C O N E X I Ó N

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Natalia y Alba salieron del baño cada una con una sonrisa dibujada en sus caras. Se dirigeron a la habitación de Alba y se acostaron en la cama. Ha sido de locos la casi pillada de Rafi y todo lo que acababa de pasar, pero ha merecido muchísimo la pena porque han soltado todas las ganas que se tenían mutuamente. Estuvieron hablando, entre risa y risa se besaban y no paraban de recordar el momento en el baño y la madre de Alba en la casa.

Alba: bueno chica, como sigamos de cháchara nos dan las 6 de la mañana eh.

Natalia: pues a planchar la oreja entonces.

Natalia se acuesta de lado mirando hacia Alba y le da un beso en la nariz, quién le responde con un suave beso en los labios. Alba le da la espalda, haciendo que su culo rozara con la barriga de Natalia, lo cual hace que se ponga un poco nerviosa pero piensa que ya deberían de dormir. Natalia pasa su brazo por el costado de alba y la abraza.

Natalia: buenas noches, Alba Reche.

Alba: hasta mañana, Nat.

11:27am

Los rayos de sol atraviesan los agujeritos de las persianas, provocando una pequeña luz que hizo que Alba se despertara, y como no, antes que Natalia. Habían dormido toda la noche abrazadas y se había sentido súper cómoda y protegida entre los brazos de Nat. Alba se da media vuelta y tan solo se queda a un centímetro de la cara de Natalia. "es jodidamente preciosa hasta durmiendo" piensa Alba. Se queda embobada mirando cada detalle de su rostro. Sus labios, sus pestañas, su pelo alborotado, las pequeñas ojeras que tiene, cada lunar. No se resiste más y decide despertarla.

Alba: Naaaaaat, buenos días dormilona.
Dice acariciando con los dedos la punta de su nariz.

Natalia no se mueve, solo se limita a quejarse haciendo unos ruidos extraños.

Alba: venga pedazo de floja, que ya es hora de levantarse.

Natalia: cinco minutitos más por favor. Refunfuña con cara de niña pequeña.

Alba suelta una pequeña carcajada porque le encanta este lado de Natalia. Se inclina hacia su cara y la besa. Natalia abre los ojos lentamente.

Alba: sabía que este método iba a funcionar.

Natalia: eres una cabrona.
Saca sus brazos de las sábanas y coge la cara de Alba para acercársela a la suya y darle otro beso.

Alba: venga anda, levántate y hazme el desayuno.

Natalia: oye oye, pero, ¿quién te crees? ¿la reina de España o qué?

Alba: mmm, la reina a lo mejor no, pero la más guapa sí.
Añade guiñándole un ojo a Natalia.

Las dos se levantan de la cama y salen de la habitación de Alba para hacer el desayuno. Natalia se hace una tostada con aguacate y una taza de café, en cambio, Alba opta por un tazón de leche, sin lactosa lógicamente, y un puñado de cereales.
Mientras desayunan, suena el móvil de Alba, la cual se levanta y atiende la llamada.

Alba: ¿Mamá? ¿Cómo?.- Alza la voz.-
¿Pero es algo grave?

Natalia mira a Alba inmediatamente y muy preocupada tras escuchar lo que Alba decía.

Alba: vale, termino de desayunar y voy para allá. Te quiero.
Alba cuelga la llamada y se sienta.

Natalia: ¿Quién era? ¿Ha pasado algo? Pregunta con preocupación.