Lucy Weasley y el Cáliz de Fuego ✔️ [LucyWeasley II]

25. El paseo nocturno

- Lucy.

La pelirroja se revolvió entre las sábanas, sin hacer caso.

- Levanta.

Nada. Pero Pelos insistió.

Se colocó frente a su rostro lleno de pecas, y le dio unos toques en la nariz.

- ¡Despierta, vagaza tragona!

Esta vez, Lucy sí abrió los ojos.

- ¿Qué quieres? - susurró, desperezándose. Miró el despertador de Lavender -. Es la una de la mañana - dio un largo bostezo -. Vuelve a la cama.

- Es por Harry - explicó Pelos -. Le he visto con el huevo dorado en la sala común. Luego se ha puesto la capa invisible y ha salido por el agujero del retrato.

Lucy se incorporó, extrañada. ¿A dónde iría Harry con el huevo a esas horas? Realmente, no era problema suyo.

Pero la curiosidad la pudo.

Como siempre.

Se puso unos gruesos calcetines de lana azul y sus zapatillas, y salió de puntillas del dormitorio con Pelos. Cruzaron la sala común y salieron por el hueco del retrato, con la Señora Gorda medio dormida.

Lucy encogió su tamaño y montó sobre Pelos. El conejo olfateó el ambiente y emprendió camino por los desiertos pasillos, iluminados por la luna llena. Lucy recordó a Remus, y sintió algo de lástima.

- Está por aquí - susurró Pelos.

Lucy observó el desierto corredor. Harry debía estar bajo la capa.

Pelos caminó hasta el centro del pasillo. Lucy se bajó de su espalda y volvió a crecer hasta su tamaño natural. Miró a ambos lados, escuchando con atención. Se escuchaban unos pasos amortiguados. La pelirroja pidió a Madre que no fuesen los de Filch.

- ¿Lucy? - susurró una voz a su lado.

Harry sacó la cabeza de la capa.

- ¿Qué haces aquí?

- Pelos te vio marcharte - explicó ella -. Salimos a ver si pasaba algo. ¿A dónde has ido?

- Al baño de prefectos - dijo Harry, señalando el pesado huevo dorado -. He avanzado con el acertijo. Te explico todo en la sala común.

Lucy asintió mientras Harry la invitaba a esconderse bajo la capa. La pelirroja encogió su tamaño de nuevo. Se subió al hombro izquierdo de su amigo, mientras que Pelos se subió al derecho, y el azabache emprendió la marcha observando el mapa del merodeador.

Entonces los dos chicos repararon en algo extraño en el mapa. En el despacho de Snape estaba señalada una persona como "Bartemius Crouch". Se miraron entre ellos con incredulidad.

- ¿Qué hace Crouch allí a la una de la madrugada? - preguntó Harry.

- No sé - dijo Lucy -. Pero... me parece extraño. Me dan ganas de echar un vistazo...

Se miraron con complicidad.

- Chicos, no - advirtió Pelos.

- Fue tu idea sacarme de la cama - replicó su amiga.

- Ya, pero...

Tarde. Harry ya estaba caminando hacia las escaleras que llevaban al despacho de Snape.

Bajó las escaleras con sigilo. Lucy decidió salir de la capa, aún con el tamaño reducido, para adelantarse y vigilar que el camino estuviera despejado.