LLegó la hora de aclarar las cosas con Ash, y no puedo mentir. Tengo miedo. Quizás habría sido una mejor idea el haber ido acompañada, nunca sabes lo que te puede pasar. Además las circunstancias que me rodeaban eran las propias de una película de terror: un callejón oscuro, estoy sola, tengo miedo, estoy medio perdida....
Un buen panorama.
Vi de nuevo aquella puerta roja en ese callejón que me traía demasiados recuerdos. Me acordaba perfectamente de como había encontrado este sitio. Lo que estaba apunto de hacer era una cosa muy arriesgada. No conocía mucho a Ash y seguro que era un timo, pero como no tengo nada que perder, solo tiempo y de eso me sobra, pues lo hare. Si algo de esto resulta salir mal ya puedo ir redecorando mi cuarto como una carcel porque es lo que sera mi casa si algo de esto sale a la luz.
No le estaba haciendo caso a Craig, y seguramente tenga razon.
Antes de abrir la puerta roja recibi llamadas de Craig las cuales no me moleste en coger. ¿sabria que estoy aqui? Bueno, mejor no arriesgarse.
Abri la puerta decidida.
Pase entre la gente que alborotaba la discoteca. Hubo una cosa que me llamo bastante la atencion. Todas las personas que estaban alli presentes eran las mismas que estaban ahi la noche que vi a Ash. Estaban vestidas de la misma forma, con la purpurina esa rara tambien pegada a la piel....
Eso me dejo bastante perpleja. ¡Es que hasta estaban en las mismas posiciones y bailnado de la misma manera! Baje a la planta de abajo, a la famosa pista azul que ys conocía. Alli tambien estaban aquellos chicos que me miraron mal en su dia. Tambien estaba la barra de bebidas de colores donde conocí a Ash que iba de camarero, ¿posiblemente para camuflarse entre el personal? No se. Yo lo único que se ahora mismo es que esto es muy raro.
Vi la barra a lo lejos y a un chico detras de esta. Pense que era Ash y me acerque. Me sente en una de las sillas altas y me apoye en la barra.
-Hola Ash - dije llamando la atencion del chico que estaba dado la vuelta.
El chico se giro, pero el no era Ash. Me di cuenta y me disculpe alejandome. Pase entre la gente que bailaba intentando recordar donde estaba su despacho, pero no conseguia acordarme.
Me pase un rato dando vueltas por toda la pista azul y no vi a Ash. Volvi de nuevo a la barra para preguntarle al chico ese que seria un nuevo camarero si sabia donde estaba.
Entre empujones y malas caras llegue hasta la barra y de nuevo ese chico estaba dado la vuelta.
-Perdona molestarte de nuevo, ¿Sabes donde esta Ash? He quedado con el y no lo encuentro.
El chico se dio la vuelta y me dejo sorprendida.
-Hermosa...-dijo haciendo una pausa- me acabas de encontrar- dijo Ash.
-Pero tu antes no estabas aqui..- dije confusa.
-Ya, bueno, una cambio de turno - dijo dudoso.
Lo mire dudosa yo tambien, dudaba que fuera un cambio de turnos.
-Ash, veras, ¿sabes que esta mal entrar en casa ajena? Se llama allanamiento de morada, y no esta bien hacer eso. ¿Sabes que puedo enseñarle la nota a la policia y vas directo a la carcel?
Quise hacerme la listilla pero no me salio bien.
-Guapa, ¿como demostrarias que la letra de la nota es mia?- dijo el
Me cortó el rollo por completo. Mire hacia otro lado para que no viese que su comentario me habia cortado por completo.
- Bueno - se atrevió a decir- ¿pasamos a mi despacho para que firmes el contrato y lo dejemos todo zanjado?
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9 MESES Y 38 DIAS
Fiksi Remaja¿Estarias dispuesto a vender tu alma al diablo con tal de tener 9 meses cumpliendote todos los deseos que quieras? Descubre lo que le pasa a Freya, una chica normal y corriente de la que todos tienen una visión equivocada. Su vida no la agrada del...