Twenty-two.

Capítulo XIV: Los buenos recuerdos son igual de dolorosos que los malos.

Los domingos, las chicas no hacían nada. No trabajaban, ni salían, solo se quedaban en el apartamento comiendo, usando sus respectivas laptops o viendo televisión. Aquello les gustaba y daba por seguro que se convertiría en un su nueva rutina dominguera.

Elaine se encontraba en su habitación compartida con Juliette e Idelle. Ella veía en su laptop viejas fotos guardadas que se había tomado con el transcurso del tiempo. Abrió una carpeta llamada ‘’Preparatoria’’ y todas sus fotos en sus últimos dos años de colegio aparecieron. Sintió un poco de nostalgia al abrir una hermosa foto que tenía con Roxanne, Juliette y Patrick el día de la graduación.  Era una hermosa foto que tenía en un portarretrato en su vieja habitación pero no se había dignado a traer para evitar recuerdos dolorosos, así que decidió escanear aquella hermosa foto y guardarla en su laptop para siempre.

Aunque Patrick nunca fue novio de Elaine, pensar en él traía dolor, cosa que a Elaine no le gustaba admitir mucho ya que había una gran historia entre Roxanne, Juliette, Patrick y ella.

Ellos cuatros habían empezado a ser mejores amigos a finales del primer año de preparatoria. Patrick siempre había tenido un enamoramiento en Roxanne pero nunca se había atrevido a hablar con ella más de dos palabras pero gracias a Juliette y Elaine, él pudo establecer una conversación normal con Roxanne para luego ser muy buenos amigos los cuatro.

No eran solo muy buenos amigos, eran los mejores amigos. Hacían los trabajos y las tareas juntos, almorzaban juntos, salían juntos e incluso llegaron a dormir juntos en una fiesta de pijamas que había hecho Elaine una vez.

Patrick para ellas, siempre fue alguien muy especial. Una persona tierna y tímida la cual se reía de sí mismo, y odiaba ser cruel con las personas. Eso fue lo que causó que no tuviera amigos. Sus únicos amigos eran las tres jóvenes chicas que le salvaron su vida social prácticamente porque Patrick siempre había sido un chico escondido en las sombras, sacando buenas calificaciones y hablando poco. Pero luego de juntarse con aquellas locas chicas, él aprendió a ser más extrovertido y un poco más rebelde.

Algo obvio era que su partida no había sido algo muy bien recibido. No solo Roxanne se puso muy mal, sino también las demás amigas. Les había afectado, pero Elaine solo contaba cómo se sentía Roxanne, porque Elaine era la que menos quería hablar sobre el tema de Patrick siendo su mejor amigo aunque fuera increíble.

Elaine no hablaba de Patrick como un viejo mejor amigo que les hizo su vida más alegre, si no como un chico simpático que había sido novio de Roxanne, eso era todo.

Un cierto rencor había tomado el corazón de Elaine cuando Patrick se fue y solo se comunicó con Elaine y Juliette los primeros dos años de su partida. Luego, no pasó nada más. Ellas dos no supieron más de él e incluso lo pudieron considerar muerto si no hubiera sido por como Patrick hablaba con Roxanne, pero nunca se atrevió a llamar a Elaine o a Juliette. Eso hizo que el corazón de Elaine se endureciera con respecto a Patrick siendo un viejo mejor amigo; era por eso que ella no lo mencionó como alguien que había querido mucho.

Pero algo no podía negar, ella lo extrañaba porque había tenido cierto efecto, no solo en ella, sino también en Juliette.

Elaine sacudió su cabeza para no volver a pensar de nuevo en Patrick y miró a Juliette que se encontraba en su cama, escribiendo en su celular.

-Juliette, ven a ver esta foto.

Ella levantó la mirada y fue hacia la cama de Elaine a mirar la pantalla de la laptop. Juliette se mordió el labio y luego soltó una risa al ver la foto.

-Recuerdo perfectamente ese día. Me acuerdo que luego de esa foto, nos abrazamos creyendo que no nos veríamos de nuevo, pero en la noche fuimos a una fiesta que había organizado una de nuestro salón.