capítulo 14

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Y aquí estaba yo, en Barcelona. Debería de estar haciendo cualquier otra cosa menos teniendo viajes no programados y salvando culos. Debería de estar en casa o en la universidad estudiando para licenciarme de una puta vez.

De la base a la casa en donde se encontraba, Erick me llevaría entre unos 15 a 20 min, por lo que tenía que pensar muy bien lo que iba a hacer. Les haré pasar un buen susto y pondré a prueba las habilidades de su equipo. Si pasan esa simple prueba podría mantenerme un poco más tranquila con respecto a la seguridad de Erick, pero como sé que es su primera misión como teniente le costará tomar rápidas decisiones. Al menos...mi primera misión fue un asco, veremos si Erick aprendió algo. Miro hacia atrás y veo que uno de estos mismos Jeep me sigue-ruedo los ojos-debe de ser, Esteban. Miro las calles de mi lado derecho para tomar un atajo y así perderlo de vista. Veo una y giro rápidamente y acelero, tomando diferentes calles hasta entrar en un estacionamiento. Tenía que sacarle el GPS al Jeep o me seguiría sin parar. Tomo un pequeño rastreador de señales de la guantera y voy revisando el auto. Finalmente encuentro que está en el tapabarros de la rueda izquierda trasera, por lo que, trato de desconectarlo lo más rápido que puedo y salir de ahí. Es más que seguro que, Esteban ya encontró la señal. Cuando logro sacarlo lo boto al piso y me subo nuevamente al Jeep, salgo por calle trasera y retomo mi camino si obstrucciones. Mi estado de ánimo no está ni siquiera para escuchar música y eso que dicen que la música amansa a las fieras, les diré que a esta fiera esa frase no le va.

Por fin, luego de la pequeña aparición de Esteban, llego donde está el idiota de Erick. Me estaciono a dos cuadras y saco mi pequeña mochila que no había bajado junto con el equipaje. Ahí tengo mi computador, con lo que me dispongo a apagar el sistema de seguridad de la casa en donde se encuentra. Apago sus radio transmisores y sus cámaras. Me pongo unos lentes con visión nocturna y de calor, ya que también desconectaré la luz. Cierro el maletero y me dispongo a entrar. Obviamente no entraré por la puerta principal, nunca entren por las puertas principales, ya que es el primer lugar por donde general se disponen a cubrir. Las puertas secundarias al igual que las puertas principales son aseguradas, si están con agente inteligente, pero como sé que no estará bien preparado entraré por la ventana del ático. ¿Cómo entraré al ático? Ni puta idea, algo se me irá a ocurrir. Me pongo un audífono que permite escuchar las conversaciones a través de paredes y escucho un pequeño ajetreo y la voz desesperada de Erick-no puedo evitar reírme un poco del susto que le estoy haciendo pasar-miro hacia el lado y hay un árbol que me puede servir de escalera hacia el ático. Demostraré de que puedo volver esa agente fantasma, la que mi padre da por hecho que ha desaparecido. Saco de la mochila unos guantes para no dañarme las manos al subir el árbol y cuando ya estoy lista comienzo a subir ese enorme árbol. Luego de unos cortos dos minutos de subida, miro con los lentes si es que hay alguien en el tercer piso, donde se encuentra el ático y por lo que veo el área está despejada. Abro con mucho cuidado la ventana sin hacer ruido y entro. La vuelvo a cerrar y observo el lugar. Estoy en techo prácticamente de la casa...tengo solo una entrada para la casa...una escalera...creo que será mejor que la abra y tire una bomba de humo, haciendo esto no sabrán donde estoy y podré llegar rápido donde Erick. abro lentamente aquella puertita y miro hacia abajo. Hay un solo sujeto revisando el área, por lo que será fácil neutralizarlo. Le lanzo una pequeña descarga eléctrica y este cae desmayado al piso. Hace ruido al caer al piso, por lo que acabo de dar mi ubicación ¡Rayos! Bajo rápidamente por la escalerita del ático y chequeo que no haya nadie en las habitaciones del segundo piso. No hay nadie, deben de estar todos en el segundo piso. Saco la bomba de humo y la tiro hacia el primer piso donde se escuchan gritos y órdenes. Los gritos son los de una mujer, esa debe de ser la zorra que contestó el teléfono de Erick cuando lo llamé-una sonrisa se forma en mi cara, ahora te las verás conmigo...-bajo con cautela las escaleras con los lentes puestos, me olvido de la mascarilla por lo que trato de ponérmela cuando un sujeto se me tira encima y caemos ambos por las escaleras ¡Maldición! Afortunadamente no recibo ningún golpe, toda la caída la recibe el otro sujeto. Le pego en la nuca y este se queda en el piso. Me odiarán por hacerles esto, pero bueno. Les sirve de lección ¿no? Una lección de Elizabeth Seidel, no las doy a menudo. Logro ponerme la puñetera mascarilla ya que me estaba comenzando a ahogar y le podía hacer daños a los bebés, mis bebés...la madre que tienen. Poniéndolos en un innecesario peligro. Todos están como locos en la sala de estar, la chica me ve y se me lanza encima, debo admitir que esta chica sabe pelear, me golpea en la mandíbula y yo con el cabreo que tenía la tomé de la cabeza y le golpeé en la nariz, esta se restira un poco maldiciendo y agarrándose la nariz. La chica me mira con furia y vuelve a lanzárseme esta vez me bota y sienta sobre mí golpeándome en la cara, la quito de encima y esta vez soy yo la que la golpea, me paro y ella también lo hace y para finiquitar mi pequeña venganza sobre ella doy un pequeño giro y le pego una patada en la cara. Obviamente la chica no se para, se queda acostada en el piso retorciéndose de dolor. Tres agentes más tratan de neutralizarme tratando de agarrarme y golpearme, pero ninguno lo consigue. Al terminar con ellos por fin encuentro a Erick. Él está tratando de volver la seguridad en la casa y encender las cámaras. No me ha visto, me deslizo sobre el piso y me quedo detrás de él. Tomo la black, que la tenía en la parte trasera y le apunto en la cabeza. Erick se tensa y maldice. Pero me sorprende cuando dice.

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