamente pero un brazo me detienen cuando estoy a unos pasos de salir.

Veo el brazo que me detiene es un tipo algo bajo pero que se me hace conocido sólo que no sé de donde.

A donde tan rápido preciosa? Podemos divertirnos – dice sonriendo.

No gracias debo irme – le digo soltando bruscamente mi brazo cuando veo que Damián me ve fijamente.

Nerviosa cruzo la puerta de salida y busco mi auto rápidamente. Al encontrarlo salgo de ahí viendo por el espejo retrovisor cómo Damián está afuera del club buscándome.

¿Cómo podría saber quién soy?


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