Sin ti, Soy nada

XVI

Me levanté y me cambié por ordenes de Matías con un pantalón y una blusa con la que estuviera cómoda.

Baje a desayunar y mis padres no dejaban de mirarme

-¿Qué pasó?

-No lo se, dinos tú

-La vida es bella

-¿Saldrás hoy?

-Si, voy con las trillizas a la plaza

-Las saludas de nuestra parte

-Con gusto

Termino de desayunar, lavó mis dientes y espero el mensaje de Matías.

"Ya llegué muñequita"

"Bajo enseguida"

-Ya me voy, los amo -les digo a mis padres y salgo de la casa

Camino hasta la esquina y al doblar veo la camioneta de Matias

-Hola guapa -me da un beso

-Hola novio

-Me gusta como se escucha eso

-A mi también y mucho

Me da otro corto beso y subimos a la camioneta.

-¿A donde vamos?

-Es una sorpresa

-Cuanto misterio

Estacionó el auto y al bajar nos tomamos de la mano. Entramos al establecimiento y vi una enorme pista para patinar sobre ruedas.

-¿Vamos a patinar?

-Así es

-Genial -digo emocionada

Vamos y pedimos los patines de nuestro número, nos lo ponemos y vamos a patinar.

Había música de fondo y muy poca gente patinando así que podíamos desplazarnos sin ningún problema.

-Te tengo una propuesta -le digo con una sonrisa

-Interesante, dime cual es

-Vamos a hacer una carrera, el que pierda escoge el castigo del otro

-Está bien

-Pero no se vale que me dejes ganas, disfruto las sanas competencias

-Bien, no te dejaré ganar

Nos ponemos al extremo de la pista y comenzamos a patinar a toda velocidad. Estaba dando mi mayor esfuerzo, Matías se adelantaba un poco y en otros momentos yo me adelantaba.

-GANÉ -grite feliz

-Bueno si, lo acepto

-Vamos tengo que buscarte un castigo -lo tomo de la mano y salimos de la pista

Nos ponemos nuestros tenis y salimos del local.

-¿Te parece que hagamos un picnic?

-Si, por supuesto

-¿Qué te gustaría comer?

-Hamburguesas, tengo años sin probar una

-Bien, sus deseos son ordenes

Llegamos a un puesto de hamburguesas y compramos dos con papas fritas y un refresco para cada uno.

Llegamos a un parque y entramos. Matías llevaba la bolsa con la comida y yo la cobija en la que nos sentaríamos.