CAPITULO 27

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Cerré los ojos por unos cuantos minutos, un ruido agudo molestaba a mis oídos; mis ojos se comenzaron a abrir, ahí estaba, aun en el pasillo tirada en el suelo, voltee a verlo y el aun me miraba con coraje, el ruido agudo y molesto era mi Nana gritando. Sentí un liquido caliente recorrer mi nuca hasta mi espina dorsal, lleve mi mano a la cabeza, ese liquido caliente también se adherio a mi mano , baje la mano y la lleve ante mis ojos .

— ¡Sangre ! — dije con una voz dulce .

Regrese mi mano a la herida y me volví a tocar, esta vez extendí mi mano mas, así mi tío Calvin vería el daño que había sufrido; su cara de furia cambio al ver el liquido rojo en mi mano, su cara se convirtió en la de un pequeño al que le han quitado a su madre — ¡ A... A... Amelia ! —  decía como un niño a punto de soltar las lagrimas. Mi Nana estaba histérica y mi tío se disculpaba , ya no tenia poder sobre mi , eso lo sabia .

Mis ojos se comenzaron a cerrar y mi cuerpo cayo al suelo así golpeando mi cabeza por segunda vez.

Abrí los ojos de golpe, había demasiada luz en ese lugar y olía a coco,  me recargue en la cabecera y era otra vez esa habitación nueva. Solo me quede mirando a la ventana cuando por mi mente paso ¡El golpe!.

Rápido lleve mi mano a mi cabeza y toque la herida, dolió al mínimo contacto , ya no había sangre solo había algo duro en ella. Cuando en eso escucho pasos y me vuelvo a acostar fingiendo que aun duermo .

—  ¡Amelia ! — dijo mi Nana de forma amable, abrí mis ojos por segunda vez y le sonreí — He traído tu desayuno— me volví a recargar en la cabecera y mi Nana me puso la bandeja con la comida sobre mis piernas .

— ¿Y Edgar ?—  dije bebiendo el jugo de naranja .

— Esta con tu tío, le da sus gotas —  dijo con una pequeña sonrisa .

— ¿No crees que las a bebido mucho últimamente ?

— Es bueno que te preocupes por tío, después de lo que a sucedido últimamente— solo sonreí y ella salió de la habitación .

Espere unos segundos para escuchar que se alejara y me levante de la cama, puse la bandeja en el suelo, abrí mi ropero y saque un abrigo azul marino algo grande para mi cuerpo, me puse unos zapatos de piso, abrí la puerta y mire el pasillo, primero a la derecha y después a la izquierda verificando que nadie viniera. Camine en dirección a las escaleras, baje cuidadosamente y salí al mundo exterior, el sol me cegó por unos segundos, así mi Nana me vio por la ventana .

— ¡ Amelia ! ¡No !— grito asustada desde adentro. 

Voltee a mirarla  y comencé a correr, corría rápidamente hasta que me perdí en el helado bosque . Me detuve a tomar aire entonces comencé a pensar  ¿Qué es lo que podía hacer ?  ¿huir ? , no Amelia eres una estúpida , tu  no tienes a nadie en la vida. Me comencé a decir mas cosas cuando escucho el crujido de las hojas secas de otoño.

— ¿A donde vas ? — voltee desesperada y vi que era Edgar con un puro en la boca. Baje la mirada y me pregunte entre dientes ¿A donde voy ?  Lo pensé poco y volví a mirarlo a los ojos .

— ¿Pensé que estabas en cama ? —  dijo sacando el humo por su boca .

— ¿En cama ? — dije un poco burlona — No ... creo que iba a escapar o al menos eso pensaba— dije mirando al vacío .

— ¿Escapar ?—  dijo caminando hacia mi .

Reí como una tonta y dije — Que estúpida soy  ¿Escapar ? no tengo ni siquiera el valor de matar a una mosca — dije enfadada.

Edgar me sonrió como un niño divertido y tiro lo que quedaba de su puro al suelo, se acerco mas a mi y una de sus manos se entrelazo con la mía y la otra comenzó a acariciar mi cabello , mientras se acerco a mi oído y dijo con una voz dulce pero al mismo tiempo misteriosa .

— No comas ansias Amelia, te prometo nuestra libertad— pauso unos segundos—  Ah y eso de que no eres capas de siquiera matar a una mosca, no lo creen ellos— se separo de mi oído y una gran sonrisa enferma salió de sus labios .

EL LADO OSCURO DE LA INOCENCIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora