Twenty-two.

Capítulo XVIII: Prohibido enamorarse de Hunter Golding. {Parte II}

La lasaña estaba servida y olía estupendo. Cada uno disfrutaba en su plato la maravilla que había preparado Idelle.

Hunter fue el primero en elogiarla.

-Vaya Idelle me impresionaste.

-Gracias Hunter -las mejillas de Idelle estaban ruborizadas como cada vez que Hunter decía un cumplido.

Incluso cuando todos estaban muy ocupados comiendo, se sentía una tensión extraña entre Hunter y Christopher, como si se quisieran asesinar mutuamente.

-Yo normalmente odio la pasta, pero la lasaña de Idelle es tan deliciosa que incluso me como un pedazo entero -comentó Elaine.

-¿Odias la pasta Elaine? ¿Cómo es posible eso? -le preguntó Christopher.

-Nunca me ha gustado mucho. Prefiero mil veces el pollo -Elaine se encogió de hombros y siguió comiendo lentamente.

Roxanne miró a Hunter con una sonrisa amable.

-Así que Hunter, ¿eres bisexual cierto? -preguntó ella indiferentemente y Beatrice le dio una mirada para que se callara.

-¿Por qué todo tiene que ver con la sexualidad de Hunter? -la pregunta retórica de Idelle fue completamente ignorada.

-Sí, lo soy -contestó Hunter con gentileza.

-¡Justo como Elaine! -dijo Juliette.

Christopher casi se ahoga con la comida y tuvo que beber de su bebida varias veces para poder articular bien las palabras

-¿Lo eres? -preguntó Christopher incrédulo.

Elaine alzó las cejas.

-Juliette exagera en muchas cosas. Digamos que soy... heteroflexible.

-¿Si lo fuera habría algún problema? -cuestionó Hunter.

-Claro que no. Solo que eso fue mucha información en una sola oración y no de una manera tan gentil.

Hunter miró a Christopher con una sonrisa sarcástica. Elaine pudo ver que Hunter estaba que asesinaba a Christopher por su actitud, bueno, no era el único que quería hacerlo.

Beatrice aplaudió para que todos tuvieran su atención.

-Así que... ¿Qué se siente ser novio de Idelle, Hunter?

Idelle cerró los ojos, se quería morir. Ella había negado ser novia de Hunter y ahora él tenía que responder esa pregunta tan inconveniente para Idelle.

Hunter se aclaró la garganta.

-No somos exactamente novios...

Christopher tomó mucho interés en la respuesta de Hunter.

-Así que solo están cogiéndose los dos, ¿estoy en lo cierto?

Hunter e Idelle fulminaron con la mirada a la pareja que tenían en frente.

Elaine se llevó una mano a la frente y luego debajo de la mesa apretó el muslo de Christopher con su mano, y le susurró:

-¿Qué crees que estás haciendo Christopher? Déjalo en paz, por el amor de Dios.

-Bueno Christopher, para ser exactos... Yo nunca he tocado a Idelle con otra cosa que con mis labios. ¿Qué hay de ti? Elaine es tu... ¿qué? ¿Décima novia este año?

Elaine se mordió la lengua para no gritarle a Hunter, pero él tenía el derecho de defenderse cuando Christopher estaba siendo un completo idiota.

-Pude haber salido con muchas mujeres pero nunca he engañado a alguna de ellas -se defendió Christopher con su típico tono de soy-mejor-que-tu.