OPERATION: Decode | JinNam {Binary Code #2}

Información Clasificada #2

Nunca se imaginó en todos sus años de vida que estaría recorriendo las calles de la mano de Hoseok mientras tomaban decisiones respecto a la boda. Nunca pensó que se casaría, pero mucho menos con Hoseok, considerando la mala suerte que habían demostrado tener en todos los años que llevaban juntos. Era algo que le hacía mucho más feliz de lo que dejaba ver; Hoseok sonriendo radiantemente, siendo él mismo y por sobre todo, siendo normal.

Eso era lo más mundano que iban a hacer en años. La boda parecía algo de un mundo totalmente distinto al que habían estado viviendo desde niños, algo un poco ajeno, quizás. Era la primera vez en mucho tiempo que salían a hacer algo sin pensar en si los estaban siguiendo o si algo explotaría en algún momento.

—¿Tú qué crees? ¿Verde o borgoña? —inquirió Hoseok levantando dos pañuelos frente a él. La muchacha tras el mostrador lucía encantada.

—Borgoña, el verde nos haría lucir como duendes.

—A ti, quizás, con tu estatura.

—Ja, ja.

—Borgoña entonces.

Con eso decidido, casi todo lo demás fue extremadamente sencillo. El color elegido sería prácticamente todo, desde las flores hasta la decoración; las corbatas y los pañuelos. Lo que sea que iba a ser de algún color, lo iba a ser borgoña.

Tenían planeada una boda muy pequeña y privada, no porque quisieran esconderse ni nada por el estilo, sino porque realmente no tenían a mucha gente que invitar. El encargado de la lista de invitados fue Hoseok, y realmente no pasaban los diez invitados, entonces decidieron que era mejor hacer algo más pequeño y significativo; además de que según el más joven, hacerlo así en privado se sentía como un guiño a los años en los que salían a escondidas y nadie más que ellos sabía de su relación.

Los padrinos serían Namjoon y Jungkook. Según las costumbres de Noir, Seokjin tendría que darles su bendición como líder del escuadrón, pero eso obviamente no sería un problema en la actualidad. Otra costumbre era invitar al general, pero ambos habían coincidido en que no era necesario y que las costumbres podrían irse al diablo por Younghwan.

Aún no estaban muy seguros de dónde exactamente sería la ceremonia. Ambos coincidieron en que lo mejor sería que fuera durante la noche, pero en cuanto a un establecimiento no podían ponerse de acuerdo. Yoongi quería algo pequeño y cerrado, como una suite de algún hotel. Hoseok quería algo en el exterior, quizás en alguna playa de Busan. No es que fuera agorafóbico, simplemente prefería estar adentro.

De todos modos aún era pronto y no estaban tomando decisiones finales, pues la boda no sería hasta dentro de al menos dos meses, o cuando Namjoon y Seokjin volvieran de su loca misión. Pero aun así era muy agradable pasar tiempo a solas con Hoseok decidiendo cosas tan insignificantes pero al mismo tiempo tan importantes. No le daba pena en absoluto admitir lo enamorado que estaba de él y lo capaz que era de dejar y dar todo por él.

Odiaba Noir con cada fibra de su cuerpo, pero no odiaba lo que Noir le había dado: a Hoseok y a su pequeña familia.

—¿Qué crees que deberíamos comer esa noche? —preguntó su prometido sacándolo de sus pensamientos. Estaban de nuevo en la calle, caminando de la mano—. Tiene que ser algo delicioso pero que no nos ensucie los trajes y así.

—Seremos muy pocas personas así que no creo que sea inteligente contratar un servicio de catering —razonó Yoongi sacudiendo la cabeza para relajar los músculos de su cuello y mirar a su alrededor, vigilante—, podríamos simplemente pedir un servicio de carne asada o algo así. Jungkook podría cocinar, también.

—O Seokjin.

—No voy a confiarle la comida de mi boda a ese —soltó el mayor medio riéndose—. Es muy capaz de envenenarnos a todos.