CAPITULO 42

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 Nos abrazamos fuertemente pues el cariño era mutuo, el se acerco a mi oído y dijo con gran pesar —Espero que lo que te dije aquel día acerca de tu vida no destruyan tu felicidad , no dejes que los recuerdos de tus actos perversos aparezcan en este día tan especial—Cuando el dijo esto me separe un algo alterada , le ofrecí el desayuno y el lo comenzó a comer. Tome las rosas y antes de salir de aquella habitación de ensueño el menciono—Lindo color de labios— solo le sonreí y salí de su habitación.

Camine por el largo y resplandeciente pasillo, no paraba de pensar en lo que me acababa de decir, sus palabras de aquella noche se clavaban en mi cabeza como cuchillos, los cuales su único objetivo era destrozarla lentamente ; Entre en mi acogedora habitación y deje las rosas sobre mi tocador , me mire en el espejo y la maldita tristeza se hizo presente al ver mi reflejo , recordar que esa chica que veía , había matado a su padre ... a su propio padre , y lo peor de todo es que ni siquiera lo recordaba.

Corrí al baño a limpiar las lágrimas he intenté despejar mi mente de mi oscuro y sucio pasado. Mientras me miraba en el espejo de mi baño vi dos moretones en mi cuello uno en cada lado de el , eran marcas, entonces fue que recordé que Víctor las había provocado , las acaricie y me hice una pequeña sonrisa , me encantaba ver como el dolor que demostraban aquellas marcas de pasión por parte de Víctor, se hacían presente en mi pequeño y delicado cuello .

Baje y me senté en una de las sillas. Quede frente a frente con ese reluciente piano negro , seguí pensando en las cosas que jamas había hecho , entonces mire el pequeño buró de madera , lo observe detenidamente , cuando recordé que ahí era donde mi tío Calvin guardaba los cigarrillos y puros , me levante del cómodo asiento y me acerque sigilosamente , abrí la puerta de este y ahí estaban , tomé la caja de puros y me la lleve hasta mi asiento de piel. Saque un puro y comencé a fumar , era algo fuerte y picaba en mi pequeña garganta , el humo que mis pulmones exhalaban , se esparcía por el aire , era algo realmente bello, pero al principio fue muy difícil de hacerlo.

Fume dos puros más, tal vez fume como una frenética por todo lo que pasaba por mi mente en esos momentos, tome el tercero, lo encendí con un cerillo he inmediatamente el fuego se esparció en el. Lo metí en mi boca color carmín, he inhale el tabaco, después de unos segundos lo exhale, el humo que soltó el acto nubló mi vista, pues este era muy denso, escuche pasos aproximarse hacia mi, el humo aun era denso pues el puro aun lo soltaba , alcance a ver la sombra de un individuo frente a mi , el humo comenzó a desaparecer y vi de quien se trataba era... era...

Edgar .

Introduje nuevamente el puro a mi boca y lo inhale , el me miro incrédulo y pude ver su ira en sus ojos , pues su presencia para mi , me era indiferente y el acto que realizaba no le agradaba en lo absoluto .

—¿Amelia? —pregunto serio. 

Lo mire a los ojos y solté el humo, me encontraba realmente molesta con él , me levante del asiento y acomode mi pequeño vestido, pase a un costado de el como si  no existiera , comencé a caminar hacia el recibidor y el me volteo a ver .

— ¡Amelia !— dijo  con su varonil voz , entonces  me detuve a pensar ¿Que era lo que hacía ? el hombre que amaba se encontraba ahí preguntando por mi, mis deseos de correr hacia el , abrazarlo , besarle , hacerle el amor ... eran tan fuertes que me di la media vuelta , para encontrarme con sus ojos , esos preciosos ojos negros que me observaban con gran amor e incredulidad — ¡Me dejaste !— dije con la voz quebrada, el me hizo una cara de culpa y se acercó a mi .

—Mi pequeña Amelia, tenía que dejarte, pero prometí regresar y aquí estoy cumpliendo mi promesa.

—¿Regresar ?— dije haciendo una mueca —Volviste un mes y medio después, no supe nada de ti ¿a eso le llamas volver ?—Le repliqué muy molesta.

EL LADO OSCURO DE LA INOCENCIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora