La Nueva Y El Mujeriego

Capítulo 16 - Hasta nunca, Eve

Maratón 3/3

-Cam!! Porque no me dijiste que no te volvería a ver?...-.Grité y estoy segura que me escucho, pero siguió su camino.

-Lo prometiste!!...Lo...prometiste...-. Dije disminuyendo gradualmente mi tono de voz.

Veía a Cameron alejarse hasta perderse detrás de esa puerta, sentí una impotencia por no poder hacer nada para detenerlo.

Cameron Pov

-Cam!! Porque no me dijiste que no te volvería a ver?...-. Gritó. No pude evitar sentir cosquillas en mi estómago. Y si ella lo sabe? Y si sabe de mi enfermedad? Maldición! Claro que lo sabe, estaba con Caroline, ella debió decirle. Además sus ojeras me indican que no ha podido dormir.

El vuelo fue agotador, sólo pensaba en Evelyn y en lo último que dijo. No me perdonaría si ella no vuelve a hablarme.

Ahora me encuentro en un hotel, desempacando con mis padres. Y aquí estoy yo, nuevamente mudandome, dejando a mis conocidos, a mis amigos Y a mi novia atrás. Porque no puedo tener una vida normal?.

- En que piensas, hijo?-. Pregunta mi madre.

-Nada importante-. Digo fríamente.

-Volverás a verla-. Dice muy segura al parecer.

- No! No la volveré a ver, tal vez ella me vea a mi, en mi tumba- Digo dirigiéndome a la puerta - Llegaré tarde, no me esperen-.

-Pero si no conoces la ciudad-. Dice mi padre. No respondo y azoto la puerta detrás mío.

Evelyn Pov

Pasaron apenas cuatro horas desde que Cam se fue, no he podio dejar de llorar. Caroline me dejó en mi casa y luego se fue a la suya, no sin antes llamar a Shei y Thomas, quienes estuvieron conmigo estas cuatro horas.

-Y que te parece un helado?-. Dice Thomas llamando mi atención.

-Cállate Thomas, llevas como media hora ofreciéndole distintas comidas y todas las ha rechazado-. Le Regaña Shei.

-Pero el helado siempre funciona-. Reprocha Thomy.

-Si quiero helado-. Interrumpo su pequeña discusión captando la atención de ambos, pues llevaba horas llorando sin decir ni una sola palabras.

-Lo ves?-. Dice Thomas victorioso, a lo que Shei le saca la lengua.

-Pues bien levantate y vístete-. Dice Shei mirando las ropas que hay en mi closet.

-Así Estoy bien-. Digo tapandome la cara con la almohada.

- No, te arreglaras para salir y punto-. Me regaña Shei mientras me pasa la ropa que eligió.

-Esta bien-. Digo a regañadientes  agarrando la ropa y entrando al baño.

-Anoche lo hiciste con Mike?-. Pregunta Thomas.

- No, Porque?-. Responde Shei.

- Eso explica porque estas tan gruñona-.

- Que te den-. Dice Shei. Salgo del cuarto de baño y ellos forman una perfecta "O" con sus bocas.

- Estas hermosa-. Dicen al unísono.

- Mentira, falta el maquillaje-. Les digo.

-Pero tu eres hermosa aún sin mauillaje-. Me dice Thomas. A lo que señalo mis ojos con ojeras, rojos e hinchados de tanto llorar.

-Oh! Es verdad, en eso tienes razon-. Dice Shei buscando maquillaje en su bolso. Después de unos retoques, ahora si estoy lista.

-Bien, vámonos-. Dice Thomas. Nos subimos a su auto Y partimos rumbo a la heladería. Shei prendió la radio y comenzó a sonar Yo te esperaré de Cali & El Dandee.

Yo te esperaré
Nos sentaremos juntos frente al mar
Y de tu mano podre caminar
Y aunque se pase toda mi vida yo te esperaré
Se que en tus ojos todavía hay amor
Y tu mirada dice volveré
Y aunque se pase toda mi vida yo te esperaré

Siento que me quitaron un pedazo de mi alma
Si te vas no queda nada, queda un corazón sin vida
Que a raíz de tu partida se quedo solo gritando pero a media voz
Siento que la vida se me va porque no estoy contigo
Siento que mi luna ya no está si no esta tu cariño
Ni toda la vida ni todo el agua del mar podrá
Apagar todo el amor que me enseñaste tu a sentir.

-Suficiente-. Dijo Shei cambiando de estación al notar que se me caía una lágrima por la mejilla.

Después de unos minutos más de conducción llegamos a la heladería. Yo no decía nada, sólo escuchaba discutir a Sheila y a Thomas, También pensaba ¿qué sería de mi sin ellos en mi vida?

Sheila y yo nos sentamos en una mesa Y Thomas fue por los helados. Al cabo de unos cinco minutos estaba de vuelta.

- Ya te sientes mejor?-. Pregunta Thomas dando una probada a su helado. Asiento con la cabeza.

-Ves Sheila? Un poco de helado siempre arregla las cosas-. Dijo Thomas.

-Cierra el pico-. Le contestó.

-Vuelvo en un rato-. Digo levantándome para dirigirme al baño. Camino mirando el piso, perdida en mis pensamientos. Hasta que choco con alguien.

-Niña pija? Me estás siguiendo?-. Me pregunta irónicamente ya saben quién.

-Zac...-. Digo sin ánimos, me quedo mirando por varios segundos esos ojos azules y esas pestañas tan largas que siempre consiguen hipnotizarme como si fuera la primera vez que los veo. Luego lo abrazo, lo abrazo lo más fuerte que puedo y el corresponde el abrazo.

-Nena, sabes que me encantaría quedarme así toda la vida, pero necesito pagar mi helado-. Dice separándose de mi.

-Lo siento-. Digo, no me había dado cuenta que estábamos en la fila.

- Ahora si, Cuéntame que te pasó, porque tienes esa cara?-. Dice al terminar de pagar su helado.

- Nada interesante-. Digo restandole importancia.

-Princesa, todo de ti me interesa

Cameron Pov

Voy caminando por la ciudad hasta llegar a una plaza abandonada. Veo una barra de metal, me acerco y parece ser una vía de tren, pero no se distingue bien porque está cubierto de plantas mal cortadas.

En eso escucho una bocina, es de tren, y yo casualmente estoy sobre las vías. Debería moverme? Después de todo, si no muero por el tren, me va a matar el cáncer. Vuelvo a escuchar la bocina del tren.

No, no voy a moverme. Doy la espalda al tren, Cierro los ojos fuertemente, lavanto mis brazos formando una cruz con mi cuerpo y aprieto los puños, suelto un último suspiro.

- Hasta nunca, Eve-. Sonreí al recordarla. Lo último que sentí fue un gran impacto y un intenso dolor en todo el cuerpo.

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Seguro hay algunas personas que han de estar odiándome por el final de éste maratón. Pero ni modo, lo hecho, hecho está.

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