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Estaba en el avión y por alguna razón estaba inquieta, tenía una sensación muy amarga en mi pecho.

-Amor estas bien- me pregunto Jin sacandome de mis pensamientos.

-Si, sólo que un poco nerviosa, es un-nuevo inicio y no se si Haneul se sienta cómodo.

-Tranquila estando juntos nada nos faltará, estaremos bien.

-Lo sé, es sólo que.

-Hey pequeña dime cuando te e mentido. 

-Nunca.

Me tomo de la mano y yo me hacer que a dejarle un pequeño beso en los labios, sus palabras me dejan un poco más tranquilas pero eso no quita el echo de que algo me falata, se que deje algo en Seúl pero aún no recuerdo bien y cada vez que trató de recordar una punzada viene a mi cabeza.

-Sabes que- hablé ganandome la atención de Jin- esos sueños donde tu amigo Jeon me molesta en la secuela son muy recurrentes, parecen reales, incluso en algunos aparece su esposa Euna.

-Ya te lo dije amor, antes de conocernos Jeon te molestaba junto con Euna, hasta que le dimos alto a esa situación y te dejo en paz, eso implica que se alejaron de nosotros. 

-Lo se, pero porque no lo recuerdo, no recuerdo nada de las bromas que me hacian.

-El doctor dijo que era un tipo de apnesia llamada Apnesia selectiva, simplemente borraste sé yo mente todos esos malos recuerdos- comentó acariciandome la mejilla. 

-Tal vez te parezca loco pero también he soñado que estamos juntos en el hospital junto a un bebé.

El pareció tensarce un momento para después cambiar sus facciones y sonreír. 

-Dime, me cambiarias por el. 

-Claro que no amor, tu siempre serás el primero en mi vida. 

Nos acercamos-para darnos un beso que poco a poco fue volviéndose intenso hasta que una voz habló.

-Omma ya llegamos-habló un adormilado Haneul.

-No campeón aún falta para llegar a nuestra nueva casa. 

-Ero Appa ya me abudi, domi no e divetido- formó un tierno puchero con sus labios. 

-Lose amor pero recuerda que la nueva casa es grande y tiene una pisina que ti mismo escojiste.

-A se, ero es que estaño a Tío, Jimin, Tio Suga, aunque es mu enojon, también a Tío TaTa, y Hobi, po que TaTa es un alen, y a Tío Sanha y Tio Nam, aún que dompa mi juguete.

-También los extraño hijo pero por el momento no los veremos hasta que estemos en casa si amor. 

-Eta ben Omma.

-Ese es mi pequeño.

Le di un beso en la frente a mi hijo y este se volvió a repostar mientras dejaba suaves caricias en su cabellera castaña, un castaño que me recordaba a alguien pero aún no se quien, me recoste en el asiento y mire hacia la ventana viendo como el atardecer caía, Tal vez sea un nuevo comienzo pero no dejó de pensar que algo me falta.

Tu broma ya no es divertida.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora