5-Taishiro Togomitsu

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Shouto salía de la oficina de su padre para ir al cuarto de juegos que tenía en la compañía, porque así era Enji, ya que sus hijos menores pasaban mucho tiempo a su cuidado había un cuarto para que jugaran. Era la tercera vez en una hora que irrumpía preguntándole por Nanami y que por favor la llamara para jugar.

Enji no entendía como esa mujer se había ganado el corazón de su hijo menor en tan poco tiempo, también notó que a Natsuo y Touya no le desagradaba del todo lo que era raro porque sus hijos eran más antipáticos que el.

— ¿Quien es esa amiga que te insiste que llames? Hasta donde recuerdo el no tiene amigas en su clase. - dijo Taishiro Togomitsu, hijo único de uno de los socios de la empresa, el chico tenía ojos azules y pelo rubio igual que su madre, dueña de una cadena de restaurantes bastante famosa.

— Una molesta mujer que disfruta sacarme de quicio. - fue la respuesta que Enji le dio a su socio causándole una carcajada.

— Acabas de describir a tu esposa.

— No es Rei. Es el diablo.

— Sigues describiendo a la misma. - volvió a decir, el rubio reía al ver la cara de molestia del pelirrojo pero todos esos eran adjetivos que había utilizado con su ahora ex-mujer.

— ¡Es peor que el diablo! Es como el agua que se mete en cada grieta por fina que sea... es un maldito Tsunami que destruye todo y empezó por mi cordura.

Taishiro guardó silencio.

— Si a Shoto le agrada no debe ser tan mala. Solo llámala para que venga a jugar con el.

— ¿Tienes negocios con los Yagi? - Taishiro asintió. - entonces seguro conoces a su hija menor.

— ¿Nanami? Ella es... todo un personaje. - respondió recordando todo lo que ha pasado con la peliazul al rededor del mundo las veces que han ido de vacaciones, la chica era una dulzura pero podía crear un caos en un parpadeo.

— Esa niña es un dolor en el culo.

Taishiro no podía evitar reír, el conocía a Nanami desde la primaria y todos la describían de la misma forma, porque si, La Niña era un desastre cuando quería.

— Dele lo que quiere, se la sacará de encima.

— No voy a darle un 55% a la ligera.

— Si quiere puedo tratar de que se quede en 53%

Enji guardó silencio. Eso será más factible aunque solo bajara un 2%, aceptaba, firmaban y ya no tendría que toparse a la mocosa ni por causalidad, pero ¿por qué lo pensaba tanto? Quizás no quería dejar de ver a esa insolente mocosa.

-.-.-.-.-.-.

Silencio era lo que había, los ojos naranja miraban fijamente a los ojos bicolor, cada vez más cerca uno del otro hasta que sus frentes se juntaron, sin parpadear. Shouto y Nanami se miraban atentamente, El Niño hacia trampa entrecerrando un poco sus ojos de vez en cuando.

— ¿Que diablos es esto? - gritó el Todoroki mayor espantando a la mujer.

— ¡Gané!

— ¡No es Justo! Enji me distrajo, se repite. - se quejó cruzando los brazos, ella estaba en el suelo con una manta sobre las piernas pues llevaba falda.

— ¡Si vale! ¿Verdad papá? ¡Shouto gana! - empezó a gritar y correr al rededor de la chica, a la cuarta vuelta Nanami lo tomó rápido y acostó en sus piernas.

— ¡Ganaste cosquillas!

Gritó y empezó a hacerle cosquillas al Niño que reía y le pedía que parara, todo eso ocurría bajo la atenta mirada de Enji el cual ambos ignoraban olímpicamente. Para el pelirrojo era una imagen completamente nueva ver a su hijo menor llevándose con alguien que no fuese de su familia.

Sabía que se llevaba bien con esa chica, pero desconocía hasta que punto.

Las cosquillas pararon y se abrazaron. Ella se puso de pie.

— ¿Que haces aquí? - interrogó más confundido que molesto.

— Shouto me mandó a llamar.

Enji bajó la mirada al pequeño bicolor que se aferraba a la falda de la mujer.

— Pídele perdón por no llamarme y felicítalo por decirle a Emi. - susurró Nanami, el frunció el ceño ante aquella orden y ella solo asintió rápidamente varias veces. Enji se colocó de rodillas quedando más o menos a la altura del pequeño.

— Lamento no haber llamado a tu amiga. De ahora en adelante ella vendrá cada vez que pueda - la peliazul abrió los ojos con sorpresa al escuchar eso, no era parte del trato y aunque le gustaría jugar con ese dulce Niño a diario no podía hacerlo. - y fue una gran idea que le pidiera a Fukukado que la llamara.

El pequeño le sonrió a su padre y luego lo abrazó. Por la sorpresa correspondió el abrazo un poco tarde. El no se lo creía, Shouto lo estaba abrazando.

Sus hijos no lo abrazaban hacia tanto tiempo que no se acordaba cuanto pero ahí llegaba esa mujer y con una sola frase lograba que su hijo lo abraza.

— ¡Gracias papá! Te quiero.

Sus ojos se llenaron de lágrimas, parecía un sueño... no entendía como era posible eso si sus hijos lo odiaban, incluso Touya se lo había dicho directamente alguna vez. Pero ahora Shouto lo abrazaba y le decía que lo quería el mismo día.

El Niño salió del cuarto quizás a buscar algunos dulces que tenía ocultos y Enji se quedó solo con Nanami. Al ver que no se levantaba se colocó a la altura del hombre.

— ¿Estás-... - sus palabras fueron cortadas por el repentino abrazo que recibió de Enji.

— Gracias - fue todo lo que pronunció el hombre y ella se mordió el labio para que el puchero no saliera, Enji no lloraba pero toda la escena le daba ternura y ganas de llorar. Sabía mucho de la familia ya que Shouto le tenía confianza.

— No tiene que agradecer.

Correspondió al abrazo, esperando quedarse en esa posición mucho tiempo porque amaba la calidez que ese hombre emanaba.


N/a

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Voy a hacer otro fanfic de Enji :3 espero que les guste lo que se está cocinando

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Fuego Fatuo- Enji Todoroki TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora