XXV

71 15 27
                                    

Narra Tyler

—Listo...— limpié mis manos en mi ropa apreciando lo ordenada que había quedado la habitación. 

—Gracias, Tyler— me sonrió Jenna desde su cama.

—De nada— le sonreí de vuelta. —Si necesitas algo... Josh y yo estaremos aquí al lado— 

—Está bien— asintió mientras se acurrucaba en su nueva cama.

Salí de la habitación y vi a Josh recostado en su cama. Y si...

Me acerqué con cuidado de despertarlo, estiré mi mano y la acerqué de a poco a su cabeza. Sentí sus rizos rozar con la yema de mis dedos y... acaricié su cabeza.

Sentí una punzada fuerte en el corazón y caí al suelo. Al alzar la vista, todo estaba borroso, pero ya no estaba en la casa del árbol. Funcionó.

No podía ver con claridad, sentía dolor en mi pecho y cayeron lágrimas involuntarias de mi rostro.

¿Esto es lo que sientes, Josh?

A lo lejos, en una isla, pude ver muchas alas, muchos rostros borrosos juntos. Me acerqué volando, tenía alas, pero no eran muy buenas, o quizá yo no sé cómo usarlas.

Comenzó a faltarme el aire mientras más me acercaba, me hacía más lento, parecía imposible llorar. Y de pronto se escuchó el llanto de un bebé...

Un llanto increíblemente desgarrador.

—¡Tyler!— Josh tomó mi mano y me empujó. Volví a la casita. —¿Qué haces?— dijo desesperado.

—Yo.. sólo te veía dormir— dije nervioso.

—¿Qué pasó?— Jenna se asomó por la puerta de su habitación, rascando sus ojos.

—N-Nada, Jenna... ve a dormir, tranquila— le dije intentando que volviera a dormir.

La verdad, fue sencillo. Sólo estaba de pie, tambaleándose con los ojos cerrados. De inmediato volvió a su habitación y yo caminé hacia mi cama.

—Tyler ¿Qué hacías?— susurró Josh, insistiendo con el tema.

—Nada, sólo... quise ser tierno, nada más— me quité mi camiseta, me metí a la cama y me acomodé dándole la espalda.

—Tus ojos...— intentó seguir con la conversación. —Era cierto... Son como... estrellas— 

Lo ignoré. Me gustaría preguntarle el significado de ese lugar que vi, de los sonidos y los demás que estaban ahí presentes, pero yo no me sentiría cómodo si alguien aparece y empieza a leer mis pensamientos o ver mis recuerdos sin mi consentimiento.

******

—Tyler...— escuché la voz de Jenna. —Despierta...— susurraba.

—Tiene el sueño pesado, hazlo así— esa era definitivamente la voz de Josh.

Tenía mucho sueño, no quería despertar.

—¡Despierta!— Josh me golpeó con su almohada.

Abrí un ojo y los vi riendo de mi. Pasé mis manos por mi cara y luego por mi cabello, ya que se había desordenado por completo.

—¿Qué ocurre?— pregunté y luego bostecé.

—Voy por una libreta, comida y lápices— dijo Josh. —¿Quieres que te traiga algo?—

—Mmm...—lo pensé bien por unos momentos. Iba a decir que no, pero si le pido algo, puede que se tarde más buscándolo. —Quiero libros, unas libretas y... ¿Crees que puedas conseguir de esas manzanas de la otra vez?—

Isla de Aves No Voladoras || Tyler JosephDonde viven las historias. Descúbrelo ahora