Opciones

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Dos hombres llevaban a una inconsciente Lisa hacia el despacho más grande de la casa, seguidos atentamente por dos jóvenes, una de las cuales estaba muy nerviosa y no paraba de cubrirse la cara con las manos, como si eso modificara algo.

—Abre la puerta— dijo uno de los varones— Yo la sostengo y tú abres.

—Pero...No deberíamos anunciarnos…— titubeó el segundo.

—¿Eres idiota? ¡Nos mandó a llamar para esto! Abre de una vez, Hyunbin, para ser tan grande eres todavía un imbécil.

El más joven abrió las puertas que los separaban del destino final de su víctima, y, muy afligido por el insulto de su hermano, Hanbin, se limitó a hacerlo en silencio.

—¿Por qué?— Preguntó Roseanne a su madre entrando en la habitación— ¿Por qué la golpearon? ¿¡Por qué así!?

—Silencio, Chaeyoung, ya tengo demasiados problemas como para que empieces a gritarme— Contestó su madre con una tranquilidad que enloquecía a Roseanne— Sandara, por favor, despiertala, tenemos que asegurarnos de que sea consciente al momento de ver sus opciones.

La criada procedió e intentó despertar a Lisa, pero ésta parecía seguir bajo los efectos del golpe.

En la habitación el aire se cortaba con un cuchillo: SooHyun esperaba impaciente como un buitre a que su presa muera, Hanbin se sentía orgulloso del pequeño trabajo que le permitieron hacer dentro de la casa, mientras que su hermano todavía parecía estar afligido. Por su parte, Roseanne, fulminaba a su madre con la mirada y a la vez se sentía abrumada por el futuro cercano que las esperaba a ella y a Lisa, sabía que ésto no iba a terminar muy bien, conocía a su familia y no eran de negociar (menos con alguien como Lisa que no tenía nada más que un pequeño trabajo en un café y una madre que no la quería), siempre se encargaron fácilmente de los estorbos, y muchas veces ella cooperó con eso.

Finalmente, Lisa comenzó a abrir los ojos (le habían retirado ya la bolsa de terciopelo negra que la cubría) y se mostraba dolorida y confundida, como si los recuerdos se hubieran borrado por unos segundos.

—¿Q.. qué, qué me hicieron?— preguntó con un hilo de voz.

—Nada, querida, mis sobrinos se pusieron nerviosos porque no hacías caso— habló la mujer con esa paciencia característica— Te pedimos disculpas por eso.

Lisa giró la cabeza y vió a las personas que la rodeaban, aunque sólo pudo reconocer a su gran amor y a SooHyun.

—¿Pp..por qué…?— dijo volviendo la mirada a ChaeRin.

—Mira—la interrumpió ésta— estás aquí para reveer tus opciones.

—¿...Mis opciones?

—Sí, verás, es una lástima que hayas quedado en medio de un asunto más grande que tú existencia, pero me temo que ahora eres más peligrosa que nadie.

Lisa abrió los ojos como platos y tragó saliva tan fuerte que habría jurado que la escucharon.

—Pero...yo…

—MADRE LISA NO ES PELIGROSA PARA NADIE— interrumpió Roseanne casi a los gritos, con los puños cerrados.

—Calla, Chaeyoung— ordenó ChaeRin con un ademán de la mano— Calla y escucha— parecía que se preparaba para narrar lo que sería una gran historia, aunque no empezaba y llenaba la sala de suspiros— Mira— dijo al fin— Tú y ese bastardo… Después de todo me entero que ni él te quería, y sin embargo, ahora sabes todo sobre mi familia, y estás más involucrada incluso que mis sobrinos que ni formaron parte del tiroteo.

Take Me   //   CHAELISA ;Donde viven las historias. Descúbrelo ahora