[...]
Caminaba por los pasillos. Mis muñecas estaban muy rojas y mis tobillos también. Tuve que usar una remera de manga larga y unos jeans para tapar aquellas marcas. Me detuve al ver a Greg en su casillero.
-Greg - susurre furiosa.
Centró su atención en mi.
-Dejaste mis muñecas y tobillos marcados con tus estúpidas esposas.
Sonrio como tonto y aquel brillo volvió a sus ojos.
-Deja de sonreír así. Tengo roja aquellas zonas mira - les mostré mis muñecas.
-Te dije que no te movieras.
-Entonces tu no vuelvas a hablarme.
Me di la vuelta y entre en el salón. Me senté al fondo, cosa que hizo que todos me miraran raro. Los ignore.
[...]
-¿Ali, te pasó algo? - preguntó Lu - ¿Dónde está Greg?
-No, nada - revolvía mi ensalada con el tenedor, sin apetito - Yo que sé, tengo mis propios asuntos.
Me levanté y entré en el gimnasio. Me senté en las gradas. Una mano se posó sobre mi hombro.
-Hola - Noah sonreia - Yo ... Queria disculparme.
-No estoy de humor, Noah.
-Pero ...
-Dije, no.
-Yo vine a disculparme. Si te sucede algo sabes que puedes contar conmigo. Otra vez ...
-¿Si te digo, te callas? - dije seria mirandolo sin animo.
Solo me miro. No se si esperaba respuesta o no pero se la dije.
-Greg me hizo esto - subí un poco mis jeans para que vea mis tobillo y corrí las mangas de mi camisa para que vea mis muñecas.
-¿Como?
-Sexo. Que suerte tienes, tu eres virgen.
Me levanté y salí. Abrí mi casillero y tomé mi mochila. Salí de la escuela.
-¿Te llevo?
-No gracias, Andrés. No se si recuerdas pero en ese mismo auto - miré por sobre su hombro - intentaste violarme. Paso.
El muy tarado, solo se encogió de hombros como si eso no fuera nada malo.
-Idiota - dije antes de comenzar a caminar. Estos tacones comenzaban a colmar mi pasciencia. Por lo que los arrojé a la fuente del parque.
Me senté en el borde y cubrí mi rostro.
-No me considero super heroe pero en estos momentos no diria aquello. Mas bien, me considero afortunado.
Un chico alto, de cabello rubio y ojos oscuros apareció delante de mí.
-No acepto ayuda de extraños. Además, me las arreglo muy bien.
-¿Por eso arrojaste tus zapatos a la fuente, tu maquillaje está corrido, tus cabellos despeinados, muñecas y tobillos rojos?
-¿Quien eres?
-Tu heroe.
Rei.
-Dejame, no estoy de humor.
Me levante y comencé a caminar. En mi pie se clavó una astilla. Me senté en el suelo y comencé a quejarme. El chico se acerco a mi con una sonrisa.
-¿Te ayudo?
Rode mis ojos y asentí. Se arrodilló delante de mi y con cuidado quitó la astilla. Estiro su mano, la tomé y me quedé de pie. Me tomo entre sus brazos, alzandome.
-Sueltame - me queje revolviendome entre sus brazos.
-Tengo auto, me parece mejor opcion. Y no te estoy preguntando, es una orden, princesa.
Abrió la puerta del auto gris. Era nuevo y olia a perfume. Me dejó en el asiento del copiloto. Cerró la puerta, rodeo el auto y entró por la suya.
-Vivo en ...
-Se donde vives. No preguntes, ya verás - Me guiñó un ojo.
¿Otro idiota? Estoy empezando a enojarme con Dios. Le pedí un principe, no muchos idiotas, pervertidos.
[...]
El chico misterioso, que aun no me decia su nombre, me cargó hasta mi habitación. Ni siquiera hasta la puerta, sino que subió las escaleras y entró en mi cuarto. Me puse una calza negra y una remera blanca.
-¿Como te llamas? - pregunté curiosa.
-Primo.
Alcé una ceja.
-Hola cariño - Cristal entró.
Se quedó viendo al chico.
-¿Logan?
-Tia.
Ambos se abrazaron.
-Ali, el es tu primo, Logan.
-¿Es broma?
-No - dijo el sonriendo - Por cierto, primita, eres muy sexy.
Cristal le pegó en el hombro. Rode mis ojos. Lo que me faltaba, un primo acosador. Cristal salió.
-Mi madre murió cuando cumplí ... veintidos. Para entonces, ya me habia ido de mi casa. Pasó un año. Tengo veintitres y mi padre me dejó cuando era pequeño. Busqué a mi tia y me enteré que tenia una familia. Los afortunados Evans.
-¿Como sabias a que escuela iba?
-Hace exactamente ... tres dia, vengo ¿Como decirlo?
-¿Espiandome?
-Algo asi. Tranquila, no te averguences de tu cuepo, es muy bello.
-¿Me viste desnuda?
-No. Era broma. Por cierto, ese Greg. Un idiota.
-¿Te infiltraste como alumno, en mi escuela?
-Que inteligente, primita. Pero tranquila, tengo veinitres, no estaría contigo. No soy de las cirugias - me vio de arriba a abajo.
-No tengo cirugias - le pegué con la almoahda.
-¿Me puedo quedar? Podriamos dormir juntos, bajo las sabanas. Hace frio y en estos dias lo que mas quiere la gente es alguien a quien abrazar.
-Dormidas en el jardin.
-Ruda, eh.
-Ve con Felix, debe estar aqui. Dos como el, voy a volverme loca. Por cierto, quizas tu no, pero tu primo, es un maldito asqueroso. Tu igual, ¿Por que dije que no? Vete - señalé la puerta.
-No.
-¿Como dijiste que te llamas? ¿Logan?
-Si.
-Logan. Ya que eres mi primo, entiende que no fue el mejor dia que eh tenido y tu has sido testigo de eso. Te lo suplico.
-Bien. Descansa.
Wow. Ya era de noche. ¿Es posible que los problemas hagan que tu día pase rápido?
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Rompiendo mis reglas
Teen Fiction3 chicas, un cambio radical, el amor de secundaria y una estúpidas reglas. "Empezó como un juego, terminó formando un imperio" Y todo gracias a unas estúpidas reglas. ¿Quien lo diría?