C O N E X I Ó N

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Narra Alba:

Me fijo en la gente que hay en el pub sin conocer a nadie, hasta que veo a la persona que quería encontrarme hoy. Mikel. Me acerco a él, está solo y es raro, seguamente esté esperando a alguien. Al levantarme de la silla noto como Julia viene detrás, se lo agradezco porque se me puede ir la cabeza.

Alba: ¿se puede saber que coño pasa contigo?
Le digo dándole un pequeño empujón.

Mikel: anda mira quien está aquí, a mi no me pasa nada ¿y a ti qué?

Alba: pues a mi me pasan muchas cosas, y todo por tu puta culpa que eres gilipollas.

Mikel: pero rubita si yo a ti no te he hecho nada.

Noto unos pasos detrás de mi y no me hace falta girarme para saber que es Natalia gracias a su perfume.

Natalia: Alba, vete.
Me dice mientras señala la salida.

Alba: ¿p-pero? ¿por qué coño me tengo que ir?

Natalia: vete por favor, no quiero verte.

Alba: Pero Nat no entiendo nada, ¿qué pasa? Dije con lágrimas en los ojos.

Natalia: ¡¡JODER ALBA QUE TE PIRES!!
Dijo dándome un empujón.

Mikel: deja de molestarnos y de joder nuestra relación.

Alba: Natalia, no me creo que esto esté pasando, por favor no creas nada de lo que te dice.

Julia: Natalia, cuando te he dicho que iba a casa de Alba era para contarle una cosa sobre Mikel que me he enterado gracias a una persona cercana a él y a mi. Por favor no le hagas caso está jugando con las dos.

Natalia: que no, que no me da la gana, que os piréis las dos y me dejéis tranquila. 

Alba: Nat.. por favor, vamos a hablar..
Dije llorando casi sin poder hablar.

Natalia: olvídame. Quizás tenía razón en lo que te dije, has empeorado las cosas, y cada vez más.

Esas palabras me sentaron como si me apuñalaran, no era capaz de asimilar todo lo que estaba pasando y ver a Natalia así. Julia me agarró del brazo y me sacó de allí llevándome a un sitio más tranquilo y sin gente. 

Julia: Alba, te prometo que esto se va a arreglar. 

Alba: la he perdido, no sé que hacer para que me escuche y me crea..

Julia: voy a pedirle a María que hable con ella luego, y tranquila que no la has perdido. Confía en mi. Ven aquí, dame un abrazo. 

Estuve llorando tanto tiempo que me iba a explotar la cabeza, tenía los ojos súper hinchados así que decidí decirle a Julia que se fuera a su casa a descansar y que yo haría lo mismo. Llegué a mi casa, no quería que nadie me viera pero mi hermana estaba en el salón y me vio. 

Marina: ey ey, ¿estás bien?

Sin decir nada, me senté a su lado y la abracé. De nuevo empecé a llorar. Ella me acariciaba la espalda y la cabeza intentando calmarme. 

Alba: soy una gilipollas Marina, siempre la cago.

Marina: ¿qué ha pasado?

Alba: la chica del bar, ¿te acuerdas? 

Marina: claro, ¿te ha hecho algo?

Alba: nono, no es eso. Su novio, bueno, su ex, el que estaba con ella, pues no nos deja en paz y siempre acaba metiéndose entre nosotras pero hoy ya ha conseguido lo que quería. Natalia le dejó, porque su relación no iba a más y estaba estancada desde hace un tiempo, y me dijo que el conocerme a mi fue una razón más para dejarle. Entonces él empezó a decirle que se iba a arrepentir de dejarle por mi y mil tonterías más. Y hoy Julia ha venido a decirme que se ha inventado cosas de nosotras, dejándome fatal pero a Natalia muchísimo peor.
Y me entraron ganas de reventarle la cara y fui a buscarlo a su casa, pero Julia quería que me tranquilizara un poco y entramos a un pub que había allí. Y tuve tanta suerte que estaban allí los dos, Natalia y Mikel, pero yo solo vi a Mikel entonces me acerqué para hablar sobre lo que había hecho y de repente apareció Natalia pidiendo que me fuese de allí, repitiendo la frase que me dijo cuando ayer discutimos, que empeoro las cosas.