Rompiendo mis reglas

21 - Audiciones

[...]

Golpee la puerta de la habitación de Cristal. Al escuchar un "adelante" pasé.
La veía caminando nerviosa por toda la habitación con muchos vestidos en la cama. Había llamado a una linea de ropa de vestidos para bodas. La gente estaba abajo pero Cristal se puso nerviosa y se encerró en la habitación con algunos.

-Hola, querida.

-Cristal ... No estás bien. Déjame ayudarte a tomar una decisión. La boda es mañana, no tienes toda la vida.

-Soy una persona horrible - se lanzó hacia la cama y tapó su rostro con una almohada.

-Cristal, te estás comportando como una adolescente en crisis. Mi padre no se enamoró de ti por lo que usas, sino por como eres.

-Lo se. Pero mañana debo estar esplendida. Es el día de nuestra boda. Tu padre se pone un traje cualquiera y ya va perfecto y yo aun no se ni que aros usar.

-Para eso estoy aquí. Yo recomiendo uno sirena con un leve escote corazón y mangas. Sin aros, tendrás el velo. Unos zapatos costosos, de tacón y listo. Un maquillaje sencillo, sombras con brillo (poco), labial carmín (muy clarito) y delineador. Además de la base y corrector. El cabello en un moño (prolijo) y el flequillo por los costados. Algo así como Anastasia Steele.

Cristal quitó la almohada de su rostro y sonrió como una niña viendo un unicornio.

-Eres la mejor hija del mundo.

-Lo se. Y tu no eres como la madrastra de cenicienta. Menos mal.

Me abrazó.

-Pediré otra linea de ropa, de vestidos, para ti. Escoge el que quieras.

-Puedo arreglarme con los que me dejaste cuando llegué. Esos con las etiquetas.

-No. Esos son ... Mas casuales. En diez minutos estarán en tu habitación. Y llama a tus amigas, que escojan uno. O muchos, da igual.

-Gracias Cristal - dejé un beso en su mejilla.

Cerré la puerta detrás de mi. Félix estaba enfrente mio.

-No necesitas un vestido. Ponte trapos y seguirás siendo hermosa - sonreía.

-¿Estas seguro que no estas enamorado de mi o algo así?

-No. Tengo novia. Y ... Eres mi hermana.

-¿Tienes novia?

-Claro. Primer día de escuela y ya tengo veintiocho amigos y una novia.

-¿Como hiciste? ¿Les pagaste?

Reía.

-Que simpática. Soy irresistible. ¿Que mas esperabas de mi?

-¿Como se llama?

-Molly. Es un año menor que nosotros.

-No puedes enamorarte en un día.

-Si, si es amor de verdad.

-Okey ... Iré a llamar a mis amigas. Adiós.

Entré en mi habitación y las llamé. Les avisé y aceptaron emocionadas.

[...]

La gente de la linea de ropa, ya estaba aquí. Tenían muchos de esos percheros con ruedas, con cientos de vestidos. De una sola de pieza y otros de dos. Y mis amigas llegaron unos minutos después.

-Tu madrastra debe ser la mas cool del planeta - Juls miraba todos los vestidos.

-Si ... Creo.

-Créelo. Es súper. Si cenicienta hubiese tenido un madrastra así, no existiría el cuento - Lu también veía los vestidos y los precios.