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N O... E N T I E N D O [Parte 2]

—Él no quiere que quedaras involucrada en esto, es una... Orden.

¿Qué? ¿Akashi? ¿Por qué?

—¿Orden?

—No diré más.

—M-midorima no puedes hacer eso, todo para mi es confuso ahora ¡Y tu te niegas a decirme! —Doy un golpe a la mesa.

—___(Tn)-chan baja un poco la voz —Me dijo Takao susurrando, tiene razón, puedo estar incomodando a los demás.

—Lo siento —Solté un suspiro —No lo entiendo...¿por qué no quieren que este involucrada?

—La razón en simple...eres demaciado fuerte, tu serias la causa de nuestras derrotas, ___(Ta).

Un silencio invadió el espacio, Takao tal vez se incomodó y se fue, lo seguí con la mirada hasta que lo perdí por una pared, tal vez fue al baño.

—¿Yo...soy fuerte? ¡No juegues conmigo! ¡Yo no soy fuerte, no puedo acabar con ustedes! —¿Qué me pasa? —¡No necesitabas una excusa! ¡Solo...! —Mi respiración pesa — Solo...necesitas decir que me odias.

—Eso n... —No lo deje terminar.

—Tu, Akashi, Murasakibara, Aomine incluso Kuroko tienen derecho a odiarme, y creeme que los entiendo.

No iba a llorar, eso era seguro, me sentía mal, mi cabeza comenzó a doler, es normal.

—___(Ta) no lo estas entendiendo —Mire a Midorima tenía el ceño fruncido.

—Me voy a casa.

Me levante de mi asiento y camine hacía la puerta, al salir pude notar que comenzaba a oscurecer, hay algo de frío y para mi suerte no traje un sueter, suspiro. Comencé a caminar a dirección donde estaba la estación, después de unos segundos Midorima estaba a un lado mío.

—Te llevo a casa —dijo, no lo mirare, solo seguiré caminando.

—Como quieras —conteste.

Se me hacía gracioso que aún pasado los años el siga con su objeto de la suerte de todos los días, hoy era un carrito de juguete, raro. Después de un rato caminando en total silencio llegamos a la estación, nos quedamos esperando.

Ahora que me doy cuenta... Midorima tiene... ¡¡Tiene un amigo!!

—¿Takao...es tu amigo cierto? Se ven muy cercanos.

—No. —Sabía que lo negaría, nunca fue muy bueno para decir las cosas.

—Oh...pobre de él —¡¿L-l-lo dije?! Sonreí nerviosa.

—¿Disculpa?

—Si, por que tiene que aguantarte todos los días —¡No sigas diciendo cosas sin sentido (Tn)!

—... .... —se quedó en silencio con el ceño fruncido.

—Lo siento, no era mi intención moles...

La Reina De Los Milagros. (Kuroko No Basket Y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora