9 MESES Y 38 DIAS

CAPITULO 25

Freya

Por la mañana me levanté de buen humor y me preparé yo el desayuno mientras escuchaba música y bailaba. Mi madre me miraba desde la puerta de la cocina divertida y Lizzy pensaba que se me había ido la pinza completamente. Con la música que la tenía a todo volumen desperté a mi padre, pero se lo compensé con las tortitas que había echo.

Se sentaron al rededor de la mesa y tambien les serví a ellos su desayuno. Yo me lo tomé rápido, recogí la cocina, ordené mi cuarto en un tiempo record y salí de casa dispuesta para ir al trabajo.

Entré a la cafetería con una sonrisa inmensa.

- Buenos dias Cameron- le saludé dandole un beso en la mejilla.

- Muy buenos dias Freya te has levantado de buen humor eh.

Asentí y me puse el delantal.

- Me ha dicho el jefe que se ha tenido que ir y que a uno de los dos nos toca hacer pasteles, etc etc. ¿Te importaría hacerlo tu? Yo no tengo ni idea.

- Me ocupo yo no te preocupes.

- Esto es lo que tienes que hacer- dijo entregandome un papel - Ahí está todo, hasta las indicaciones para que salgan mejores de sabor.

- Gracias- dije dandole una sonrisa.

Entré en la cocina y puse la radio a un volumen aceptable para que no se escuchase en toda la calle.

Preparé en toda la mañana: 34 bollos de crema, 34 bollos relldnnos de chocolate, una tarta de queso de dos pisos, dos tartas de chocolate y trufa, 57 magdalenas y 45 palmeras de azúcar.

Había trabajado sin parar. Empezé a sacar las cosas fuera de la cocina para ponerlas a la vista de los clientes. Serví todo en bandejas y las fui colocando.

- Si que te ha cundido bien- me dijo Cameron mirando todas las cosas que iba sacando.

- Con música se trabaja muy bien.

Seguí con mi tarea. De repente oí un voz femenina preguntar por mí.

-¿Esta Freya?- dijo esa voz

- ¿Que haces aqui? Se va a armar una buena si te ve.- La respondió Cameron a cuchicheos.

-Que dices Cameron llamala.- dijo otra vez esa voz que me sonaba muy familiar. Era...era...¡Jenette!

Levanté la vista y la vi. En mi cara apareció una sonrisa enorme. Pude ver por el rabillo del ojo la cara de Cameron entre confusión y miedo. Él no sabía que la había perdonado.

Salí de detrás de la barra a abrazarla. La  abrazé lo más fuerte que pude.

<< He recuperado a mi  amiga. Quizás me pasé el otro día cuando discutimos>>

- Te invito a comer- me dijo Jenette contenta.

- ¿Que es lo que lo ha pasado aqui?- Dijo Cameron asombrado por nuestro comportamiento.

- Ya te lo explicaré más tarde, voy a comer. Vengo en nada - dije llendome con Jenette y guiñandole un ojo a Cameron.

Comimos en un Burger King que había a unas manzanas de mi trabajo.

-¿Que tal te va en el trabajo? ¿Cuando acabas? - me preguntó mientras comía.

- Termino mañana.

-¿Volverás a trabajar alli en verano? O en medio del curso.

- Había pensado pedir media jornada para trabajar mientras estudio pero no sé. Me va a quitar mucho tiempo.