XXIII

580 44 1
                                    

Después de mucho tiempo, por más que quisiera, sabía que tenía que regresar y enfrentr a mis padres.

Matías estaciono el auto afuera de mi casa

-¿De verdad crees que es buena idea que te vean conmigo? -le pregunto 

-No te voy a dejar sola en esto muñequita, el error fue de ambos así que hay que repararlo juntos 

Bajamos de la camioneta y Matías entrelazo nuestras manos.

Antes de llegar a la puerta mi padre estaba abriendola con el rostro enfurecido y ni habar del de mi madre.

-¿Dónde estabas? -me pregunta mi padre con un tono tan duro que el pecho se me contrajo 

-¿Quien es este? -dijo mi madre apretando los puños

-Él es Matías, mi novio -les dije llena de valor

-¿Tienes cara para venir así como si nada? -le pregunto mi madre -Hiciste que nos mintiera, que nos ocultara que pasaba en su vida -le recrimina furiosa 

-Él no hizo eso mamá, fui yo la que lo hizo, porque sabía como iban a ponerse 

-Vamos a entrar, no quiero ser el tema que ande en boca de todos los vecinos -dice mi padre

Tomo a Matías del brazo y entramos juntos pasando por un lado de mis padres. Lo conduje hasta la sala y nos sentamos juntos con las manos entrelazadas.

-¿Cuál es tu nombre? -le pregunto mi padre 

-Matias, señor 

-¿Si estás consiente de que las cosas no se hacen como lo hicieron verdad?

-Si, señor estoy consiente de eso -dijo Matías

-TU -grito mi mamá mientras lo señalaba 

Di un brinquito por la sorpresa de su reacción y su voz 

-Tú eres el chico que coqueteaba con mi hija en la plaza, cuando comprábamos nieve  

-Si mamá es él -le dije -¿Cuál es tu problema con eso?

-Es un mujeriego, he visto como coquetea con las chicas, es un irrespetuoso que solo quiere jugar contigo

-Señora con todo el respeto que se merece, le pido que por favor no me insulte si no me conoce 

-Mamá Matías no es así, él me respeta y me da mi lugar 

-Por ahora, solo espera a que le des lo que todos quieren, te va a dejar botada y embarazada -mi mamá estaba histerica y estaba llegando a extremos 

-Mamá, ¿Acaso te estás escuchando? -le digo con el ceño fruncido 

-Cariño, déjame hablar a solas con ellos -le pide mi papá 

-No te vas a salir con la tuya -le dice a Matías -Tu eres un...

-Basta -le dice mi padre -Déjame a solas con ellos 

Mi madre se va, mientras habla en voz baja.

-Bien -dice mi padre cuando mi madre se va por completo -¿Sabes que Yaritza esta enferma?

-De Otitis -le responde Matías 

-Bien, mañana la van a operar 

-No papá, no me van a operar, esa doctora solo quiere quitarte tu dinero, no estoy enferma 

-Yaritza no acabes con mi paciencia, mañana iremos y punto 

-¿Señor ya buscaron otras opciones? -le pregunto Matías -Que la operen ya es otro nivel 

Sin ti, Soy nadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora