Bajo las Olas

Capitulo 37

Hola!!!, bueno, sí, me demoré pero en verdad no pude subir antes u.u por favor perdón *inserte llanto*... como sea, espero que el capitulo les guste ^^ por favor perdonen las faltas ortográficas, voten, comenten o lo que quieran ;3

Saludos XD

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Allana

La piel tan pálida como un papel lucía tan suave y delicada como porcelana, los ojos eran de un brillante tono dorado que parecía oro, el cabello era tan negro y que bajo los rayos del sol podía percibir destellos azules, pero lo más llamativo era la mirada en esos ojos, ¿por qué nos miraba de esa manera?

Sentí el pecho de Athan chocar contra mi espalda y sus manos dejar mis hombros para bajar hasta mis caderas, su agarre era suave pero podía sentir la tensión emanando de su cuerpo. Aún así, ¿por qué no estaba asustada de la manera que debería estarlo? 

Tomé una pequeña respiración antes de alejarme de Athan y caminar lentamente hacia el agua, podía escuchar la voz tensa de Athan llamándome pero la sentía tan, tan lejos que no fue capaz de detenerme. Sentí el agua hasta los talones y luego hasta las pantorrillas, estaba por las rodillas cuando ella empezó a acercarse con cautela, por lo que me detuve y esperé a que viniera a mí. Tardó más de lo que pensé.

Cuando pude verla de cerca aún me seguía pareciendo hermosa, pero ahora podía notar su piel compuesta de delicadas y brillantes escamas, sus rasgos eran delicados pero marcados, sus pestañas largas tenían gotas cayendo de ellas y podía ver algunas pequeñas caracolas trenzadas en algunos de sus mechones de cabello. Me miraba como si ella fuera un cachorrito indefenso y yo su salvación.

Me incliné ligeramente y acerqué cuidadosamente una de mis manos hacia ella hasta que finalmente toqué suavemente su cabello mojado pero sedoso. Ella hizo un sonido pero inofensivo sonido por lo que asumí que de momento no iba a hacer nada para dañarme... ¿ella podía dañarme? era tan hermosa...

-¿Quién eres?-Pregunté en un murmullo.

Ella simplemente me miró.

-¿Puedes hablar?-Pregunté.

Nuevamente no dijo nada, de hecho lo único que hizo fue apoyarse más en la mano que mantenía en su cabeza, o al menos fue así hasta que escuché el agua chapotear por Athan acercándose a nosotras.

En ese momento ella retrocedió de manera abrupta y su aspecto cambió completamente, su cabello negro y brillante se volvió extrañamente opaco, su piel pálida cambió a un tono enfermizo, sus ojos adquirieron un color casi radiactivo, sus dientes dieron paso a colmillos y sus uñas a garras, su silencio se transformó en gruñidos. 

Parpadeé mientras intentaba salir de mi asombro, pero no pude moverme más allá de eso, Athan en cambió avanzó rápidamente hasta alcanzarme y de un veloz movimiento me alejó y se puso entre nosotras.

-Athan, espera-Pedí mientras me las arreglaba para volver a ponerme frente a él.

Sentía el cuerpo tenso de Athan mientras me volteaba para ver una vez más a la criatura. No tenía ni idea de porque estaba haciendo esto pero lo hacía de todos modos.

-Tranquila-Pedí con voz suave mientras le mostraba mis manos en señal de paz-. Tranquila, todo está bien.

Ella dejó de gruñir y empezó a calmarse hasta que, lentamente, volvió a lo que parecía ser su aspecto normal... ¿eses era su aspecto normal?¿Cómo era que no me había dado cuenta de eso?¿Después de todo este tiempo?

Exhalé lentamente antes de empezar a acercarme una vez más, no sin antes haberle disparado una rápida mirada de advertencia a Athan, pero antes de que pudiera volver a nuestra distancia anterior ella volteó la cabeza como si hubiera escuchado algo, algo además del sonido de las olas y las aves, y antes de que pudiera hacer o decir algo para evitarlo ella se hundió nuevamente y sólo pude notar su brillante cola bajo el agua cristalina dirigiéndose a mar adentro antes de que desapareciera por completo.