24: La chaqueta

106 36 16
                                    

Riley's POV

Luego de clases, me dediqué toda la tarde a hacer mis tareas... Y...

Ay, por favor. Como si fuera novedad.

Nadie te preguntó.

¿Qué decía? Ah, claro.

Estuve haciendo las tareas en un tiempo record, hasta que fuí interrumpida por los gritos de mi hermano.

Sin poder evitarlo, rodé mis ojos y tomé un descanso. No podía concentrarme.

Luego de unos minutos, noté que los fuertes gritos no paraban, así que me metí a la ducha y me dí un baño.

Sí, un baño.

¿Por qué no? Eso me relajará un poco.

En fin, después de una larga sesión de agua y jabón, cubrí mi cuerpo con una toalla y salí a mi habitación para buscar un vestido cómodo.

Pero no estaba sola.

—¿¡Qué...!? —Me exalté al ver a Nick.

Nick... Sentado... En mi cama...

—¿¡No te enseñaron a tocar!? —Lo agarré de un brazo y con mi otro brazo mantuve firme la toalla en mi cuerpo.

—Toqué... Pero nadie respondió, así que me senté a esperarte. —Se excusa.

Empujo a Nick fuera de mi habitación y me decidí por cerrar mi puerta dramáticamente. Pero eso no sucedió.

Lo primero que pasó por mi mente fué la mano o pie de Nick deteniendo la puerta.

Observé la perilla de esta y ví una cuerda amarrada a ella que no permitía que la puerta se cerrara.

Significa que estuve con la puerta mal cerrada todo este tiempo.

Peleé con la puerta para poder cerrarla de la manera mas ridícula que alguien pudiera imaginar.

Demonios.

—Detente, sólo haces el ridículo. —Nick se acerca al objeto que nos separaba y me ayuda a soltar la cuerda. —¿Lo ves? Ya está. —Sus ojos marrones observan los míos por un segundo, y yo no digo nada. —Mm, ¿Riley? —Parpadeo. —¿No vas a vestirte?

Y entonces caí en cuenta de que aún seguía en toalla.

Genial.

Terminé de cerrar la puerta y me vestí lo más rápido posible.

Abrí la puerta y Nick entró observando todo lo que estaba en mi habitación. Después de examinarlo todo, posa su mirada en mí.

—Veo que estabas haciendo los deberes. —Dice.

—Sí, hasta que mi hermano empezó a gritar... De ahí no pude concentrarme.

—¿Qué...? ¿Tu hermano, gritar? ¡Pffff! —Hace un ademán con la mano.

No hace falta decir lo falso que ha sonado eso, meh. Ni que yo quisiera saber que le andaba gritando mi hermano a mi amigo.

—Cambiando de tema, ¿para qué viniste? —Mis manos se colocaron en mi cintura.

—Quería... Verte. —Sonríe inocente.

Mis cejas se hunden, no por mucho tiempo ya que la sonrisa se contagia. Maldito Nick y su sonrisa Colgate.

La pasta #1 recomendada por odontólogos.

—Ya me viste. —Dije. —¿Ahora qué?

—¿Quieres ver una película?

Chica Perfecta [RN#1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora