Capítulo V

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Capítulo V: "Otro Amor."

Roger caminaba hacia la preparatoria, pensando en todo lo que había pasado en tan poco tiempo, todas las cosas que habían cambiado en menos de dos semanas.

Tomo uno de sus cigarros y lo encendió, ya se estaba volviendo una costumbre fumar un cigarro antes de entrar a clases, lo inhaló con una gran tranquilidad.

Miro como los alumnos iban llegando a la preparatoria, tiro su cigarro a la basura y se quedó al lado del faro, contemplado todo a su alrededor, su atención fue captada por un automóvil de lujo negro, el cual paró frente a la institución, de el bajaron los hermanos Mercury.

Roger mantuvo su mirada al frente y paso su mano por su rostro, raspando su barbilla, mientras pensativo los observaba.

Miro como Brian cargaba su mochila y acompañaba a Freddie.

El rizado sintió la mirada del rubio sobre su espalda y se giró y lo miró al otro lado de la calle, recargado en una farola, le sonrió y movió su mano como saludo, mientras el rubio lo imitó, después de unos segundos el rizado entro a la preparatoria y Roger camino hasta la entrada.

El rubio entró y fue recibido por sus amigos y dirigido a los brazos de James.

— ¡Hola Rog! –saludo él.

— Hola James, ¿Qué tal tu mañana? –pregunto alejándose de él.

— Muy bien, gracias –respondió el más alto.

Roger camino a la par de sus amigos, hasta que miró a Freddie, el cual lo llamaba a señales.

— Nos vemos en el salón chicos –dijo Roger.

— ¿No quieres que te acompañe, Roger? –pregunto James.

— No, estoy bien J, ve con los demás –respondió Roger alejándose.

El castaño solo asintió y siguió al grupo.

El rubio llegó a con los hermanos Mercury.

— ¿Qué pasa, Freddie? –pregunto.

— Sí, hola, ¿Cómo estás? Yo, muy bien ¿y tú qué tal, Roger? –dijo Freddie con sarcasmo.

— No empieces tan temprano, Freddie –dijo el rubio.

Freddie solo fingió estar ofendido e golpeó en el hombro a Roger.

— Igualado, vulgar –dijo Freddie tocando su pecho.

— Hola May –saludo Roger a Brian.

— Taylor –dijo Brian.

— ¿Porqué a él si lo saludas y a mí no? –se quejo Freddie.

— Porqué él... es mi... tutor –respondió el rubio.

— Bastardo –susurro Freddie.

Brian lo miró y levantó un ceja.

— ¿Para que me querías, Freddie? –pregunto Roger.

— Quería invitarte a una pinta, después del receso –dijo el Mercury mayor.

— Claro que... –Roger interrumpido.

— No –dijo Brian.

— ¿Qué? ¡No! ¡Tú no tienes ninguna autoridad sobre nosotros! –se quejo Freddie.

— Si la tengo Freddie, porque tú eres mi hermano y sino quieres que nuestros padres se enteren quédate a clases –se giró hacia Roger– y tú -–lo señaló– soy tu... Tutor, eso me hace responsable de ti –dijo el rizado.

Mi Último Cigarro.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora