El Despertar

¡Los protegeré!

Narra Gon

Me encontraba practicando con mi caña de pescar. Debía mejorar mis habilidades si es que quería robarle la placa a Hisoka.

- Esto va estar complicado. - suspiré y me quedé mirando el cielo. - ¿Como le estarán yendo a los demás?

No podía quitarme la idea de que tal vez era el único que no había conseguido su objetivo, pero luego recordé que teníamos una semana y se me quito.

- Realmente soy un tonto jaajajja - me rasque la cabeza por la estupidez que había pensado.

Fue en eso que una gran explosión me asusto, causando que casi metiera la caña al lago.

- ¡PERO QUE FUE ESO!

Dirigí mi vista al horizonte y pude contemplar una gran nube negra. Todos los animales que estaban en el bosque corrían asustado por la explosión. Por una extraña razón se me vinieron las imágenes de mis amigos.

- Espero que no les haya pasado nada a los chicos. - dije preocupado mientras me escondía arriba de un árbol por si es que alguien apareciera de la nada.

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Narra Killua

- Esto fue fácil.

Había conseguido la placa de mi objetivo. Era uno de esos hermanos que siempre andan juntos y tienen un aire de superioridad, pero por favor, con un solo golpe los noquee a los tres. Sí, me estaban acechando desde el inicio de la prueba, tal vez pensaron que era alguien débil pero si supieran quien soy en realidad, hubieran salido corriendo por el susto.

- Bueno. - suspiré colocando mis manos en mi nuca. - Será mejor que llegue donde tenemos que reunirnos. Demás que los chicos ya tienen sus placas, aunque de Gon lo dudo. Que mala suerte tiene. - dije riendome sutilmente.

Mientras caminaba escuché una explosión cerca de donde estaba.

- ¡PERO QUE DEMONIOS!

Fui corriendo a toda velocidad hacía la dirección de donde ocurrió el estallido. A medida que me acercaba sentí un escalofrío inquietante. Me detuve de golpe y me escondí en unos arbustos.
Escuché unos pasos que se originaban dentro de la nube negra de tierra y fue cuando vi salir a alguien.

- ¿Kumi?

Vi salir a la vieja, digo, Kumi de esa nube de tierra. Estaba como si nada. No tenía ninguna emoción en su mirada.

<< ¿Qué le habrá pasado? >> pensé extrañado.

Tenía esos ojos negros que dan miedo pero luego volvieron a la normalidad. Suspiré aliviado a ver que ya no estaba en ese modo de "mataré a cualquiera que este cerca".
Fue en eso que escuche a Kumi decir algo.

- Espero que los chicos estén bien. - dijo mirando el cielo. - Oye Killua...

Cuando dijo mi nombre me dio un respingo por el imprevisto. ¿Como es que sabía que estaba aquí? No lo sé pero estaba en estado de alerta si es que pasaba algo. No me moví de mi lugar.

- Cuidate ¿si? En caso de que te pase algo te protegeré. Los protegeré a ustedes. Hablo de Gon, Kurapika, Leorio y tú. ¿De acuerdo? - volteó a mi dirección haciendo que me sobresaltara . - No tienes que estar asustado Killua. Ven.

Estuve unos segundo analizando la situación hasta que me atreví a salir, ya que mi instinto me decía que podía confiar en Kumi.

- No creí que me descubrieras. - dije despreocupado.

- Es imposible no sentir o no distinguir tu presencia Killua. - me sonrió amablemente. - Bueno para una persona normal no la hubiera sentido. Eres muy sigiloso Killua.