Tras pasar unos años estudiando en Estado Unidos, Dana Jones decide volver a Inglaterra, su país de origen, para retomar su vida allí y reencontrarse con su familia y sus dos mejores amigos: Brian May y Roger Taylor, quienes ahora forman una banda d...
La primera semana en Londres de Dana pasa bastante rápido. Su trabajo en Biba resultó ser bastante entretenido para la chica; se divertía ayudando tanto a las señoras que entraban a curiosear y que buscaban cosas atrevidas que impresionaran a sus maridos, como a las chicas más jóvenes que necesitaban consejo de alguna dependienta de su edad como ella. Además trabajar junto a Mary también le hizo el comienzo mucho más llevadero y ahora que se ha terminado de hacer al lugar, se siente bastante bien teniendo que trabajar allí mientras encuentra otra cosa.
Por otro lado, visita a su familia y amigos prácticamente a diario; su madre la examina de arriba a abajo cada vez que la ve (cosa que más que desesperar, divierte a la chica) y Peter intenta impresionarla con sus técnicas con el balón de fútbol o con algún chiste malo que haya aprendido en el colegio; por otro lado, James y ella a veces salen juntos para charlar y ponerse al día, y él algunas veces hace de chofer para ella; su padre, aunque está más liado con el trabajo, también pasa tiempo con ella y la familia y trata de estar en casa cuando Dana llega de visita.
Brian y Roger han empezado a ensayar con Freddie, el nuevo cantante de la banda, y con un chico que toca el bajo y se llama John Deacon; este es muy agradable y un poco tímido. La chica ha asistido a alguno de los ensayos, y todos están de acuerdo en que el nuevo bajista es un gran fichaje, ya que tiene una gran técnica, y en que la voz de Freddie es algo espectacular. Dana muchas veces se impresiona con sus capacidades escénicas (aunque solo sea un simple ensayo en el garaje de los chicos).
También le vio un día en Biba, ocasión que el chico seguramente aprovechó para hablar con Mary; ella no se acercó en ese momento para así dejarles intimidad, pero más tarde su amiga le contó que ese chico en cierta forma le parecía interesante y ya había hablado con él un par de veces.
Por su parte, con sus mejores amigos ha seguido como si esos tres años sin verse no hubieran pasado; Brian la llevó un día a su facultad para que viera en lo último que estaba trabajando (que, aunque no es tan apasionante como su forma de tocar la guitarra, la chica se sorprendió con lo que hace); y Roger, por su parte, acabó cediendo a dar unas clases a Dana para conducir con los coches ingleses; a la chica no parecía dársele tan mal como ambos esperaban, pero en algún momento se llevaron algún que otro susto que provocaba en ambos gritos y carcajadas.
Dana se alegra mucho de que la relación con sus amigos sea como siempre, sobre todo en el caso de Roger. Pero, aunque todo siga prácticamente igual, la chica nota que a veces su amigo rubio se acerca a ella más de lo estrictamente necesario; aunque es cierto que entre ellos nunca se han cortado a la hora de dar abrazos o muestras de afecto con total confianza, ella siente que su amigo tiene en ocasiones otras intenciones. Cuando eso pasa, ella solo obvia sus gestos y comentarios, o finge que no capta lo que él quiere decir.
Dana tiene muy claro que lo que pasó esa noche hace años no va a volver a pasar; no está dispuesta a estropear por completo su amistad por mucho deseo que él o ella puedan llegar a sentir, y se mantendrá firme en su decisión.
De momento vuelve a ser fin de semana, y la chica se encuentra otra vez en el bar donde Smile va a actuar de nuevo, y esta vez con nuevo cantante y bajista; tiene unas ganas enormes de ver el resultado de todos los ensayos en el escenario.
Ahora mismo, Dana se encuentra con George entre el resto del público, hablando con él mientras en una mano sostiene un vaso y, en la otra, un cigarro al que le va dando caladas; con su antiguo compañero de instituto también ha vuelto a coincidir alguna vez por la ciudad, y finalmente han ido quedando a veces para tomar algo después de trabajar y hablar más tranquilamente.
A Dana le sigue pareciendo un chico bastante simpático, gracioso y, porque no decirlo, bastante guapo. Roger a veces sigue poniendo pegas a que ella se vea con él, y Brian continúa lanzándole pullas por ello; la chica solamente les ignora y continúa llevando vida social a su antojo.
- Entonces, ¿les has visto ensayar con los nuevos músicos?- pregunta George. La chica asiente mientras termina de beber de su vaso. - Son muy buenos. Tengo muchas ganas de verles en concierto. - Lo que no tengo claro es como va a reaccionar el público- Dana pone cara de no entender para que el chico siga explicando-. Yo solo conozco al nuevo cantante de vista, pero sé que algunos le llaman "paqui", porque por lo visto viene de Paquistán o algo así... - No es de Paquistán- interrumpe ella con tono de voz cansado. No es la primera vez que escucha esa historia equivocada en boca de la gente. - Ya, yo lo sé, pero la gente no. No sé como les sentará que Tim ya no esté y ahora le sustituya él. - Tim decidió irse a otro grupo, así que él se lo pierde- contesta la chica decidida a defender a sus amigos-. El grupo ahora es mucho mejor desde que tienen la voz de Freddie, y también con John como bajista. Si no, ya lo comprobarán todos esta noche.
Tras decir esto, George la observa con una sonrisa mientras piensa en lo decidida y positiva que es, y lo mucho que le gusta ese aspecto de ella. Dana le corresponde con otra cálida sonrisa, tras lo que da una calada más a su cigarro y pasea la vista entre la gente en busca de Mary.
Unos segundos después, su amiga rubia se acerca a ellos para unirse a la espera del inicio del concierto; cuando ya ha saludado a ambos, le da un pequeño codazo a Dana en el brazo y le sonríe señalando al chico, a lo que ella solo pone los ojos en blanco mientras ríe ligeramente.
No pasan ni cinco minutos cuando la banda comienza a salir al escenario y Brian hace las presentaciones; como predecía George, hay algún abucheo y comentario hacía Freddie, pero todos los miembros de la banda los obvian y se centran en el concierto. Después de que Roger le pregunte al cantante si está listo, la música comienza.
Freddie empieza a trajinar con el micrófono, hasta que finalmente acaba con la mitad de él en la mano; sin importarle el resultado, comienza a cantar mientras se mueve de su forma particular con el ritmo. Dana conoce bien la canción que están tocando, y definitivamente la letra no es la misma que la que ahora mismo está cantando Freddie; parece que los chicos se dan cuenta y le llaman la atención, pero él no hace caso y sigue a lo suyo.
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La chica observa al público a su alrededor, y ve caras de confusión mientras observan, sin moverse, al chico nuevo.
Ante esa situación, Dana comienza a moverse al ritmo de la música para que el público comience a bailar, y anima a sus amigos a hacer lo mismo; George es el primero en unirse, riendo y moviéndose a la vez que la chica, y acto seguido lo hace también Mary (que no aparta los ojos de Freddie).
La gente comienza a mirarles y, al cabo de un rato, todo el mundo se ha unido a los tres chicos que bailan, y toda la sala se mueve al ritmo de Smile y su nueva voz. Keep yourself alive...
