-Oh querida Idelle, ¿me harías un favor? –suplicó Elaine mientras se subía en sus tacones lista para irse a trabajar un viernes. Idelle miró a Elaine con una ceja alzada- ¿Puedo invitar a Chris a la cena de hoy?
-Por supuesto, así no le coquetearás a Hunter cuando me descuide –Idelle sonrió sin despegar los labios.
Elaine rodó los ojos y le besó la mejilla a Idelle.
-Gracias, hoy llego más temprano.
-¿Almorzarás de nuevo con Christopher? –le preguntó Idelle con una sonrisa pícara.
-Ojalá.
Elaine salió del apartamento y bajó las escaleras hacia la entrada para tomar un taxi e ir a su trabajo.
Idelle, en cambio, no trabajaba ese día. La biblioteca sería pintada en algunas zonas y la cerrarían hasta el martes. Aquello le favoreció mucho porque podía pasar el día leyendo y cocinando.
-¿A qué hora dijiste que venía Hunter? -le preguntó Roxanne tomando un vaso de agua.
-A las seis y media. Christopher también viene, bueno, si es que acepta.
Roxanne casi se ahoga con el agua.
-¿Christopher Thompson? ¿El bombón millonario?
-No estoy segura que sea millonario, pero sí, ese bombón.
-¿No has visto los sitios webs, verdad?
Idelle miró a Roxanne como si estuviera completamente demente.
-¿Investigaste a Christopher, Roxanne? ¿Estás loca?
-No. No lo hice... Solo... Quise saber un poco de él, mas nada.
Idelle se llevó una mano a la frente, pero luego suspiró y miró a Roxanne de manera vencida.
-De acuerdo, dime, ¿Qué viste?
-Leí muchas cosas, la mayoría eran rumores. Pero leí un artículo que decía que Christopher era uno de los hombres más ricos en el Reino Unido. Obviamente, apartando a la realeza.
-¿Con ese trabajo de editor se volvió rico?
Roxanne sonrió de manera juguetona.
-Esta es la mejor parte. La respuesta es no. La mayoría de su fortuna es gracias a una gran herencia que le dejaron sus padres y la comparte con su única hermana mayor, Alicia Thompson.
Idelle negó con la cabeza y se llevó los dedos a las sienes.
-Esto está muy mal, no deberíamos saber este tipo de cosas antes que Elaine, al parecer a ella le gusta mucho. Mejor no digamos nada, son cosas que Christopher le debería contar si es que un día son pareja –hubo un silencio y de repente Idelle preguntó- ¿Algo más que deba saber?
Roxanne era la maestra en chismes de celebridades, en cambio, Idelle y Beatrice lo eran en chismes de personas comunes.
-La tía materna de Christopher fue la editora de la revista antes que Christopher tomara el trabajo, lo que causó muchos disgustos en varios empleados al ver que una persona tan joven como Christopher ocupara un puesto muy importante.
-Mi Dios –exclamó Idelle- Que vida tan difícil. ¿Algo más?
Roxanne esbozó una sonrisa de nuevo. Ella estaba tan llena de información fresca que sentía que podría explotar.
-Ha salido con muchas supermodelos incluso actrices, pero la mayoría no han durado más de seis meses.
Idelle alzó las cejas e hizo una mueca.
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Twenty-two.
Romanzi rosa / ChickLitCinco dementes chicas se mudan juntas a Londres haciendo su sueño realidad. Para ellas será algo de ensueño, pero no saben estarán por pasar muchas cosas insuales para ellas. Se veran enredadas en líos, nuevas amistades, amores y engaños. Todas tend...