«THE WISH»†|Stray Kids|

{Stressed Out} + Anuncio

Felix no podía analizar ni una palabra del libro de texto que tenía al frente. Las letras le daban vueltas y su cerebro se negaba a comprenderlas.
-Tierra llamando a Felix- dijo Jeongin con cara seria a su lado-. Amigo, ¿estás bien? Has estado muy raro hoy.
Claro que estaba raro.
Ni siquiera había saludado a nadie al entrar, como siempre hacía, no se había sentado en el asiento de siempre, ni había ayudado a Jeongin con el trabajo de Química que debían hacer ese día.
-Estoy bien- dijo el chico de cabello naranja, sin poner ningún tipo de excusa.
-Claramente no lo estás- el chico de frenos frunció el ceño-. Pero no te interrogaré. Si me lo escondes es porque de verdad no quieres decirme.
Felix adoró con todo su ser que por lo menos una persona en toda su clase lo entendiera.
-Lee- bramó el profesor de Biología, mirándolo a él-. No veo nada escrito en tu cuaderno. Ysi no entregas ese resumen en quince minutos, perderás los puntos de la clase de hoy.
Felix asintió. Un fuerte nudo se formó en su garganta. Debía terminar, debía dejar todo lo que le atormentaba de lado por unos minutos.
Tomó su lápiz de grafito, y comenzó a escribir la primera línea de todos los párrafos que venían en la página.
Él nunca hacía eso... siempre se detenía, leía el texto cuidadosamente, y lo resumía con sus propias palabras. Tratando de que fueran lo más exactas posibles.
El profesor los llamó exactamente 15 minutos después.
-Karla Abernathy- el maestro comenzó a llamarlos en el orden de la lista de clase.
Felix se apartó el cabello del rostro y suspiró. Sabía que no había hecho un buen trabajo con el resumen, pero ya no se podía arreglar.
Miró hacía la ventana, estaba mucho más oscuro de lo normal.
-Felix- dijo Jisung entrometiéndose en su vista a la ventana-. Hola.
Venía con su mochila colgada al hombro. Se sentó en el asiento a su lado, el cual estaba vacío.
-Hola- dijo Felix de mala gana. Si ya no estaba de buen humor, con solo ver a Jisung empeoraba en un 50%.
-Ehm... ¿Como estás?- el chico intentando comenzar conversación-¿Como estás después de lo de...?
-Lo mejor que puedo estar- desvío la mirada hacia el profesor.
-Catrina Fernández- este seguía llamando alumnos conforme a la lista.
-Felix...- Jisung suspiró y miró al techo- Por favor, háblame. Aún soy tu amigo.
-Tú no eres mi amigo...
-Vamos, fue un maldito error- exclamó el chico, exasperado-. Te juro que dejé de verla. Las cosas con Hyunjin están más que bien. Por favor, perdóname.
Felix seguía de brazos cruzados, mirando a la nada.
-Yo...- dijo en un pequeño susurro-. No lo sé, necesito pensar.
Jisung tomó su bolso, se levantó, y se dirigió a su asiento más frecuente, en la parte trasera de la clase.

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«Flashback»

Felix corrió, y corrió, subiendo los escalones de dos en dos, para llegar hasta el cuarto donde se encontraba su madre.
Casi resbala un par de veces, y muchas personas se interponían en su camino. Pero nada lo detuvo, necesitaba ver a su madre.
Comenzó a contar los cuartos: 2,4,6...
Hasta que llegó al número 8, que correspondía al cuarto de su madre.
Abrió la puerta rápidamente y entró a la gran habitación, que se encontraba prácticamente vacía.
Tan solo había una cama, donde su madre yacía, con el control remoto del televisor en la mano, y con cara de aburrimiento.
-Mamá...-. Felix se adentró aun más en el cuarto, cerrando la puerta detrás de sí.
-Cariño, hola- dijo la mujer borrando su expresión seria y reemplazándola por una sonrisa impecable-. Que bueno que llegaste, están transmitiendo Los Simpson.
Felix se quedó en ese lugar, al lado de la puerta sin moverse o decir palabra. Miró a su madre preguntándose: ¿Como puede fingir que está bien, cuando definitivamente no lo está?
Felix se decidió a caminar hacia la cama y acostarse al lado de la mujer, para que esta le abrazara.
-Este capítulo es genial- dijo la mujer sonriendo y mirando la pantalla frente a ella-. Es en el que viajan al espacio y unos alienígenas extraños los quieren comer, ¿recuerdas?
Felix miró a su madre y sonrió. Era su capítulo favorito.
-Si, lo recuerdo- respondió el chico con dificultad, por el gran nudo formado en su garganta-. Es cuando van a ese parque de diversiones y una de las atracciones resulta ser una nave espacial.
Sonrió, pero no río como siempre hacía cuando veía su serie favorita.
Jimin miró su rostro por un segundo. Luego tomó el control remoto y apagó el televisor.
-¿Pasa algo? Pareces serio- abrazó a su hijo por la cadera-. ¿Es por Changbin?
Felix sintió un gran escalofrío en la espalda, y una gran incomodidad al estar al lado de su madre. ¿Como era capaz de ocultarle algo así?
-No, Changbin está bien. Le darán de alta mañana- el muchacho miró al blanco e inmaculado techo-. Si estoy así es por ti, mamá.
Jimin se sobresaltó, y se sentó en el mismo lugar de la cama donde había estado acostada.
-¿Te preocupas por mí?- preguntó la mujer frunciendo el ceño-. Amor, estoy bien. El pasado es el pasado. No quiero que te preocupes por esto...
-Mamá, ya sé que estás enferma- Felix se tapó la cara con las manos, rascándose suavemente los ojos-. El Doctor Williams me lo dijo.
Felix no se descubrió la cara hasta el momento en que su mamá emitió un suave suspiro, que por alguna razón sabía iba acompañado por el llanto.
-No tenía planeado decírtelo hasta que confirmaran la cirugía- Jimin combinaba sus palabras con sollozos de llanto- No quería preocuparte tanto. Primero el divorcio y tu padre, luego Changbin y ahora esto...
-¿Pensaste que mis otros problemas me afectarían luego de saber que estás enferma?- Felix se destapó los ojos para mirar a su madre, quien ahora estaba de espaldas a él, mirando hacia una ventana.
-Mamá, luego de esto nada me importa. Quiero estar para ti en todo momento, quiero cuidar de ti.
La mujer se levantó y caminó hacia el marco de la ventana.
-Lamentó no haberte dicho antes- dijo, apoyando sus manos en este y mirando hacia afuera.
-Yo también lo lamento- dijo una voz masculina desde la puerta. Minho.
-¿Tu lo sabías?- preguntó Felix sentándose en la cama.
-Si, desde hace bastante- el chico sonrió y se sentó a su lado-. Mamá me dijo que no quería darte más problemas.
Felix se masajeó las sienes. En realidad esa no era excusa para ocultarle algo tan importante, pero apreciaba su preocupación.
-Está bien, supongo- se encogió de hombros y se masajeó el cuello-. Pero desde ahora nunca, jamás volverá a haber ningún secreto entre nosotros tres. Somos familia, somos lo único que tenemos.
Su madre volvió a mirarlo, aún con lágrimas en los ojos, y caminó hacia la cama.
Minho y Felix le dieron espacio para que pudiera sentarse entre ambos.
-Bueno, entonces... si tienen algún otro secreto que contarme díganmelo ahora o callen para siempre.- la mujer los tomó a ambos del rostro para apoyarlos en sus hombros.
-Bueno...- comenzó a decir Minho, no antes de mirar a Felix-. Puede decirse que tuvimos una relación... algo cercana.
La mujer lo miró alzando una ceja.
Hizo un ademán de vomitar, metiendo uno de sus dedos en la boca. Sus dos hijos explotaron en risas.
-Chicos, está bien que salgan. Mientras tanto no pase nada con Chan...- dirigió su mirada hacia Felix-. ¿Hablaste con él?
Negó con la cabeza, encendiendo el televisor de nuevo. Seguía otro capítulo de Los Simpson.
-No sé si debería- se rascó el brazo con nerviosismo-. Después de lo que hizo no quiero ni dirigirle la palabra.
-Entonces yo lo haré. Le preguntaré cuál es su problema contigo- Minho habló, sacando su teléfono del bolsillo.
Felix lo miró. Tenía el ceño fruncido y las comisuras de la boca tensas, lo cual significaba que estaba enojado.
Por lo general Minho tenía un carácter bastante fuerte. Y a Felix le gustaba.

Le gustaba él.

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-Felix Lee- repitió el profesor, con tono más fuerte.
El chico se sobresaltó.
-Ehm... claro, ya voy.- el chico se levantó, con su resumen a medio terminar en la mano.
Se posó al lado del profesor, que tomó su cuaderno, desganado.
Lo revisó un par de momentos.
-Estás algo distraído, Lee.
-Si...- se rascó la nuca con incomodidad-. Lo siento.
-Un lo siento no es suficiente- el profesor miraba su resumen, mientras tachaba y apuntaba cosas-. Este es un resumen de un niño de escuela, tú no eres así.
Le entregó el cuaderno a Felix de nuevo. Este suspiró al ver que solo le había dado la mitad de los puntos.
-Espero que la próxima clase estés más despierto.
En ese mismo momento sonó la campana de salida.
Felix no quería pensar en nada, y ni siquiera se despidió de Jeongin al salir. Solo quería irse a casa.
Minho lo esperaba en la entrada, con las manos en los bolsillos de la chaqueta por el inigualable frío.
-Hola, amigo. ¿Qué tal te fue?
Felix se sonrojó al ver que Minho tomaba su mochila y se la colgaba del hombro.
-Estoy algo distraído- dijo, caminando hacia el auto-. Pero creo que se me pasará.
Minho le dió un par de palmadas en la espalda.
-Todo pasa, ya lo verás.
Minho abrió el maletero y metió la mochila de Felix.
Ambos entraron al auto.
-Vaya, hoy fue un largo día.- dijo Felix apoyando su codo en el borde de la ventana.
-Claro que lo fue- Minho dió la vuelta en una curva-. Hace unas horas tu madre te dijo que tiene cáncer.
Felix suspiró, apoyando su cabeza en la puerta. Después de unos segundos, se quedó dormido.

Minho miró el anguloso y delgado rostro de Felix. Como su cabello pelirrojo le cubría la frente, como sus pequeños labios se separaban de poco a poco, y como sus pecas se dejaban ver por debajo del maquillaje que llevaba en el rostro.

Diablos, le encantaba ese chico.

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Hola :D
El capítulo está bastante largo, por lo cual estoy orgullosa, porque estoy teniendo como un bloqueo escritor :(

ANUNCIO
Voy a hacer un maratón de 2 (o puede que sean 3) capítulos cortos contando la historia de Minho, y como Jimin lo adoptó.

No estamos festejando nada, pero siento que se los debo por nunca haber hecho uno ;-;

¡Espero les haya gustado!