Basado en la novela escrita por el autor estadounidense James Dashner, con los mismos personajes como también nuevos, entre ellos el papel fundamental de Jessica.
Jessica despierta aturdida, todo alrededor suyo le es desconocido, mas no está sola...
La noche llegó, nos ubicamos en un pequeño espacio protegido por contenedores. Se hizo una fogata con ayuda de Aris, quien encontró trozos de madera.
Empezamos a formar un círculo alrededor de éste. Divisé a Minho, sus ojos se iluminaban producto del fuego, a un lado de él se encontraba Thomas y al otro no había nadie por lo que camine para sentarme allí. Lamentablemente ese lugar fue ocupado por Lauren quien se había acercado presurosa y empezado a hablarle.
Al parecer Minho no nota lo ocurrido, aunque por qué debería hacerlo, no hay nada de malo que ellos hablen.
Empecé a girar buscando un espacio libre, distinguí uno entre Newt y Sartén.
...
(esa misma noche)
Todos nos encontramos tristes por lo ocurrido - No se supone que éramos inmunes - comenta Minho con la mirada perdida.
- No todos, creo - musita Teresa.
- Si Winston pudo infectarse entonces también nosotros - agrega Newt.
- Jamas creí decir que - Sartén suspira - era mejor el área.
Después de ello solo se escuchan pequeñas voces, entre ellas las de Lauren y Minho, ella parece animarlo puesto a que apoya su mano en el hombro de él haciendo pequeñas presiones.
- Jess, tú, ¿te sientes bien? - pregunta Newt con la vista fija en mí cortando todo tipo de pensamiento que tenía sobre los dos jóvenes ubicados frente a mí.
- Si - aclaro la garganta - lo de mi brazo fue con un pedazo de vidrio, no tenía restos de crank.
- No me refiero a eso - susurra a la vez que observa mi brazo.
Del mismo modo, desciendo mi vista hacia mi brazo derecho, si mi lesión hubiera sido en la extremidad en donde Winston vomitó es muy probable que me hubiera infectado puesto a que la herida aún no cicatriza.
Él agrega - ¿Puedo?
- ¿Qué? - pregunto algo anonadada, Newt se acerca para sostener mi mano y deslizar sus dedos índice y pulgar sobre el.
- Espero seas inmune - musita - debes tener mucho cuidado, últimamente te expones mucho al peligro.
- Al igual que todos, ¿no? - respondo - cuando encontremos al Brazo Derecho, podremos ... - me interrumpe.
- ¿Tú también crees en eso?
- Si - respondo - creo en lo que dice mi hermano.
- Yo igual pero, me estoy basando en los hechos, por como vamos quizá tengamos que acostumbrarnos a vivir así.
- Bueno - suspiro a propósito - de ser así el caso - le doy un leve codazo - ve cuidándote porque es muy probable que te broncees, blanconcito - sonríe.
Ya es hora de que alguien venga y le haga sentir mejor a éste chico.
Sus labios forman una "o" - ¿Cómo me llamaste? - pregunta asombrado.
Río en voz baja - ¡Blanconcito! - musito.
- ¡Eres ... ! - menciona ascendiendo sus manos y empezando a hacerme cosquillas alrededor de mi cintura - ¡Eres todo un caso! - yo sólo atiné a reír.
No duró ni un minuto cuando ambos percibimos las miradas de todos, pero más la de Minho, quien nos observaba con una ceja arqueada. Tragamos saliva, me acomodé sobre mi asiento, Newt hace lo mismo.
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