XVII

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-¿Qué hacen ahí? -dice la voz de una señora

Nos apartamos rápidamente y mis mejillas se ponen rojas.

-Estábamos brincando señora -le dice Matías con una sonrisa angelical

-Es para niños y ustedes... -nos mira de arriba a abajo -Ya están bastante crecidos

-Una persona me dijo un día que no hay que dejar morir a nuestro niño interior 

-Salgan ya -dice la señora molesta 

Matías me ayudó a bajar del brincolin 

-Aquí tiene señora -dice Matías mientras le tiende unos billetes -Solo estábamos divirtiéndonos 

La señora miro el dinero tentada en tomarlo 

-Tómelo por favor, fue menos de media hora pero supongo que la tarifa aumenta según la edad 

-Que no se repita -dice la señora y se embolsa el dinero 

-Bastante brincolin por hoy -dice Matías y me toma de la mano -Vayámonos muñequita 

-Vayámonos caballero 

Nos alejamos del brincolin 

-Tenía años que no me reía así -le digo sincera -Y menos en un brincolin 

-Solo te falta juntarte conmigo 

-Lo haré más seguido 

-¿Ahora a donde quieres ir?, ¿Tienes hambre?

-No, acabamos de comer hamburguesas 

-Bueno, de un postre 

-Que tal helado 

-De tu heladería favorita 

-Si -le digo emocionada 

-Vamos 

Llegamos a la heladería y pedí dos conos con mi sabor favorito.

-Esto tiene que estar muy bueno, como para verte todos los días aquí

-No te arrepentirás de probarlo 

Cuando nos terminamos nuestro helado, tuvimos que regresar a mi casa. Comenzaba a oscurecer y mis padres me matarían si llego tarde. 

-Cuídate muñequita 

-Tu también Matí 

-¿Matí?

-Tu abuela te llamó así y hoy verte brincar como un pequeño feliz, me parece que queda bastante bien ese diminutivo 

-Me gusta como suena cuando sale de tus labios 

-Mati 

-Muñequita 

-Mati -le susurro y termino con la distancia para darle un beso 

Me da tres besos cortos y acaricia mi mejilla 

-Te llamo en la noche 

-Espero tu llamada 

Bajo de la camioneta a duras penas y camino hasta mi casa.

-Hola cielo -dice mi mamá

-Hola mamá

-¿Qué tal tu día?

-Me divertí como nunca 

-¿Cómo están las chicas?

-Bien, tengo cosas que hacer en mi cuarto 

-Yaritza 

-¿Si?

Sin ti, Soy nadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora