Take Me // CHAELISA ;

Heredera

-¿Qué hora es?

-No lo sé, ya deben estar llegando.

Se abrieron las puertas y dos figuras más que conocidas entraron a la casa: ChaeRin y Jiyong. Venían como discutiendo, hablando seriamente sobre algo. Detrás de ellos, su séquito de sirvientes guiados por Seung-hyun que tenía cara de preocupado.

-El imbécil de Seungri arruinará todo como siempre- le dijo a Jiyong.

-...¿Q-qué es ésto...?- preguntó ChaeRin cuando levantó la vista.

Es que la escena no era para menos.
En el hall principal se encontraban las tres hermanas totalmente armadas, como esperándolos, mientras Minho sostenía a Sandara, totalmente atada y con rastros de sangre sobre su ropa. La mujer sollozaba y gritaba pero era en vano ya que estaba amordazada y no se podían distinguir sus palabras. Bobby también estaba con ellos, junto a Jisoo: sus piernas le temblaban demasiado pero temblaron aún más al ver a Jiyong, tanto que tuvo que bajar la mirada. Marcel estaba inconsciente en el suelo; Hanbin y Hyunbin estaban atados contra una columna.

-¿Y ellos? ¿Qué hacemos con ellos?- consultó Lisa.

-No sé de qué lado están, hay que neutralizarlos- Contestó Roseanne.

-¡Esperen! ¡Estamos de su lado!- gritó Hyunbin

-¿En serio, hermano? ¿Quieres estar del lado que va a ser masacrado por ChaeRin y Jiyong?- le preguntó Hanbin- prefiero ser neutralizado, y si llegan a sobrevivir, déjenos ir.

Jiyong miró a Jennie como buscando complicidad, ella sentía la mirada pero trataba de mantener la compostura, teniendo presente en su cabeza a quién debía defender con su vida.

-Hijas... Suelten a Sandara por favor... Ésta no es la manera...

-Callate ChaeRin, no estás en condiciones de pedir nada- La interrumpió Roseanne.

-¿Qué es lo que quieren?- contestó.

-Jiyong, sabes que puedo derribarlas en un segundo- susurró Seung-hyun en el oído de su hermano- Dímelo y las bajo en menos de lo que pronuncies la orden.

-Espera, Seung-hyun, déjame ver qué es lo que tienen planeado- contestó Jiyong sin dejar de mirar a Jennie.

-Arrodíllense- ordenó Jennie y pasó uno por uno apuntándolos con su arma.

-¿Qué queremos? Queremos la verdad, ChaeRin, eso queremos- habló Roseanne- y nos vas a decir todo o tu "sirvienta" va a dejar de ver la luz del día.

-¿Esa es la amenaza? Dejen todo niñas, maten a Sandara a mí no me interesa- habló Jiyong poniendo los pelos de punta.

-Cierra la boca Jiyong, prefiero tu cabeza rodando antes que la de Sandara- dijo ChaeRin.

-Átalos, Lisa- ordenó Roseanne.

Las rodillas de Lisa temblaban, iba a atar a las personas que más temía sobre la faz de la tierra. Pero sabía que Jennie, Roseanne y Jisoo no estaban jugando, y no les temblaría el pulso si se le ocurriría salir corriendo.

-Ésto está llegando demasiado lejos- susurró Seung-hyun cuando Lisa se acercó a él, y haciendo un movimiento rápido pudo safarse y meter su mano en su bolsillo para sacar su arma.

Pero realmente las chicas no estaban jugando.

Jisoo le voló los sesos tan rápido como él mismo le había enseñado a hacerlo.

No le había temblado un sólo músculo.

En cambio, Lisa estaba atónita. No era momento de hacer una escena más grande ni de entrar en pánico. Siguió atando a los demás presentes, que ahora ya no se movían.