Isla de Aves No Voladoras || Tyler Joseph

V

Narra Tyler

La primera fotografía sobre la enorme pila, tenía a tres aves. Dos niños, una niña. Al girar la fotografía noté que decía: "Zack, Jay y Madison".

—¡Tyler!— la voz de Josh provocó que diera un salto y lanzara las fotografías al suelo.

—Josh... L-Lo siento— mis manos temblaban.

—¡¿Qué hacías revisando mis cosas?!— dijo alterado, acercándose a mí con rapidez.

Me cubrí con ambas manos aterrado pensando que me golpearía. Estoy tan acostumbrado a los golpes, que podría reconocer en seguida que cuando alguien se acerca de esa manera, es con intensiones muy agresivas.

Y efectivamente. Josh apartó mis manos y me dio una bofetada. Pero al tenerlo más de cerca, noté que sus manos estaban rojas y con rasguños.

—Josh... ¿Qué hiciste?— pregunte asustado señalando sus manos. 

Miró sus manos y se las limpió en su ropa para tomar rápidamente todas las fotos y esconderlas en su chaqueta. 

—¿Qué viste?— preguntó firme. 

—No respondiste mi pregunta— solo podía mirar el suelo. Estaba asustado, demasiado como para poder verlo a la cara.

—Nada que te importe. ¿Qué viste, Tyler?— se veía desesperado.

—N-nada...— volví a cubrirme con miedo de que volviera a golpearme. —Sólo una foto de 3 niños—

Josh suspiró aliviado y se dejó caer en su cama. —Es de muy mala educación husmear en las cosas de otros, Tyler—

Fruncí el ceño ante aquel comentario. —Lamento no haber tenido tan buena educación como la que tuviste tú, Josh—

—Ay, no empieces— se cruzó de brazos molesto. —¿De verdad vamos a pasar el resto de nuestras miserables vidas peleando? No podemos estar ni un solo día sin discutir— bufó.

—Yo no entiendo por qué te molesta tanto...—

-

Ha sido complicado adaptarse a Josh. Oculta demasiadas cosas, pero también es muy agradable y me cuida. He estado creciendo y el también junto a mi. He cambiado mucho y aprendí demasiadas cosas.

Ya voy a cumplir 12 años y cada vez que se acerca esta época, recuerdo el día de navidad que me escapé de ese horrible lugar, de cuando conocí a Josh y aquella amiga que hice hace ya tiempo.

Josh aún oculta cosas y a veces se va lejos y no vuelve.

A veces me enfado y trato de tener secretos también como venganza, pero es inútil. Siempre termino contándole todo por mi propia cuenta. Como la vez que traté de sorprenderlo por aprender a tocar los instrumentos.

He visto pasar muchos barcos a lo lejos de la isla, pero solo puedo verlos oculto en la casa del árbol, porque Josh me obliga a estar donde sus ojos me vean para protegerme.

Dice que es porque no quiere que lo abandone, pero yo no haría eso. Después de todo, a pesar de nuestras muchas discusiones, es el único amigo que tengo.

No he vuelto a husmear en las cosas de Josh, aún por mucha curiosidad que tenga, porque ahora tengo curiosidad por otras cosas, pero a la vez me aterra.

¿Qué hay más allá? ¿Cómo es la vida en las islas más lejanas? ¿Cómo es todo detrás de las montañas? ¿Qué otras cosas existen aquí? ¿Habrán criaturas extrañas también del otro lado? Son demasiadas preguntas y creo que eso es porque me aburro mucho.